Donald Trump instó este jueves al gobierno brasileño, encabezado por Luiz Inácio Lula da Silva, a modificar su política y cesar los ataques contra su predecesor, Jair Bolsonaro, intensificando así la crisis diplomática entre Estados Unidos y Brasil. El mandatario norteamericano expresó sus demandas a través de una carta enviada al Ejecutivo brasileño y de publicaciones en la red social Truth Social, donde reiteró su apoyo a Bolsonaro y condicionó la relación bilateral a cambios concretos en la política interna de Brasil.
La controversia se intensificó la última semana, cuando Trump remitió una carta a Lula con la advertencia de posibles aranceles, una estrategia similar a la que ha utilizado con diversos socios comerciales de Estados Unidos. Sin embargo, el mensaje dirigido a Brasil incluyó además críticas al juicio que enfrenta Bolsonaro, acusado de intentar un golpe de Estado tras perder las elecciones presidenciales de 2022.
“He visto el terrible trato que recibe a manos de un sistema injusto que se ha vuelto en su contra. ¡Este juicio debe terminar de inmediato!”, publicó Trump en Truth Social. El republicano de 79 años recalcó su malestar con la situación actual y, según sus palabras, manifestó reiterada desaprobación de las medidas del Ejecutivo brasileño, tanto en foros públicos como mediante amenazas de modificaciones en la política comercial.
Trump aludió también a la polémica en torno al control de redes sociales en Brasil, donde un tribunal ordenó bloquear el acceso a Rumble, una plataforma de video afín a grupos conservadores, por negarse a suspender la cuenta de un ciudadano brasileño acusado de difundir desinformación. “Estoy muy preocupado por los ataques a la libertad de expresión en Brasil provenientes del actual gobierno”, afirmó.
En relación directa con Bolsonaro, Trump señaló: “Fue un líder muy respetado y fuerte que sirvió bien a su país. No me sorprende verlo liderando las encuestas”. No obstante, según datos del centro de estudios Quaest, Lula encabeza la intención de voto para la primera vuelta de las elecciones de 2026. Bolsonaro, aunque es considerado el principal referente de la oposición conservadora, permanece inhabilitado para cargos públicos por decisión de la justicia electoral tras cuestionar sin pruebas la fiabilidad del sistema de votación.
Por su parte, Lula da Silva, de 79 años, reiteró su intención de competir en los comicios de 2026 y condenó públicamente la amenaza de aranceles como un “chantaje basado en informaciones falsas” sobre el comercio bilateral. En un mensaje transmitido por radio y televisión, calificó la advertencia de Trump como “inaceptable” y un acto de presión sobre las instituciones brasileñas. “No podemos permitir que el presidente Trump olvide que fue elegido para gobernar Estados Unidos. No fue elegido para ser el emperador del mundo”, declaró Lula en entrevista con CNN.
Ante la posibilidad de sanciones económicas, funcionarios del gobierno brasileño enviaron una carta al secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, y al representante comercial, Jamieson Greer, expresando voluntad de diálogo y negociación para evitar la imposición de un arancel del 50% a todas las exportaciones brasileñas hacia el mercado estadounidense.
La vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, negó que Trump busque ejercer una hegemonía mundial: “El presidente ciertamente no pretende ser el emperador del mundo. Es un presidente fuerte para Estados Unidos de América y también es el líder del mundo libre”, declaró en rueda de prensa.
La sostenida tensión entre ambos países y la presión de Trump a favor de Bolsonaro han revalorizado la figura de Lula entre amplios sectores de la sociedad brasileña, donde el presidente brasileño ha llamado a la unidad nacional frente a la “injerencia” extranjera. Mientras tanto, la postura estadounidense queda sujeta a nuevos desarrollos en la evolución del proceso a Bolsonaro y la negociación comercial bilateral.
(Con información de AFP y EFE)