Luego de una etapa marcada por la distancia física y los compromisos personales, Maxi López finalmente regresó a Suiza para reencontrarse con su esposa, Daniela Christiansson, y con su hija, Elle. Después de varias semanas en Buenos Aires, en las que se dedicó a sus hijos, trabajó en nuevos proyectos y debutó en la nueva edición de Masterchef Celebrity Argentina, el exfutbolista volvió al hogar que comparten en Ginebra para disfrutar de unos días en familia y acallar los persistentes rumores de crisis matrimonial que circulaban por el ambiente mediático. Y en medio de ese panorama, la modelo sueca compartió su orgullo por el desempeño de su pareja en el certamen culinario.

Daniela no dudó en dejar evidencia del apoyo incondicional en sus historias de Instagram. “Wow. Mi súper Masterchef”, escribió la modelo junto a emojis de carita enamorada y manos aplaudiendo, mientras subía un clip de Maxi en la pantalla, concentrado y algo nervioso antes de recibir la devolución del jurado. En ese fragmento, podía verse a López presentando su plato y admitiendo sus nervios: “Estoy asustado”, bromeó frente a las cámaras y los cocineros, justo antes de que probaran su arroz pilaf con carne.

Las devoluciones de los jueces llegaron rápido y con elogios: Germán Martitegui le destacó el punto justo de la carne, la calidad del arroz y el sabor a queso azul y manteca, aunque sugirió agregar un poco más de ese toque. Tanto Donato de Santis como Damián Betular coincidieron en los comentarios positivos, generando una sonrisa y un momento de alivio tanto en el exdeportista como en su familia mirando desde casa. Detrás de cámara, Daniela acompañaba el video con un entusiasta “¡Muy bien!” y agregó: “Muy orgullosa de vos, ¡vamos! Amo el final”, remarcando la emoción por ver a Maxi en una faceta completamente distinta a la futbolística.

Luego de semanas separados, la modelo sueca expresó su felicidad por el desempeño de su pareja en la competencia

El clima de orgullo y amor familiar no fue solo cosa de los adultos, ya que previamente la pequeña Elle, hija de la pareja, se sumó espontáneamente a los homenajes. En una publicación que también hizo furor en redes, la modelo compartió una imagen donde se veía a Elle completamente absorta frente a la computadora, mirando la participación de su papá en Masterchef Celebrity. Desde el living de su casa en Ginebra y con una laptop en la mesa, la nena seguía atenta los movimientos y recetas del exjugador. “Las fans número 1”, arrobando la cuenta oficial de López y sumando el hashtag oficial del certamen gastronómico.

La secuencia suma aún más ternura cuando, en medio del video familiar, Daniela le pregunta a su hija: “¿Quién está ahí?”, y Elle responde, sin dudarlo: “Daddy”. Esa espontaneidad, alejada de flashes y producciones, dejó claro que el mayor premio para Maxi es el aplauso en casa y el orgullo de los suyos.

El regreso de Maxi, además de traer alivio y calma a los rumores que hablaban de crisis, permitió también que Daniela aclarara cómo vivieron esta etapa. La modelo explicó en sus redes que, lejos de cualquier conflicto, la distancia fue una decisión de pareja, tomada para priorizar proyectos, la familia y el próximo nacimiento de su hijo. “Tengo un montón de mensajes así que voy a hacer un posteo general. Maxi está volviendo y eso nos pone muy contentas. No estoy enojada. Sé bien cuáles son los objetivos de Maxi al estar lejos de nosotras en este momento, incluso estando yo embarazada. Las razones son importantes, y sus objetivos son más grandes de lo que muchos pueden imaginar”, detalló, reafirmando el plan conjunto y la confianza que los une.

Y, para disolver cualquier tipo de especulación, también hizo mención a la relación con Wanda Nara, madre de los hijos mayores de Maxi: “No hay ningún drama con ella. Todo está bien, todo tranquilo y en paz. Eso es lo más importante para todos”.

En conclusión, el reencuentro de Maxi y Daniela en Suiza fue mucho más que un simple regreso: fue una reafirmación de amor, confianza y familia en medio de desafíos, rumores y una agenda más que intensa. Rodeados de sus seres queridos y en la dulce espera de su segundo hijo, la familia apuesta a la unión, el disfrute compartido y el orgullo mutuo, mostrándose más consolidada que nunca en esta nueva etapa lejos de los reflectores y los comentarios ajenos.