Un riesgo país de 400 puntos básicos permitiría refinanciar la deuda en el mercado.

Los mercados de Argentina se revitalizaron este lunes después del inesperado triunfo de La Libertad Avanza, el partido del presidente Javier Milei, en los comicios de medio término, que le brindó un claro respaldo para los próximos dos años de mandato.

Los negocios en el inicio de la operatoria registraron cifras contundentes, con ganancias de hasta 50% en dólares para los ADR de bancos en Wall Street, una suba de 20% en el S&P Merval porteño, y ganancias de hasta 27% para los bonos en dólares de la Argentina.

En este último caso, la mejora de precios de los bonos Globales -con ley extranjera- y Bonares -con ley argentina- incide en forma directa en un desplome significativo del riesgo país argentino.

El riesgo país es un indicador de JP Morgan que mide la brecha entre las tasas de retorno de los títulos argentinos respecto de las emisiones del Tesoro de los EEUU con plazo similar.

Con la suba de precios del día para los bonos argentinos, cae la tasa de retorno de estos títulos públicos, pues los precios evolucionan en forma inversa a la rentabilidad.

El último viernes, previo a los comicios, el riesgo país marcó 1.081 puntos básicos para la Argentina. Con una tasa promedio de 3,93% anual en dólares en los bonos del Tesoro de los EEUU, los bonos argentinos ofrecieron una tasa en torno al 14,7% anual (la suma de los 393 puntos básicos de los Treasuries y los 1.081 puntos del riesgo país argentino).

Con el salto de precios de los bonos en dólares de Argentina este lunes -entre el 14% y el 24%-, las tasas de retorno se redujeron drásticamente, a un rango de 10,1% a 10,8% anual. Dado que los bonos del Tesoro de EEUU rinden ahora 3,9%, el riesgo país debería reducirse en unos 400 puntos básicos, por debajo de las 700 unidades.

El dato definitivo del riesgo país argentino correspondiente a este lunes se conocerá a las 19 horas.

Por ejemplo, el bono de referencia de los EEUU, el Treasury a 10 años de plazo, rinde 4,02% anual. El bono Global 2035 (GD35) de la Argentina, también a 10 años de plazo, rinde 10,82%, lo que resulta en un riesgo país de 680 puntos básicos, el más bajo desde el 7 de julio.

“Los bonos reaccionan con impresionantes subas promedio del 20% en sus cotizaciones en dólares entre las principales referencias, lo cual derrumba el riesgo país ya que este favorable escenario político potencia las chances de una acelerada convergencia con la región. En dicho caso, se aproximaría la posibilidad de regresar a los mercados internacionales para renovar los vencimientos, dado que rendimientos de un dígito ya estarían cercanos, y ello podría convertirse en un game changer para la dinámica de las reservas», explicó Gustavo Ber, economista del Estudio Ber.

“Todo esto ocurre en un contexto global de fuerte apetito por riesgo emergente, con compresión de spreads en soberanos y muy buen desempeño de las bolsas. Con este resultado —mejor al esperado—, el respaldo del Tesoro de EEUU y la posibilidad de un programa de recompra de deuda, el escenario de una mayor compresión en la curva soberana argentina y la reapertura de los mercados voluntarios de financiamiento luce cada vez más probable» observó CMF Banco Corporativo.

¿Por qué es importante el riesgo país?

Una compresión del riesgo país permitirá al gobierno argentino volver a emitir deuda en los mercados internacionales, algo que no sucede desde abril de 2018. Con un riesgo país en la zona de los 400 puntos básicos, el Gobierno podría emitir bonos a mediano y largo plazo a una tasa próxima al 8% anual en dólares, aún elevada, pero que permitiría su repago en los próximos años dado un escenario de equilibrio fiscal sostenido.

La nueva deuda evitaría pagar los vencimientos de capital e intereses de los Globales y Bonares con dólares en efectivo. Este fue el principal motivo que impidió un incremento de las reservas internacionales netas del Banco Central a pesar de haber comprado más de USD 20.000 millones en el mercado a partir de diciembre de 2023.

Fuente: Consultora 1816.

“El Tesoro y la banca de inversión norteamericana saben que sostener el tipo de cambio le dará aire a un Gobierno que necesita un congreso con más miembros en ambas cámaras. Solo queda ahora volver a estabilizar y suavizar tasa de interés, inflación y dólar para encontrar un correcto orden en el pago de las obligaciones de 2026/2027”, señaló Mariano de Rosa, analista de la correduría Más Inversiones.

Un informe de Max Capital precisó que “los spreads podrían comprimirse nuevamente hacia 550-600 puntos básicos en la parte larga y 650 puntos en la corta. En un escenario de reformas estructurales y algunos ajustes en la política económica -permitiendo una flotación administrada mientras se acumulan reservas-, el Gobierno podría recuperar el acceso al mercado en los próximos meses, a medida que los inversores incorporan un escenario de seis años más de Milei con alta probabilidad. Un camino de reformas constructivo, mayor Inversión Extranjera Directa y menor inflación consolidarán una visión virtuosa de las políticas de Milei entre los inversores».

Fuente: Consultora 1816.

“Mantenemos nuestra posición larga en los bonos 2035, tal como mencionamos en nuestro informe anterior, y en acciones de bancos (Grupo Galicia), que seguimos considerando la apuesta macro más atractiva”, agregaron desde Max Capital.

“Si bien las reservas netas a valor de mercado son positivas en casi USD 5.000 millones, en la metodología del acuerdo de facilidades extendidas (con el FMI) no se consideran ni los desembolsos del organismo ni las modificaciones en las reservas por variaciones de precios que impactan en el stock, como las variaciones del oro. Más allá de las metas cuantitativas, es importante tener presente que, incluso si se da el escenario ideal y el país logra renovar sus vencimientos en el mercado -algo que parecía imposible tras las elecciones en Provincia de Buenos Aires y está lejos de sonar des cabellado hoy, considerando lo que rinden países que hasta hace pocos meses eran comparables a Argentina-, el BCRA o el Tesoro deberían comprar divisas en el mercado de cambios para que vayan creciendo las reservas internacionales”, evaluó la Consultora 1816.