El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, instó este viernes a la dictadura de Cuba a presentar una “prueba de vida” del opositor José Daniel Ferrer, cuya familia y allegados denuncian que ha sido víctima de torturas en la cárcel y que su vida corre peligro.
“El régimen cubano continúa torturando al activista prodemocracia José Daniel Ferrer. Estados Unidos exige una inmediata prueba de vida y la liberación de todos los presos políticos”, manifestó Rubio a través de sus redes sociales. El jefe de la diplomacia estadounidense, de ascendencia cubana, ha sido una de las voces más críticas del régimen de La Habana. Al asumir el cargo de secretario de Estado, pasó a ser el latino con la posición más alta en la historia del país.
La organización opositora Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), que lidera Ferrer, denunció el pasado domingo que el disidente es víctima de “tortura sistemática” en la prisión de máxima seguridad de Mar Verde, en el oriente del país, y advirtió que su vida está “en grave peligro”.
Ferrer, considerado preso de conciencia por Amnistía Internacional, fue liberado en enero como parte de un acuerdo entre Estados Unidos y Cuba mediado por el Vaticano. Sin embargo, en abril, el Tribunal Supremo Popular le revocó la libertad condicional alegando que no había cumplido con los términos establecidos, por lo que fue devuelto a prisión.
No es la primera vez que su entorno denuncia maltratos físicos en la cárcel. En el pasado, han informado que Ferrer ha sido golpeado en varias ocasiones.
Por su parte, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) presentó este miércoles una denuncia y una solicitud de acción urgente ante la Relatora Especial de la ONU sobre la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, en favor del preso político cubano José Daniel Ferrer, ante lo que calificó como un “riesgo inminente para su vida”.
“Ese es el resultado de una huelga de hambre que inició el 25 de junio en respuesta a la escalada de torturas, tratos crueles, inhumanos y degradantes que enfrenta desde su regreso a la cárcel, después que le fuera revocada su libertad condicional el pasado abril”, señaló el OCDH en el documento al que tuvo acceso Infobae.
Hasta ahora, ni la dictadura de Cuba ni la prensa oficial han emitido declaraciones sobre estos episodios. Solo un medio oficialista de escasa circulación afirmó en su momento que las denuncias sobre agresiones “carecen de fundamento” y aseguró que Ferrer se encontraba en una condición “favorable”.
(Con información de EFE)