Un tribunal rosarino condenó a 17 años de cárcel a una mujer por el homicidio de un hombre en mayo de 2022

Un fallo emitido este lunes por la Justicia de Rosario condenó a Maite Anabel Fernández, de 31 años, a 17 años de prisión por el homicidio de Carlos González.

La víctima, de 78 años, fue asesinado de 28 puñaladas en mayo de 2022 dentro de una marmolería en ruinas del barrio Bella Vista, donde había trabajado y se encontraba residiendo de manera precaria tras el cierre del lugar años atrás.

El tribunal resolvió que se trató de un homicidio en ocasión de robo, delito por el que se sancionó a la acusada tras un juicio oral. El fallo fue dictado por el tribunal conformado por los jueces Carlos Leiva, Gonzalo López Quintana e Ismael Manfrín.

La resolución fijó una pena menor a la solicitada por el fiscal Lisandro Artacho, quien en su alegato había requerido una condena de 20 años de prisión.

Tras la lectura de la sentencia, el fiscal explicó que aguardará a conocer los fundamentos de la decisión del tribunal para evaluar una posible apelación.

La defensa de Fernández había presentado durante el proceso testimonios sobre su situación de vulnerabilidad, referidos al ejercicio de la prostitución y al consumo frecuente de drogas.

También destacó que, al inicio del juicio, la acusada pidió perdón a los familiares de la víctima, hecho que fue valorado por las partes como algo inesperado en el proceso. El fiscal aclaró que este pedido “llega tarde”, ya que durante los tres años de proceso Fernández no había realizado declaraciones previas sobre el hecho.

Según informó el portal del diario La Capital, González, conocido en el barrio como “Don Juan”, había sido empleado de la marmolería ubicada en Castellanos al 2300, donde continuó viviendo luego de que el comercio cerrara por el asesinato del dueño, Gabriel Capella, en 2013.

El 13 de mayo de 2022 una vecina detectó un fuerte olor proveniente del predio cuando intentó guardar su auto, notando además que el portón estaba cerrado con llave desde el interior.

Tras recibir el aviso, la Policía halló el cadáver de González junto a dos cuchillos manchados con sangre. Un segundo portón, ubicado sobre calle Viamonte, presentaba manchas de sangre y estaba entreabierto. En ese acceso se recolectaron huellas y un picaporte como material para la pericia.

La investigación se centró en la revisión de las cámaras de seguridad de la zona, además de entrevistas a vecinos y conocidos de la víctima.

El ingreso de la marmolería en la calle Castellanos al 2300 (Google Maps)

Entre los testimonios, varias personas mencionaron que González solía recibir visitas nocturnas de conocidos y mujeres, y que en los días previos al crimen una mujer había tenido una fuerte discusión con él por dinero. Agregaron, además, que la ahora condenada habría regresado junto a tres hombres e ingresado por el portón secundario. No obstante, los registros fílmicos evidenciaron únicamente el ingreso de Maite Fernández.

El fiscal Artacho detalló, durante las declaraciones posteriores al veredicto, que “en la filmación de una cámara ubicada frente al lugar donde ocurrió el hecho se puede ver a la imputada intentando ingresar al predio y un forcejeo con la víctima”.

Sostuvo que el crimen se cometió en el interior del establecimiento, donde Fernández utilizó dos cuchillos, ambos hallados después junto al cuerpo.

Al ser consultado sobre la posibilidad de que hubiera más agresores implicados, el fiscal manifestó que hasta el momento la única presencia corroborada mediante las pruebas es la de Maite Fernández. “Por el momento no es cierta esa posibilidad, sino una posibilidad que no deja de evaluarse. Pero lo cierto es que la persona que se ve ingresar a la finca en ese momento es Maite Fernández”, subrayó Artacho.