Una operación policial de amplio despliegue, coordinada entre las fuerzas de seguridad de Pinamar y Villa Gesell, llevó a desarticular parte de una banda delictiva que había generado preocupación en la comunidad local a partir de dos robos violentos ocurridos en domicilios particulares.
El trabajo conjunto involucró a la Policía de Investigaciones (DDI Dolores – Base Operativa Pinamar), la Subdelegación Villa Gesell, la Policía de Seguridad de ambas ciudades y recibió un aporte clave de las Secretarías de Seguridad municipales, según informaron fuentes policiales.
La investigación se inició luego de reportes de robos en viviendas de Pinamar y Villa Gesell, donde al menos tres delincuentes sorprendieron a los dueños en sus propios domicilios, empleando violencia física y amenazas para hacerse de dinero en efectivo, objetos de valor y documentación personal. Los hechos mostraban indicios claros de premeditación y de la existencia de una organización, lo que motivó la inmediata intervención de distintas áreas especializadas de la policía.
Uno de los elementos fundamentales para el avance de la causa fue el exhaustivo análisis de imágenes captadas por cámaras de seguridad gestionadas por las Secretarías de Seguridad de ambas localidades. Las filmaciones permitieron determinar que la banda utilizaba dos vehículos: un Renault Duster y un Toyota Etios.
Al ser cotejadas las patentes, se constató que ambos rodados tenían pedido de secuestro por robo en el conurbano bonaerense, lo que reforzaba la hipótesis de que se trataba de un grupo con conexiones fuera de la región costera.
Con la supervisión directa del fiscal Juan Pablo Calderón, titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio (UFID) N° 4 de Pinamar, y el aval del Juzgado de Garantías N° 6 de Villa Gesell, a cargo de Leopoldo Mancinelli, se dispuso la realización de cuatro allanamientos simultáneos.
Los procedimientos tuvieron lugar en domicilios de las localidades de Pinamar, Ostende y Valeria del Mar, con la participación de personal policial de distintas áreas y el apoyo logístico de los municipios.
Durante estas acciones se logró secuestrar una importante cantidad de elementos relacionados con los delitos investigados. Fueron recuperados perfumes importados, relojes, prendas de vestir, teléfonos celulares de distintas marcas y otros efectos denunciados por las víctimas. También se hallaron anotaciones que serán peritadas, ya que podrían aportar información sobre el accionar y la estructura interna del grupo.
En uno de los domicilios allanados, se encontraron chapas patentes adulteradas correspondientes a diferentes vehículos con pedido de secuestro, así como documentación automotor irregular.
Además, en uno de los objetivos los agentes encontraron sustancias estupefacientes fraccionadas, puntualmente marihuana y cocaína, junto con una balanza de precisión y elementos de corte típicos de fraccionamiento y distribución. Esto motivó la intervención del fiscal Guillermo Vernetti, a cargo de la Fiscalía Temática de Estupefacientes de Dolores, quien ordenó la aprehensión de uno de los sospechosos y dispuso la ejecución de medidas complementarias.
Como resultado de los operativos, se logró la aprehensión de dos personas. Los investigadores buscan establecer el grado de participación de cada detenido en los hechos denunciados y determinar si existe una conexión directa con otros robos ocurridos en la zona bajo modalidades similares. El avance de la pesquisa no descarta la identificación y captura de más integrantes del grupo, ya que la causa permanece abierta y activa.
La intervención judicial y policial tuvo como principal objetivo frenar el accionar de bandas organizadas que utilizan logística y vehículos robados para desplazarse y cometer hechos delictivos en la costa atlántica. El trabajo de análisis de cámaras, el aporte de las secretarías de seguridad y la coordinación interjurisdiccional resultaron clave para identificar los movimientos de la banda, localizar sus refugios y proceder a los allanamientos.