En medio del boom de las apuestas deportivas, donde numerosas familias vieron con preocupación cómo sus hijos caían en la adicción, el fiscal Juan Rozas, a cargo de la fiscalía especializada en investigar el juego clandestino, estimó que hay “más de 100″ sitios ilegales nuevos y destacó que se recibieron nuevas denuncias.
“Esto es un problema de la sociedad, no solo obviamente de la ciudad de Buenos Aires, sino de todo el país”, apuntó el titular de la Fiscalía Penal Especializada en Juegos de Azar (FEJA), que persigue causas vinculadas a juegos de azar ilegales, casinos clandestinos y apuestas virtuales no autorizadas. “Cuando el fiscal general me convocó para ponerle el foco a esta problemática, ni siquiera se hablaba del tema en la sociedad. Tuve que interiorizarme, se formó un equipo y desde entonces no han parado de llegar denuncias”, afirmó.
Durante el último año, la FEJA se dedicó a perseguir activamente diferentes delitos en torno al juego clandestino. Al respecto, Rozas destacó la importancia de la recepción de información por distintas vías y aclaró que las denuncias llegan tanto de organismos oficiales, como la Lotería de la Ciudad —encabezada por Jesús Acevedo— y la Cámara Empresarial de Casinos y Bingos, como de particulares y familias preocupadas por la situación de sus hijos menores de edad vinculados al juego.
“Tenemos nuevas denuncias que hay que analizarlas, pero existen nuevos hechos por seguir promocionando sitios ilegales, que es una parte de la investigación”, consideró.
Uno de los episodios que dio mayor visibilidad a la problemática este año fue el caso de 16 influencers que promocionaron casas de apuestas no autorizadas. Celebridades como Elian Valenzuela (L-Gante), Wanda Nara, Ezequiel Iván Cwirkaluk (El Polaco) y ex participantes de Gran Hermano, entre otros, estuvieron involucrados en la difusión del juego ilegal desde las redes sociales y tuvieron que alcanzar con la fiscalía un acuerdo reparatorio.
Al respecto, Rozas describió: “Logramos que graben spots donde desalientan el uso de sitios ilegales y hablen de los peligros de la ludopatía. También les impusimos la obligación de realizar un curso dictado por la Lotería de la Ciudad”.
Además, como condición innovadora del acuerdo, los involucrados debieron publicar los videos de reparación en las mismas redes sociales donde originalmente colgaron la promoción ilegal, alcanzando a millones de seguidores. “La idea fue exponer esos contenidos en colegios, y en todos los espacios donde puedan generar un impacto preventivo”, detalló.
Consultado sobre la reacción de las figuras involucradas, el fiscal aseguró: “Yo tengo que reconocer que tuvimos una excelente predisposición de su parte. Nos dijeron: ‘Doctor, ¿de qué manera puedo reparar esto? Yo me ofrezco, fíjese usted de qué manera lo puede hacer.”
De todas maneras, marcó que el acuerdo es un beneficio excepcional y tiene sus límites: “Si alguno reincide, no accederá a este beneficio, y enfrentará un proceso penal, porque aquí hay un delito, que es el artículo 301 bis del Código Penal, con penas de 3 a 6 años de prisión”.
El funcionario fue enfático al explicar la gravedad del impacto del juego ilegal en menores y adolescentes. “Hemos recibido denuncias de chicos que, tras perder grandes sumas de dinero, desarrollaron problemas de salud mental y debieron ser internados en centros de rehabilitación. Hemos visto cómo el acoso por deudas puede llevar a situaciones límite”, alertó. “También hay denuncias de personas anónimas de madres que, repito, sus hijos han estado implicados en juegos ilegales y quieren que investiguemos”, precisó, durante una entrevista en Radio con Vos con la periodista Lorena Maciel.
Los tres eslabones de una cadena ilícita
Según Rozas, la operatoria para captar a los apostadores desde los sitios ilegales tiene su grado de complejidad y alcanza a instituciones como las escuelas. “En los colegios se detectaron adultos que son intermediarios, a quienes denominamos ‘cajeros’, que recolectan el dinero de los alumnos para apostar en sitios ilegales”, contó. Identificó a los administradores o explotadores de los sitios, los cajeros y los influencers como los tres eslabones principales en la estructura delictiva.
Describiendo el mecanismo, Rozas explicó que el administrador es la cabeza, quien se encarga de operar la plataforma ilegal y, en muchos casos, contacta a personas famosas para que promocionen los sitios. Luego, los “cajeros” son intermediarios que recolectan el dinero y facilitan las transacciones entre los apostadores y los explotadores. Finalmente, los influencers son quienes inducen a sus seguidores a participar del juego, otorgando legitimidad y masividad a la plataforma.
“A nosotros, obviamente, nos interesa poder llegar hasta lo que son los administradores y explotadores de los sitios. Tenemos una gran cantidad de cajeros imputados”, consideró Rozas. “Hemos logrado clausurar más de cuatrocientos sitios ilegales en este año”, destacó, y estimó que hay “más de 100 denuncias” nuevas de páginas web ilícitas.
El fiscal remarcó que las casas de apuestas legales en la Ciudad de Buenos Aires son únicamente las habilitadas por la Lotería de la Ciudad y llevan la terminación “.bet.ar”.
“En la actualidad hay once sitios legales, controlados por el Estado y por organismos internacionales”, consideró, y advirtió que los ilegales no ofrecen ningún tipo de garantía, ni a nivel económico ni sanitario, y que “el apostador corre serios riesgos de perder todo el dinero y no tener a quién reclamar”.
En otro tramo, valoró la coordinación con fiscalías de otros distritos, como la de San Isidro a cargo del fiscal Alejandro Musso, con quien realizaron allanamientos simultáneos y lograron una cantidad importante de imputados, procedimientos y pruebas recabadas. “El aporte de la Cámara Empresarial de Casinos y Bingos y de la Lotería de la Ciudad fue fundamental, así como la denuncia constante de familiares y ciudadanos anónimos. Nadie puede solo contra este flagelo”, reflexionó.
Rozas puso especial énfasis en el rol preventivo y pidió la implicancia de la sociedad. “También necesitamos concientizar a los padres en el uso de los celulares y de las transferencias de dinero a los menores. Hemos advertido que, en muchos casos, los padres que transfieren dinero a sus hijos, los pibes terminan timbeando en apuestas deportivas”, remarcó.
Para quienes necesiten orientación, Rozas recordó que las denuncias sobre juego ilegal pueden hacerse en la página web del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires. Además, recomendó participar de los cursos especiales de la Lotería de la Ciudad para personas con adicción o que busquen información sobre prevención.