La brecha de ingresos dentro de la Ciudad de Buenos Aires mostró un nuevo ensanchamiento durante el segundo trimestre de 2025. De acuerdo con el último informe del Instituto de Estadística y Censos de la Ciudad (Idecba), las familias más ricas de la Capital superaron en más de $700.000 mensuales a aquellas que se encuentran en la base de la pirámide de ingresos.
El ingreso total familiar promedio de los hogares porteños se ubicó en $2.025.298 entre abril y junio de este año, lo que implicó un incremento interanual del 83,5%, por encima de la suba de precios medida por el IPCBA (48,3%). Sin embargo, esa mejora general no se distribuyó de manera pareja entre los distintos sectores sociales.
La geografía porteña expone la desigualdad. En el Norte de la Ciudad, los hogares registraron ingresos familiares promedio de $2.362.583, mientras que en el Sur llegaron a $1.647.729. El Centro, por su parte, mostró un promedio de $2.027.851. Esto significa que un hogar del Norte tuvo, en promedio, $715.000 más que uno del Sur en el mismo período.
En términos de ingresos per cápita familiares, los hogares del Norte alcanzaron $1.383.083, frente a $708.567 en el Sur. En consecuencia, el ingreso medio del Norte resultó dos veces superior al de la zona más rezagada.
Ingresos individuales y hogares
En términos individuales, los ingresos totales (laborales y no laborales) promediaron $1.268.548 en la Ciudad, con un aumento de 86,5% respecto al mismo trimestre de 2024. Dentro de ese promedio, la población asalariada percibió en promedio $1.283.275, con una suba del 70,2%, mientras que los trabajadores por cuenta propia alcanzaron $1.255.490, con un salto interanual de 148,3%.
El informe también muestra disparidades en la ocupación principal. El 10% con menores ingresos individuales no superó los $300.000 mensuales, en tanto que el 10% con mayores ingresos superó los $2,5 millones. El promedio del último decil alcanzó los $3.979.297, casi 20,4 veces lo percibido por el primero.
Concentración y desigualdad
El Idecba precisó que el 30% de los hogares con menores ingresos per cápita concentró apenas el 13,2% de la masa total de ingresos de la Ciudad. En contraste, el 30% de mayor poder adquisitivo retuvo el 52,1%.
En el período analizado, el coeficiente de Gini —que mide la desigualdad en la distribución del ingreso— se ubicó en 0,424 para el total de los hogares y en 0,436 para el ingreso per cápita familiar, prácticamente sin variaciones respecto al año anterior, pero en ambos casos, mostrando un incremento de la desigualdad en relación al trimestre anterior.
Otros parámetros de desigualdad
Además, el relevamiento elaborado en CABA señala que el ingreso de la ocupación principal promedió $1.321.161 en el segundo trimestre, con una mediana de $1.000.000. La mitad de los trabajadores varones percibió menos de $1.131.000, mientras que la mitad de las mujeres obtuvo menos de $970.000.
En cuanto a la concentración, el 10% de los hogares con mayores ingresos familiares alcanzó un promedio de $6.185.478, mientras que en el primer decil fue de $344.018. En la distribución poblacional, el 10% más rico percibió ingresos individuales por $2.823.123, frente a $138.073 del 10% más pobre, evidenciando una diferencia de más de veinte veces.
Por último, el Idecba detalló que la población de la Ciudad destinó, en promedio, 37 horas semanales a su ocupación principal: 40 horas en los varones y 34 en las mujeres.
En síntesis, el informe evidencia que, pese a la mejora general de los ingresos reales en la Ciudad, las brechas internas se ampliaron. Los hogares más ricos concentran cada vez más recursos, mientras que los sectores de menores ingresos permanecen muy por debajo del promedio porteño.