La comunidad tsimane de Bolivia presenta el envejecimiento más lento del mundo, según estudios científicos (encortosintantorollo.com)

En el corazón de la Amazonía boliviana, una comunidad indígena capta la atención de médicos y científicos de todo el mundo. Se trata de los tsimane, también conocidos como tsimanés o chimanes, que viven en pequeños grupos familiares y mantienen un estilo de vida tradicional basado en la agricultura, la pesca, la caza y la recolección.

Lo que los hace únicos no es solo su conexión con la naturaleza, sino un hallazgo que sorprendió a la comunidad científica internacional: envejecen más lentamente que el resto de la población mundial.

La revista Proceedings of the National Academy of Sciences publicó en 2023 un estudio que reveló que las personas mayores de esta comunidad muestran hasta un 70% menos de desgaste cerebral que adultos de la misma edad en países como Japón, Reino Unido o Estados Unidos.

Por su parte, The Lancet, una de las revistas médicas más reconocidas del mundo, informó que “un tsimane de 80 años tiene una edad vascular similar a la de un estadounidense de 55 años”. Es decir, su corazón y sus arterias se conservan mucho mejor que en cualquier otra población analizada hasta ahora.

Estos descubrimientos contradicen muchas de las ideas más repetidas en la medicina moderna, como la creencia de que el envejecimiento siempre viene acompañado por enfermedades del corazón o pérdida de memoria.

El cardiólogo Randall C. Thompson, que analizó arterias de momias de distintas civilizaciones, afirmó que “la acumulación de placas en las arterias” es un fenómeno común en la historia humana. Pero los tsimane demuestran que no necesariamente tiene que ser así.

Las pruebas fueron contundentes. Un equipo internacional evaluó con tomografías a 700 adultos mayores tsimane en el hospital de Trinidad, capital del departamento de Beni. El resultado fue asombroso: el 87% de los mayores de 70 años no tenía señales de arteriosclerosis, una de las principales causas de infartos. Es la proporción más baja registrada en estudios de este tipo.

El estilo de vida tradicional de los tsimane, basado en agricultura y actividad física, es clave para su salud excepcional (encortosintantorollo.com)

El dato central que se midió fue la cantidad de calcio en las arterias del corazón (indicador de mayor riesgo de enfermedades cardíacas). Según The Lancet, el 85% de los 705 tsimane analizados no tenía calcio en las arterias, y solo el 3% presentó niveles altos, considerados preocupantes. Incluso en los mayores de 75 años, el 65% seguía con nivel cero, algo inédito en estudios médicos.

“Realizamos un estudio de cohorte transversal que incluyó a todas las personas que se autoidentificaron como Tsimane y que tenían 40 años o más. La aterosclerosis coronaria se evaluó mediante la puntuación del calcio arterial coronario (CAC) mediante TC sin contraste en adultos Tsimane. Las puntuaciones de CAC superiores a 100 se consideraron representativas de enfermedad aterosclerótica significativa”, detalló la publicación.

Los investigadores también se enfocaron en el estado del cerebro. A través de estudios de imagen, observaron cuánto tejido cerebral pierden los tsimane con los años. El resultado fue claro: envejecen más lentamente a nivel cerebral.

En ese sentido, sus cerebros se achican menos con la edad, un proceso que, en otras poblaciones, suele estar asociado con problemas de memoria o enfermedades como el Alzheimer.

El 87% de los tsimane mayores de 70 años no presenta arteriosclerosis, la tasa más baja registrada globalmente (encortosintantorollo.com)

Uno de los expertos que lidera estas investigaciones es Hillard Kaplan, antropólogo y profesor de la Universidad del Sur de California. En declaraciones a BBC Mundo, sostuvo que “los tsimane tienen menos arteriosclerosis que las mujeres y hombres japoneses que siguen una dieta extremadamente baja en grasas”.

Cabe destacar que Kaplan lleva más de 20 años estudiando a esta comunidad junto a un equipo de científicos de universidades de Estados Unidos.

Según los investigadores, el secreto de esta salud prolongada está en la forma en que viven. Su dieta contiene solo un 14% de grasa, sin grasas industriales, y es muy rica en fibra y carbohidratos naturales. Comen sobre todo alimentos que ellos mismos cultivan o recolectan: plátano, yuca, arroz, frutas, semillas.

Además, no consumen alcohol ni tabaco, y caminan grandes distancias todos los días: entre 10 y 12 kilómetros, ya sea para buscar agua, cosechar o cazar.

Estas rutinas tienen un efecto directo en su salud. Los tsimane presentan presión arterial baja, colesterol saludable, niveles normales de azúcar en sangre y un peso corporal equilibrado. Aunque están expuestos a muchas enfermedades infecciosas, casi no registran otros factores de riesgo comunes en el resto del mundo.

Cuando se comparan sus hábitos con los de las grandes ciudades, la diferencia es aún más evidente. Mientras los tsimane superan los 15.000 pasos diarios, en ciudades como Tokio, Londres o Nueva York el promedio no alcanza los 5.000. Esta diferencia, sumada a una alimentación natural y libre de productos procesados, ayuda a explicar por qué su cuerpo se mantiene en buen estado durante más tiempo.

Los tsimane caminan entre 10 y 12 kilómetros diarios, superando ampliamente la actividad física de las grandes ciudades (encortosintantorollo.com)

Por estos motivos, los tsimane se convirtieron en un referente para médicos, epidemiólogos y científicos que buscan entender cómo se puede vivir más años y con mejor salud. Aunque replicar su estilo de vida en contextos urbanos puede parecer difícil, sus hábitos ofrecen pistas valiosas sobre lo que realmente ayuda a preservar el cuerpo con el paso del tiempo.

Mientras tanto, lejos de laboratorios, clínicas y debates académicos, los tsimane siguen con su vida diaria en las riberas del Beni. Caminan por la selva, siembran sus cultivos y mantienen sus costumbres. Ajena al ritmo acelerado de la vida moderna, su comunidad demuestra que otra forma de envejecer —más natural, más activa y más saludable— no solo es posible, sino que ya existe.