Un “wait and see”, pero algo más ampliado y sostenido. Con mucha incertidumbre y algo de temor por lo que vendrá.

Si antes de las elecciones bonaerenses que el Gobierno de Javier Milei nacionalizó y perdió de manera estrepitosa la semana pasada, los empresarios estaban en modo “esperar y ver”, como suele pasar antes de los procesos electorales inciertos o que generan dudas en la Argentina (la gran mayoría, en rigor), luego de los resultados de las urnas, parece haberse consolidado un verdadero freno de mano a la actividad, las perspectivas de crecimiento y contratación de personal. Ni hablar de las inversiones. Algunos creen que es hasta saber los resultados de octubre, otros que podría extender, al menos, por lo que queda de 2025.

“Despues, habrá que ver qué pasa”, dijo el CEO de una importante empresa local. “Yo puse el freno de mano. Veníamos con turbulencias y ahora la incertidumbre es mayo”, resumió.

Un impacto electoral con fuertes ecos para las empresa locales que cotizan en la bolsa (en Wall Street y la local) fue tema de conversación en varios eventos empresariales que se dieron en la semana. En la Argentina Oil & Gas (AOG), la mega feria del sector petrolero, se vio la potencia de la industria, pero también asomaron en charlas privadas algunas dudas sobre los vaivenes de inversiones necesarias para el área. Lo mismo en RepensAR Summit 2025, que se hizo en el Malba, y reunió a empresarios “dueños del capital”, que hablaron del rol que ocupan las inversiones desde y hacia la Argentina, según los organizadores. Hubo más de 350 invitados, entre ellos Luis Pérez Companc, Miguel Gutiérrez y Facundo Gómez Minujín.

infografia

El jueves hubo otro evento energético organizado por la embajada francesa y el Cippec. Carlos Sadir, gobernador de Jujuy e integrante de la “liga de gobernadores” opositores, habló del boom del litio, pero exigió rutas e inversión en infraestructura y “fortalecer la coordinación con organismos nacionales”. Luego Daniel González, secretario de Coordinación de Energía y Minería de la Nación, llevó la voz oficial y reconoció los problemas de competitividad que hay que resolver, alabó el RIGI y insistió con el que Gobierno está “creando las condiciones para que el sector privado tenga un rol central en el desarrollo energético”.

La modalidad se repitió. En los escenarios, todo bien: apoyo a la gestión y aplausos por el equilibrio fiscal, la baja de la inflación y las promesas de reformas; abajo, sorpresa por el resultado de las urnas, análisis por el impacto, dudas por octubre e incremento de una preocupación que ya era palpable.

Del otro lado del Atlántico en Milán, Italia, YPF participó de Gastech, la expo gasífera más importante del mundo. Horacio Marín, presidente de la petrolera de bandera, presentó su plan gasífero global, al que no pocos miran con atención. En el evento estuvieron presentes dos funcionarios de la administración de Donald Trump, Doug Burgum, secretario del Interior, y Chris Wright, secretario de Energía. Ambos esquivaron opinar en profundidad sobre temas de política interna, pero reconocieron que el resultado electoral bonaerense fue un “retroceso”, en un contexto de mejoras económicas a nivel nacional y resaltaron la relación entre Trump y Javier Milei.

También habló en la Gastech Andrea Stegher, titular de la Unión Internacional de Gas (IGU), quien opinó que “ningún tema político obstaculizará el proyecto argentino”. “Buenísimo, pero son declaraciones generales. Hay mucho entusiasmo global por Vaca Muerta y eso es evidente. Esta gente está lejos del día a día. Acá, vamos viendo porque el contexto electoral alteró a todo el mundo”, se resignó un empresario del rubro petrolero en uno de los eventos locales mencionados.

Actividad en duda

Las dudas que vienen tienen foco en el impacto en la actividad, en medio de un contexto de dólar que sube y tasas por las nubes.

Daniel González, coordinador de Energía y Minería del ministerio de Economía, habló en un evento de la Embajada de Francia y el Cippec

Un informe de la consultora Abeceb, que comanda el ex ministro de Cambiemos Dante Sica, destacó: “En síntesis, esto fue un test político que eleva la exigencia del programa y la coordinación interna a Milei. Herramientas hay, pero rinden más si la política ayuda. Por eso nuestra recomendación es llegar a octubre con prudencia activa: proteger márgenes y caja hoy, para aprovechar la compresión de riesgo mañana si la moderación aparece. Y, si no aparece, que nos encuentre con reglas y prioridades claras para no pagar la prima de la ansiedad”.

“La semana fue más tranquila, por suerte”, afirmó Sica en diálogo con Infobae. “El IPC mostró que no hay traslado a precios y el informe monetario mostró que se recomponen los depósitos y eso es una señal para el crédito. Habrá presión externa a la espera de cuestiones políticas, como los vetos y otros temas del Congreso. La actividad está frenada. Con este ruido político muchas empresas cuidan la caja y se ve cautela. La precaución hasta octubre es total. En el corto plazo, las grandes que decidieron invertir, lo harán”, agregó.

Miguel Kiguel, economista y director de Econviews, dijo que el resultado electoral generó mucha preocupación en los inversores, algo que se vio en el impacto inicial en acciones y bonos y la disparada del riesgo país. “Preocupa la vuelta del kirchnerismo, pero el Gobierno hizo campaña con ‘kirchnerismo nunca más’ y ganaron por 13 por ciento. Piensan que pueden volver y, sobre todo, preguntan qué peronismo podría volver. Igual, es una sobrerreacción porque hay cuestiones que sí cambiaron en Argentina. Como sea, la preocupación externa es evidente. El Gobierno hizo mal en no preocuparse por las reservas, eso es algo que el mercado no perdona”, aseguró.

El evento RepensAR Summit 2025, que se hizo en el Malba, y reunió a empresarios “dueños del capital”

Para Kiguel, el año ya venía flojo en términos de actividad, con caída del PBI del 0,6% entre enero y junio, con un mes de julio más estable y “agosto muy malo en términos de actividad, al menos en términos de consumo” y septiembre y octubre que también serán meses complicados.

“Con esta incertidumbre la actividad se frena. Será un año complicado en términos de actividad, empleos y salarios. La economía no crece de un día para otro, hay que generar las condiciones. Y con este nivel de tasas no se puede crecer. Habrá que cambiar algunas prioridades y recalcular un poco en esta segunda etapa post baja de la inflación, y cómo sigue bajando”, expresó.

Según el indicador Pulso PBA, que el Banco Provincia elaboró junto con investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, la actividad se contrajo 0,3% en julio y 1,4% en agosto. Datos técnicos que generaron los equipos de Axel Kicillof. “Con estos números, septiembre debería crecer más de 5% para que la producción no caiga en el tercer trimestre y quede virtualmente en recesión”, señalaron desde el organismo. El panorama, de acuerdo con los datos disponibles, anticipó una caída en el tercer trimestre y una posible recesión técnica hacia fin de año.En reciente relevamiento de Manpower mostró que la expectativa de empleabilidad para el cuarto trimestre se mantiene baja y sin variaciones respecto al trimestre anterior. El 27% de los empleadores encuestados manifestó su intención de aumentar personal, 24% anticipó recortes y 45% no prevé cambios en su dotación.

Horacio Marín, presidente de YPF, habló en la feria Argentina Oil & Gas y luego viajó a Milán a la Gastech

Sentado en un bar de Palermo, una tarde de esta semana que pasó, el dueño de una empresa grande de consumo masivo reconoció más dudas que certezas sobre el corto plazo. “Hasta abril, los salarios le ganaron a la inflación, pero el salario real dejó de crecer. El consumo se planchó y luego se movió un poco, según el retail. En los comercios bajó mucho el stock, algo que no ve el consumidor, pero nos pega fuerte. Subieron las tasas y el dólar y la mercadería vale lo mismo. En las góndolas, el consumo está flat contra el año pasado, cuando estaba 14% abajo que en 2023. El último pico que tuvimos fue en 2017. Estamos lejos y no veo motivos para pensar que las cosas van a mejorar porque la gente no llega a fin de mes. Este año será malo en esos términos”, dijo.

Pantallas rojas

Los grandes bancos globales también reflejaron la sorpresa electoral. Morgan Stanley, que había recomendado apostar por una victoria de LLA en la provincia de Buenos Aires, directamente retiró su “postura favorable” de los activos locales el lunes pasado. JP Morgan, en tanto, redobló la apuesta y recomendó invertir. El banco de inversión estadounidense reconoció el resultado “muy negativo” para el Gobierno en los comicios bonaerenses, pero destacó el compromiso fiscal y la voluntad de pago para la deuda soberana.

El impacto económico del resultado electoral se vio en el mundo financiero, con una fuerte caída en el precio de las acciones que cotizan en Wall Street, en lo que se conoce como “overnight”, un mercado chico, pero es un termómetro de lo que va a pasar.

Y fue peor, incluso. Cuando abrieron las principales bolsas, las variables empeoraron y el lunes hubo derrumbes de hasta 30 por ciento, con fuerte impacto en los bancos e YPF.

Entre el viernes anterior a las elecciones y el pasado -cinco rondas de cotización- el grupo de empresas locales que cotizan en Wall Street, de manera directa o con ADR, se desbarrancaron y tuvieron una pérdida de valor de mercado conjunta y estimada de unos USD 9.500 millones.

Las más ligadas a la contingencia argentina de manera directa, como los bancos, perdieron entre 25 y 30 por ciento. Lo mismo las energéticas. Si bien cayeron todas, como se ve en la infografía de arriba, otras más globales, como Mercado Libre, perdieron mucho menos. A pesar del momento de tensión local por despidos, las empresas de Techint, de Paolo Rocca, también resistieron el impacto.

“La reacción del mercado fue la lógica a una elección a la cual el propio Gobierno subió el precio más de una vez. Era un empate técnico, según el Presidente, y perdieron por 13 puntos. Igual, es importante aclarar que el mercado ya venía en tendencia negativa y el riesgo país había subido. Las acciones medidas en dólares venían cayendo fuertemente. Se profundizó la tendencia por un resultado que no fue el esperado y el que tenía en precios el mercado”, explicó Christian Buteler, analista financiero.

Gustavo Neffa, de Research for Traders, cree que más allá del golpe en bonos y acciones y la suba del tipo de cambio inicial del día lunes, el Gobierno vivió una semana extrema y con un saldo netamente negativo que tendrá fuertes repercusiones en la economía.

El tipo de cambio quedó a un punto porcentual apenas del techo de la banda y el viernes se dispararon todas las alarmas de riesgo. Los fondos comunes de inversión recibieron una larga lista de rescates, los money market tuvieron salidas netas de fondos a un promedio de $227.000 millones diarios, que deduzco se fue dolarizando. El Gobierno, a pesar de haber anticipado que podía intervenir dentro de las bandas, no lo hizo y prefirió dejar correr el tipo de cambio que ahora es mucho más competitivo», destacó.

Neffa remarcó que los inversores asistieron a una caída de precios que ya posiciona el tramo corto de la curva en dólares reestructurados por encima del 20% y el riesgo país bien arriba de los 1.000 puntos que mató la ilusión de poder rollear la rueda incluso hasta el final del mandato de Milei.

Freno de mano. Parate. Derrumbe bursátil. Mayores dudas. Algunos conceptos que cruzaron otra semana compleja para la golpeada economía argentina. Una semana de sorpresas electorales inesperadas a las que les siguieron los impactos económicos de siempre.