El aumento de temperaturas y las lluvias favorecen la proliferación de mosquitos transmisores de virus en zonas donde antes no era frecuente (REUTERS)

Hasta hace algunos años, hablar de chikungunya o del virus del Nilo Occidental evocaba imágenes de regiones cálidas, manglares y selvas en zonas tropicales lejanas. Pero hoy esos nombres aparecen en informes europeos, con cifras récord de personas afectadas en países que hasta hace poco solo asociaban a estos virus con vacaciones exóticas o sucesos aislados en otras latitudes.

Europa enfrenta brotes inéditos de enfermedades transmitidas por mosquitos, un fenómeno que los expertos vinculan directamente al cambio climático y a veranos inusualmente calurosos. El informe semanal del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) publicado hoy destaca un aumento inusual en los casos de enfermedades transmitidas por mosquitos en lo que va del año.

Francia registra 301 casos de chikungunya y en Italia se documentan 107 casos. El reporte enfatiza la expansión de estas enfermedades a nuevas áreas del continente y la necesidad de reforzar tanto la vigilancia epidemiológica como las campañas de prevención para contener los brotes y evitar la propagación en la población.

¿Qué mosquitos transmiten el chikungunya y el virus del Nilo Occidental?

Europa registra brotes inéditos de chikungunya y virus del Nilo Occidental en 2025 (Crédito: ECDC)

La transmisión del virus chikungunya ocurre a través de la picadura de mosquitos hembra infectados, en su mayoría de las especies Aedes aegypti o Aedes albopictus, que también propagan los virus del dengue y Zika. Estos mosquitos suelen atacar durante las horas diurnas y depositan sus huevos en sitios con agua estancada, como recipientes y huecos.

Tanto el Aedes aegypti como el Aedes albopictus buscan alimento en el exterior, aunque el Aedes aegypti también puede hacerlo dentro de los hogares.

El virus del Nilo Occidental puede causar una enfermedad mortal del sistema nervioso en los seres humanos, sin embargo, casi el 80% de las personas infectadas no presentan síntoma alguno. Generalmente, se considera que los vectores principales son los mosquitos del género Culex., en particular Culex pipiens.

Un clima más cálido, nuevos riesgos

ARCHIVO - Varias personas caminan por la plaza de Trocadero, cerca de la torre Eiffel, en plena ola de calor, el 2 de julio de 2025, en París. (AP Foto/Christophe Ena, archivo)

¿Por qué están surgiendo brotes de enfermedades como la chikungunya, el virus del Nilo Occidental o el dengue en lugares como Francia o Italia? Los especialistas identifican una relación clara: el aumento de las temperaturas y los cambios en los patrones de lluvias permiten que los mosquitos que transmiten estos virus prosperen en áreas que antes les resultaban demasiado frías o secas.

Pamela Rendi-Wagner, directora del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), resumió este fenómeno al afirmar que Europa está entrando en “una nueva fase, en la que la transmisión de enfermedades transmitidas por mosquitos es más prolongada, más extendida y más intensa, convirtiéndose en la nueva normalidad”.

Estos mosquitos no solo sobreviven, sino que se expanden con una rapidez inquietante. El mosquito tigre asiático (Aedes albopictus), conocido por su capacidad de adaptarse y colonizar nuevas zonas, se ha arraigado en buena parte del continente.

Los veranos calurosos aceleran la transformación de los mosquitos en portadores de virus: cuanto más altas las temperaturas, más rápido posible que un simplemente molesto zumbido en una noche de verano se convierta en un problema de salud pública.

Chikungunya y virus del Nilo Occidental: cifras en aumento

El mosquito tigre (Aedes albopictus) es vector de enfermedades como el Zika o chikungunya (REUTERS/Eva Manez)

La chikungunya, un virus que puede causar fiebre alta y dolores articulares intensos, experimentó en 2025 su mayor brote hasta la fecha en Europa.

Según datos actualizados por el ECDC hoy 5 de septiembre, Francia registró 301 casos autóctonos, es decir, personas infectadas dentro del país y no durante un viaje. Estos brotes se distribuyen en 34 grupos (“clusters”) y el más grande, ubicado en Vitrolles, reúne 47 afectados.

El panorama en Italia es similar: este año, los médicos informaron de 107 casos locales, especialmente en el área de Carpi, San Prospero y Soliera con el brote más relevante. En ambos países los casos aumentan semana a semana, alimentados por la expansión del mosquito tigre y los veranos prolongados.

El virus de la chikungunya ha dejado de ser una importación exótica y ahora circula de persona a persona en barrios urbanos y rurales de Europa, siguiendo la pista de su principal transmisor.

Por otro lado, el virus del Nilo Occidental, que tradicionalmente aparecía solo en regiones próximas al Mediterráneo y asociadas a áreas húmedas, ahora aparece en provincias donde antes no había dejado rastro. En 2025, Italia registró 430 contagios y 27 fallecimientos asociados. Las causas se relacionan tanto con veranos más cálidos como con el desplazamiento de aves migratorias, que transportan el virus y lo depositan en nuevas zonas donde abundan los mosquitos del género Culex.

La rápida adaptación y expansión de los mosquitos ha facilitado la transmisión local de virus, generando alarma entre especialistas y organismos de control de enfermedades (REUTERS/Josue Decavele)

Como lo explicó esta semana a la revista Science el infectólogo Emanuele Nicastri, del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas Lazzaro Spallanzani en Italia, el descubrimiento de casos locales de virus del Nilo Occidental en las afueras de Roma resultó sorprendente incluso para los profesionales con más experiencia.

Nicastri relató que, a pesar de que los humedales al sur de la capital italiana siempre ofrecieron un hábitat propicio para los mosquitos, nunca antes se habían detectado infecciones autóctonas en esa zona. Según el experto, la irrupción del virus en provincias densamente pobladas del centro de Italia revela un cambio profundo en los escenarios epidemiológicos, impulsado por transformaciones ambientales y rutas migratorias alteradas: «Nos encontramos frente a situaciones que, hasta hace pocos años, eran casi inimaginables en esta parte de Europa».

Por qué importa la expansión de enfermedades transmitidas por mosquitos

Francia e Italia reportan cifras récord de casos autóctonos de chikungunya y virus del Nilo Occidental (REUTERS/Tyrone Siu)

El avance de virus como la chikungunya, el virus del Nilo Occidental y el dengue obliga a actualizar la agenda de la salud pública. Los expertos coinciden: ningún país está exento de estos riesgos si las condiciones ambientales siguen cambiando. Ya no se trata solo de protegerse de los mosquitos en vacaciones; ahora, la prevención y la información deben llegar a cada rincón, incluso a quienes nunca imaginaron que un brote atípico pudiera darse en su ciudad.

Según informes del ECDC, “el número de casos y la transmisión local constituyen una amenaza que debe incluirse en la agenda de salud pública e investigación a nivel nacional e internacional”.

Los gobiernos europeos intensificaron el uso de fumigaciones, la vigilancia y campañas informativas, pero el escenario futuro requiere trabajar tanto en la adaptación social como en la investigación de vacunas y tratamientos.

A pesar del progreso científico, el camino para controlar estas enfermedades está lleno de desafíos. Actualmente, no existen medicamentos antivirales ni tratamientos específicos para la chikungunya o el virus del Nilo Occidental; los médicos solo pueden aliviar síntomas y monitorear a los pacientes. Las vacunas se encuentran en desarrollo, pero su aprobación y despliegue masivo pueden tardar varios años.

En palabras de especialistas del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas en Italia y de la Universidad de Burdeos, el contexto europeo exige nuevas formas de organización y una mentalidad renovada ante el riesgo: entender que el cambio climático no solo altera los paisajes, sino que redefine el mapa de la salud mundial.