Los bonos en dólares de Argentina se sostienen en medio de la turbulencia financiera.

El mercado financiero está atravesando semanas de turbulencia después del salto cambiario de julio y el asenso de las tasas de interés en pesos con la eliminación a partir del 10 de julio de las LEFI (Letras Fiscales de Liquidez) y la volatilidad propia de un período preelectoral.

Además, el Gobierno sufrió este mes un revés en el Congreso, luego de que la Cámara baja diera media sanción a varias iniciativas, entre las cuales están el financiamiento de las universidades nacionales, la declaración de la emergencia en pediatría y que la oposición consiguiera los votos para un primer rechazo a varios de los decretos. En la visión de los operadores del mercado estos compromisos presupuestarios ponen en riesgo el sostenimiento del equilibrio fiscal, base del esquema económico del Gobierno, si bien el presidente Javier Milei vetó las propuestas.

En medio de la incertidumbre que afectó a los agentes financieros, destacaron los bonos soberanos en dólares como activos que defendieron las cotizaciones. Los títulos Globales y Bonares mantienen en agosto una ganancia de 2,5 por ciento.

En la última semana los títulos públicos Hard Dollar -porque cotizan y pagan renta y cupón en dólares- exhibieron alzas en un rango de 1% a 2%, dando muestras de cierta solidez en medio de la volatilidad del tipo de cambio y las tasa en pesos, en sintonía con la tendencia de los títulos de mercados emergentes en Wall Street.

Rendimiento semanal de los bonos en dólares:

Fuente: MegaQM

Un informe de BAVSA (Buenos Aires Valores SA) precisó que “la relación entre las tasas en pesos y las tasas implícitas en los contratos de dólar futuro desincentivan las inversiones en pesos previo a las elecciones nacionales de medio término. Esto puede haberle dado combustible a la deuda soberana en dólares en la última semana, en un contexto en el cual sus pares emergentes, medidas por la evolución del ETF EMB, aumentaron un 0,5%. Los precios de los Globales subieron un 1,2% en promedio en la última semana y comprimieron rendimientos hasta 44 puntos básicos de Tasa Efectiva Anual. En el caso de los Bonares, el incremento fue de 0,9%. Así, el riesgo país detuvo su senda alcista”, ahora en la zona de los 710 puntos, un piso desde el 10 de julio.

“En relación con la deuda soberana en dólares, elegimos al GD35 y GD41, por sus niveles de liquidez, current yield, potencial upside por efecto duration y rendimientos en el entorno de 11,65% TIREA (Tasa Interna de Retorno Efectiva Anual). Aquellos que quieran menor exposición a volatilidad, el BPOB7 (Bopreal) rinde 9,22% y el BPOC7 8,68% y ambos tienen rendimientos corrientes superiores al 5%. Además, el BPO28 rinde 10,95% TEA (Tasa Efectiva Anual), mejor que cualquier corporativo de similar plazo”, aseguraron desde BAVSA.

Rocco Abalsamo, asesor financiero de Cocos Gold, explicó que “lo que estamos viendo en cuanto a soberanos es que su desempeño depende directamente de la incertidumbre local que se están generando las elecciones. En cuanto a las principales y primeras encuestas que nos están llegando, vemos un buen resultado a lo que sería el oficialismo en las elecciones de octubre. Tendría un apoyo base de alrededor del 40% y en Provincia de Buenos Aires la competencia se perfila muy ajustada, probablemente con el peronismo, que históricamente gobernó la provincia. ¿Qué pasa si al oficialismo le va bien en las de septiembre? Es altamente probable que también tenga un buen desempeño en las elecciones nacionales de octubre».

Los títulos públicos en dólares todavía arrojan rentabilidades de 12% anual en promedio con los Bonares (ley Argentina), y de 11% con los Globales (ley extranjera). La brecha de las tasas de estos títulos respecto de los bonos del Tesoro de los EEUU de similar duración todavía se sostiene sobre los 700 puntos básicos, tal como lo demarca el índice de riesgo país de JP Morgan.

“En ese escenario, es esperable que los bonos soberanos registren una tendencia alcista, con bastantes subas en sus precios, donde si el riesgo país se va a 550 puntos básicos, podríamos ver que bonos como por ejemplo el AE38 (Bonar 2038), que es el bono que más subiría, en este caso más sensible, subiría alrededor de un 13,1% en dólares directo, esto considerando que sería una TIR (Tasa Interna de Retorno) del 10,1%, y en el caso de un escenario un poco más agresivo, o decir, tal vez, unas elecciones muy buenas para el oficialismo, podríamos plantear un escenario de 450 puntos básicos de Riesgo País, donde la AE38 subió alrededor de 18,7% en dólares. Y luego la AL41, que en este caso sería el ganador, dado su largo plazo, subiría casi 20% en dólares directos. En este caso el AL41 tendría una TIR del 9,25% y el AE38 una TIR del 9,1%”, agregó Abalsamo.

“Creemos que, con el cambio de expectativas a nivel internacional, y la posibilidad cada vez más cierta de una baja de tasas en Estados Unidos, nuestros bonos y acciones tienen un recorrido alcista por delante”, aportó el analista y asesor Salvador Di Stefano.

Rava Bursátil observó que “los bonos en dólares muestran una perspectiva favorable, sin riesgo de ‘default’ en el corto plazo. Factores como los resultados electorales, el aumento de reservas y la posible baja de tasas de la Fed podrían contribuir a una disminución del riesgo país y consecuentemente, a una suba en el precio de bonos como el AL35D“.

El impulso desde el FMI

La reciente firmeza de los Globales y los Bonares tuvo como driver el 31 de julio la aprobación del directorio ejecutivo del FMI (Fondo Monetario Internacional) de la primera revisión del acuerdo de facilidades extendidas con Argentina. El posterior desembolso de unos USD 2.000 millones fue utilizado por el tesoro para la recompra de Letras Intransferibles en manos del Banco Central, que mejoraron el balance de la entidad e incrementaron las reservas netas.

“La primera revisión del FMI trajo buenas noticias por partida doble. No solo permite el desembolso de 2.000 millones de dólares sino que baja las metas de reservas de corto plazo. Esta menor necesidad de acumulación quita algo de presión al dólar”, expresó Gustavo Geretto, analista de Adcap Grupo Financiero.

Para los analistas de MegaQM, “en la deuda Hard Dollar, la dinámica ha sido mucho mejor, con una performance alineada con los activos emergentes y en algunos casos algo mejor. El premio igualmente está apareciendo en el tramo corto y medio, donde la acumulación de divisas para el pago de enero 2026 genera un impacto positivo relevante y no afecta tanto el eventual ruido electoral que pueda aparecer en las próximas semanas”.

“A mediano plazo, la necesidad de financiamiento externo para enfrentar vencimientos de deuda sigue siendo elevada. Los fundamentos de una economía con déficit en la cuenta corriente y tipo de cambio apreciado parecen ser una resistencia para bajar el riesgo país y volver a los mercados voluntarios de deuda”, concluyó un informe del CESO (Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz).

“A pesar del fuerte compromiso fiscal del Gobierno, la lectura incomoda a los inversores dado que refleja una oposición con visiones diferentes, lo cual incrementa la ‘prima de riesgo’ en las valuaciones, ya que los progresos en la economía se encontrarían sujetos al escenario político, no lográndose conformar consensos sobre pilares centrales entre las principales fuerzas”, explicó el economista Gustavo Ber.