El Fortaleza dirigido por Martín Palermo se encuentra a un solo partido de lograr una permanencia que parecía imposible en el fútbol brasileño. Tras vencer por 2-1 al Corinthians, el equipo del norte de Brasil salió de la zona de descenso cuando resta apenas una jornada para el cierre del Brasileirao, un escenario que pocos habrían anticipado al momento de la llegada del técnico argentino.

El arribo de Palermo al club, el 3 de septiembre, se produjo en un contexto crítico: el equipo ocupaba el penúltimo puesto de la tabla, con apenas 15 puntos en 21 fechas y una desventaja de siete unidades respecto a la salvación. La comparación con sus rivales directos acentuaba la dificultad del desafío: Fortaleza estaba a seis puntos de Juventude, que entonces era 18° y hoy ocupa el 19° lugar, mientras que actualmente le lleva ocho de ventaja.

La campaña bajo la conducción del ex goleador de Boca Juniors se ha caracterizado por la paridad y el sufrimiento. En 14 partidos, el equipo sumó ocho victorias —cuatro de ellas consecutivas—, cuatro empates y cuatro derrotas, con un saldo de 21 goles a favor y 20 en contra. El único triunfo por más de un gol de diferencia se produjo en el debut de Palermo, con un 2-0 sobre Vitória en la 23° jornada.

El reciente enfrentamiento ante Corinthians mantuvo la tónica de dramatismo. Fortaleza resistió los ataques del rival, con una actuación destacada del arquero Brenno, quien realizó una atajada decisiva en los minutos finales. En ofensiva, la eficacia fue determinante: los argentinos Tomás Pochettino y José María Herrera marcaron los goles, el primero tras una jugada colectiva y un pase atrás, y el segundo tras una acción individual en la que superó al arquero con una definición sutil.

El festejo del argentino Tomas Pochettino (@FortalezaEC)

En la alineación titular también figuraron los argentinos Eros Mancuso, Emanuel Brítez, Gastón Ávila y Adam Bareiro, mientras que Juan Martín Lucero y Deyverson aguardaron su oportunidad en el banco de suplentes.

La respuesta del público local fue contundente: el Arena Castelao se llenó para presenciar una noche que quedará en la memoria de los aficionados. El equipo mostró solidez defensiva, con la zaga central argentina despejando cada centro rival, y un mediocampo en el que la dupla Sasha-Pereira logró neutralizar a los jugadores más talentosos del Corinthians. La ovación que recibió Pochettino al ser reemplazado evidenció el reconocimiento a su desempeño.

El recorrido hasta este punto no estuvo exento de dificultades. El inicio de la gestión de Palermo arrojó tres victorias y cuatro derrotas, pero a partir de la trigésima fecha el panorama cambió: tras imponerse por 1-0 ante Flamengo, Fortaleza encadenó cuatro empates y, posteriormente, cuatro triunfos consecutivos. Este cierre de temporada le permite soñar no solo con la permanencia en la máxima categoría, que ostenta desde 2018, sino también con una posible clasificación a la Copa Sudamericana, ya que las posibilidades matemáticas se mantienen abiertas.

La permanencia de Fortaleza en la Primera División también se explica por los resultados de otros equipos involucrados en la lucha por el descenso. Aunque Santos goleó 3-0 a Juventude con un triplete de Neymar, Vitória cayó 4-0 ante Bragantino —pasando de estar dos puntos por encima de Fortaleza a quedar uno por debajo y en el puesto 17—, mientras que Internacional fue superado ampliamente por San Pablo y se encuentra en una situación comprometida, en la 18° posición y a dos puntos de la salvación.