La novia de Lucas Martín Cicarelli, el joven que murió al ser empujado por un barranco de la costanera central de Rosario durante un robo, dio detalles sobre lo que ocurrió esa noche, luego de declarar en el Centro de Justicia Penal de la ciudad. La chica, de 20 años, estaba junto a la víctima cuando fueron abordados por dos hombres armados.
El hecho ocurrió el domingo a la madrugada, cuando la pareja permanecía sentada a orillas del río. Trabajaban juntos y su turno ya había terminado. “Pensé que iba a ser una noche normal como todas, pero perdí a la persona que amaba”, expresó Martina a El Tres.
La joven contó que observó cómo uno de los asaltantes amenazaba a Lucas y le exigía que entregara sus pertenencias. Uno de los delincuentes la apuntó con un arma y le pidió que no se moviera, mientras su pareja intentaba protegerla.
Según su testimonio, el forcejeo terminó cuando los agresores empujaron a Cicarelli por la barranca, provocando su muerte al caer al río.
“Vi cómo empezaron a forcejear, retrocedí y una persona vino corriendo y se tiró sobre él”, relató angustiada. Tras la fuga de los delincuentes, Martina pidió ayuda en la calle.
Los investigadores detuvieron a dos sospechosos. Uno de ellos, P.I.I., de 30 años, fue considerado inimputable por un médico tras una evaluación, debido a que no comprendería la criminalidad de sus actos.
En ese sentido, la joven manifestó su indignación ante la situación judicial de los imputados. “Sé que dos personas mataron a Lucas, lo tiraron. No puedo creer que uno sea inimputable, es muy injusto, no puede quedar así”, afirmó, y reclamó: “Las personas que lo hicieron tienen que pagar por esto”.
Ibáñez, quien habría sido quien portaba el arma tiene antecedentes y solo en el último año fue detenido 14 veces.
La declaración de inimputabilidad será revisada en una nueva junta médica forense antes de que un juez defina su situación.
El otro detenido, Andrés Rodrigo Frontera, de 38 años, recibió imputación formal por homicidio en ocasión de robo y continuará bajo prisión preventiva. La fiscalía sostiene que ambos participaron en el asalto en Moreno y el río Paraná, donde la víctima compartía un jugo con su pareja antes del ataque.
El caso
Lucas Martín Cicarelli murió en la madrugada de este domingo tras ser atacado por dos delincuentes armados que lo tiraron por la barranca, ubicada a la altura de Dorrego y el río. En el caso interviene la fiscal Agustina Eiris del Ministerio Público de la Acusación.
Cicarelli era mozo del club Alemán, practicaba parkour, tenía seis hermanos y tres hijos, de 5, 8 y 12 años, según relataron sus familiares. Después de trabajar, “fue con su novia a tomar un jugo de frutas y a comer pepas, sus galletitas preferidas”, contó el padre del joven a Canal 3.
De acuerdo al Ministerio Público de la Acusación de Santa Fe, la pareja se ubicó cerca del río, entre la baranda de seguridad y la barranca, cuando dos delincuentes los atacaron. Uno de los ladrones sacó un revólver y le arrebató la mochila y el celular de la joven de 18 años, quien comenzó a correr mientras Lucas se trenzaba en lucha con el otro delincuente, que lo terminó arrojando al vacío.
Agentes de la brigada motorizada detuvieron a Frontera a 100 metros del lugar del homicidio con los elementos de la chica.
En tanto que su cómplice, cayó este lunes al mediodía en Avellaneda y Cisnero, en la zona oeste de Rosario, en un operativo que llevó a cabo la División de Homicidios de la Policía de Investigaciones.