Los ingresos del Impuesto al Valor Agregado se mantuvieron constantes en octubre en términos reales (REUTERS)

Luego de la victoria en las elecciones legislativas, el equipo económico quiere dejar atrás el “apretón monetario”, liberar pesos y que las tasas bajen para que la actividad comience a repuntar. Y si bien los datos oficiales vienen con rezago, ya hay indicadores que pueden adelantar lo que pasó en la economía de octubre.

Uno de ellos es la recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA), un tributo atado al consumo. El lunes, la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) dio a conocer los ingresos que tuvo el estado nacional en octubre. Con $16,1 billones, presentó una caída real del 3,6% si se considera que la inflación de ese mes fue del 2,3% según cálculos del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF).

La explicación se encuentra en la eliminación del impuesto PAIS y la caída de la recaudación del impuesto sobre los Bienes Personales (-33,7%), por el Régimen Especial de Ingreso (REIBP) que adelantó el cómputo por cuatro años, junto con Internos coparticipados que tuvo una variación interanual del -10% y los Derechos de exportación (-7%).

En el caso del IVA la recaudación fue por $5,7 billones, lo que implicó una variación interanual del 31,7%, un porcentaje muy similar a la inflación acumulada entre octubre de 2024 y septiembre de 2025. Ese dato podría adelantar que en el mes de las elecciones legislativas no hubo ni una baja ni un salto en la actividad, sino que se mantuvo en términos constantes.

Las mayores variaciones interanuales reales la tuvieron los Derechos de importación, Combustibles líquidos, Ganancias y Créditos y débitos en cuentas bancarias.

Los ojos de los economistas están puestos en el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE), que en el segundo trimestre se ubicó en valores negativos y en caso de sumar uno más, Argentina habría entrado en una recesión técnica.

Los segundos tres meses del año arrancaron en abril con una suba del 1,2% intermensual en la serie desestacionalizada, pero después le siguió una caída en mayo del 0,2% y en junio del 0,6%. Siendo una tendencia que continuó en julio con -0,1%.

En el último dato que dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), de agosto, la actividad tuvo una variación intermensual de 0,3%, pero bajo un esquema en donde los sectores atados al bolsillo de los argentinos continúan golpeados. Mientras que Intermediación financiera tuvo una v.ia del 26,5% (incidencia del 0,9 p.p.), la industria manufacturera tuvo una v.ia del -5,1%.

Para nosotros la leve recuperación se cortó en septiembre y en octubre volvió a un valor similar al de agosto”, sostuvo el socio y economista de Audemus, Gonzalo Guiraldes. Este viernes el Indec va a dar a conocer que fue lo que pasó con la industria manufacturera y a la construcción en septiembre, dos sectores que vienen siendo golpeados por la política de apertura de importaciones y la escasez de obra pública, respectivamente.

Si bien la construcción presentó variaciones interanuales positivas en los primeros ocho meses del 2025, no se debe tener en consideración la baja base de comparación. En el primer año de mandato de Javier Milei llegó a caer hasta un 26,4% en marzo. Ahora la expectativa está puesta en sí la nueva relación que intenta establecer la Casa Rosada con las provincias activa al sector.

La ayuda de la baja de tasa

En la anteúltima licitación, y tal como querían los analistas del mercado, Finanzas dejó sueltos casi $5 billones y en la semana posterior las tasas comenzaron a bajar, al punto de que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) recortó de 25% a 22% la tasa inmediata.

Si bien en la última licitación hubo un roll-over de 111,17% y se adjudicó un total de $8,50 billones (cuando se recibieron ofertas por un total de $9,38 billones), los analistas no creen que haya un impacto negativo en las tasas.

Para el economista de la consultora Eco Go, Lucio Garay Méndez, las repercusiones serán leves, ya que considera que no se retiraron tantos pesos como para observar una suba fuerte de los rendimientos. “La mayoría de lo colocado es a tasa fija, poca cobertura fue a buscar el mercado y creo que es una buena señal de demanda de activos en pesos”, sostuvo.

De cara lo que viene para el socio de C&T Asesores Económicos, Camilo Tiscornia, deberíamos empezar a ver un repunte de la actividad entre noviembre y diciembre. Y que si bien considera que los ingresos del IVA sirven como un anticipo de la actividad para ese mes, se ven afectados por componente del impuesto de septiembre.