Bertie Benegas Lynch, presidente de la Comisión de Presupuesto

Luego de la accidentada jura de los 127 nuevos legisladores y con un recinto con una virtual paridad entre las fuerzas predominantes, los diputados se retiraron ayer con la convicción de que en las próximas horas comenzará la primera discusión que enfrentará la nueva Cámara de Diputados: el armado de las comisiones. El oficialismo hizo trascender que llamará a la conformación de las comisiones de Presupuesto y Hacienda, Asuntos Constitucionales y Legislación Penal, para tratar el Presupuesto 2026, el proyecto de Inocencia Fiscal, el que modifica la Ley de Glaciares y la reforma del Código Penal. El que se refiere a la reforma laboral ingresará por la Cámara de Senadores.

Otro punto que también comunicaron algunos legisladores de La Libertad Avanza al resto de los bloques es que el oficialismo tiene la intención de ir al recinto rápidamente. Este punto generará el primero de los problemas y es que los nuevos diputados asumen el 10 de diciembre, por lo que tendría que llamar para el armado de la comisión ese mismo día, teniendo en cuenta que sólo le queda una semana completa hasta fin de año -24 y 31 de diciembre caen miércoles-.

Pero la discusión más fuerte se dará en el armado de las comisiones. En el caso de Presupuesto y Hacienda la comisión está conformada por 31 diputados. Si se utiliza el sistema Dhon`t quedaría con 12 legisladores La Libertad Avanza y otros 12 Unión por la Patria. El resto de los lugares deberían ser ocupados por el interbloque Unidos – Provincias Unidas, Encuentro Federal y la Coalición Cívica, o el que conformó el PRO, UCR, Por Santa Cruz (José Garrido), Adelante Buenos Aires (Karina Banfi) y MID. Ambos grupos cuentan con 22 legisladores por lo que se disputaría el tercer lugar al que le toca 3 sillas. “El que sume un diputado más se lleva una silla más”, reconoce un operador parlamentario. El que pierda quedará con una representación de dos diputados al igual que el quinto bloque en representación que podría ser Innovación si cierra un interbloque con alguno de los “sueltos”.

Esto va a generar una fuerte discusión por dos razones. La primera es que todos aquellos que no tengan más de 5 diputados en el bloque no tendrán voto en la Comisión – hay 7 bloques en esa situación- y la segunda es porque Menem no quiere que se cuenten los interbloques porque, según aseguran que dijo, “se unen para esto, es muy promiscuo” aseguran que dijo.

Menem retuvo la facultades delegadas para el armado de las Comisiones

El artículo 105 del reglamento habla de la representación de los “espacios políticos” lo que genera la discrecionalidad de discutir por bloque o por interbloque. Y acá es donde jugarán las facultades delegadas a Menem.

Esta discusión fue prevista por los bloques de la oposición que habían acordado no otorgar las facultades delegadas. Sin embargo, a la hora de la votación el PRO y la UCR se desmarcaron del entendimiento y votaron junto al oficialismo, lo que significa que la Presidencia terminará teniendo cierta discrecionalidad en el debate de cómo se conforman las comisiones.

Con la decisión tomada en el recinto luego del cambio de opinión del bloque que conduce Cristian Ritondo y la radical mendocina Pamela Varesay, Unión por la Patria hizo saber su malestar con que nuevamente Menem tenga facultades delegadas en la voz del presidente del bloque peronista, Germán Martínez, quien tomó la palabra y señaló que en los años anteriores el diputado de LLA “funcionó más como jefe del bloque libertario que como presidente de la Cámara”. Este reclamo tiene que ver con que durante este año, cuando se conformaron las comisiones, Unión por la Patria reclamó que perdió lugar por decisiones de la Presidencia en cada una de las 46 comisiones que tiene la Cámara Baja.