Andrew Lloyd Webber regresará a Broadway en 2026 con un proyecto todavía no revelado, aunque ahora está embarcado en una disputa legal (Foto: REUTERS/Brendan Mcdermid)

El regreso de Andrew Lloyd Webber a Broadway, tras el cierre de su musical anterior, se ha visto envuelto en una controversia inesperada: la disputa por el nombre de la compañía productora. Según Variety, la empresa que originalmente llevaba el nombre Sunset Boulevard Theatrical LLC se vio obligada a modificar su denominación por Evita Sunset Theatrical LLC debido a un conflicto legal con los titulares de los derechos de la obra Sunset Boulevard. Este giro administrativo, que podría parecer menor, revela la compleja red de intereses y derechos que rodea a las grandes producciones teatrales en Nueva York.

Así es el contexto del retorno de Andrew Lloyd Webber a la escena de Broadway con un nuevo proyecto, después de que su musical Bad Cinderella cerrara en 2023 tras solo 85 funciones. El compositor británico, conocido por éxitos como Evita, El fantasma de la ópera y Cats, enfrenta ahora el desafío de relanzar su carrera en el circuito neoyorquino, en un contexto donde las disputas legales y los cambios administrativos pueden influir tanto como el talento artístico.

Andrew Lloyd Webber, autor de

El artículo de Variety detalla que la compañía productora del nuevo espectáculo de Lloyd Webber había sido registrada inicialmente bajo el nombre Sunset Boulevard Theatrical LLC. Sin embargo, los representantes legales de los propietarios de los derechos de Sunset Boulevard presentaron una objeción formal, argumentando que el uso del nombre podría inducir a error al público y vulnerar los derechos de marca asociados a la famosa obra. Como resultado, la empresa optó por modificar su nombre a Evita Sunset Theatrical LLC, una decisión que, según fuentes citadas por el medio, se tomó para evitar un litigio prolongado y costoso.

Este episodio pone de manifiesto la importancia de la gestión de derechos en la industria teatral. El uso de nombres asociados a obras reconocidas puede desencadenar reclamaciones legales, incluso cuando no existe una intención explícita de explotar la marca. En este caso, la referencia a Sunset Boulevard en la denominación de la compañía fue suficiente para que los titulares de los derechos intervinieran. Un portavoz de los propietarios de la obra justificó: “Debemos proteger la integridad de la marca y evitar cualquier confusión entre el público y los inversores”.

La premio Nobel de la Paz Malala Yousafzai y Andrew Lloyd Webber retratados antes de ingresar a una gala benéfica del musical

El contexto de este conflicto se enmarca en el proceso de recuperación de Andrew Lloyd Webber tras el fracaso comercial de Bad Cinderella. El musical, que se estrenó en marzo de 2023, cerró sus puertas en junio del mismo año, acumulando solo 85 funciones y recibiendo críticas mixtas. Este revés supuso un golpe para la reputación del compositor, quien había mantenido una presencia constante en Broadway durante décadas. El nuevo proyecto, cuya naturaleza aún no ha sido revelada en detalle, representa una oportunidad para que Lloyd Webber recupere su posición en la industria.

La elección del nombre de la compañía productora no es un asunto menor en Broadway. Según expertos consultados por Variety, la denominación de las empresas suele reflejar la estrategia comercial y la identidad del espectáculo. En este caso, la combinación de Evita y Sunset… en el nuevo nombre podría interpretarse como un guiño a dos de las obras más emblemáticas de Lloyd Webber, aunque el compositor no ha confirmado si el próximo musical estará relacionado con alguna de ellas.