El parlamento de Surinam eligió el domingo a la médica Jennifer Geerlings-Simons como la primera presidenta del país.
La Asamblea Nacional del país sudamericano elige al presidente por dos tercios de los votos. Geerlings-Simons, congresista, se postuló sin oposición después de que su partido formara una coalición con el objetivo de derrocar al actual líder del país tras las elecciones de mayo sin un ganador claro.
La coalición se formó mientras el país en problemas se prepara para una afluencia de riqueza tras el descubrimiento de importantes depósitos de petróleo en alta mar, con la primera producción prevista para 2028.
Geerlings-Simons, quien lidera el Partido Nacional Democrático, será investida presidente del país de habla holandesa de más de 646.000 habitantes el 16 de julio.
“Soy consciente de que la pesada tarea que he asumido se agrava aún más por el hecho de ser la primera mujer que sirve al país en este cargo”, dijo después de las elecciones.
“Asumo este cargo para servir. Y utilizaré todo mi conocimiento, fuerza y perspicacia para poner nuestra riqueza al alcance de todo nuestro pueblo, con especial atención a nuestros jóvenes y a todos aquellos que hasta ahora no han tenido las oportunidades de un desarrollo óptimo”, añadió la también líder del NDP, fundado por el ya fallecido ex dictador Desi Bouterse.
El mandato de cinco años del presidente Chandrikapersad Santokhi ha estado plagado de escándalos de corrupción, y se vio obligado a recurrir al Fondo Monetario Internacional para que encaminara nuevamente la economía de Surinam.
El Partido de Reforma Progresista (VHP), de Santokhi, no presentó candidato y con 17 escaños se convirtió en el único partido de oposición en el Parlamento. En un comunicado el jueves, había señalado que no veía viable “asumir responsabilidades gubernamentales”.
Tras felicitarla, Santokhi le pidió a Simons gobernar con “mentalidad abierta” y cumplir “con la promesa de democracia”.
Como resultado, la deuda pública del país se reestructuró en gran medida y los subsidios gubernamentales se redujeron significativamente. En términos macroeconómicos, Santokhi logró éxito, pero la población se quejó ante las medidas de austeridad, lo que desencadenó protestas violentas.
Geerlings-Simons, de 71 años, y su compañero de fórmula, Gregory Rusland, declararon el domingo a la prensa que priorizarán la estabilización de las finanzas del país. Anteriormente, había manifestado su interés en aumentar los ingresos estatales, entre otras cosas, mejorando la recaudación de impuestos, incluso en el sector de la minería de oro a pequeña escala.
Winston Ramautarsingh, ex presidente de la Asociación de Economistas de Surinam, dijo que Geerlings-Simons enfrentará serios desafíos en los años antes de que el país produzca sus primeros barriles de petróleo, en parte porque debe pagar alrededor de 400 millones de dólares anuales en préstamos e intereses.
“Surinam no tiene ese dinero”, dijo. “El gobierno anterior reprogramó las deudas, pero eso fue solo un aplazamiento”.
La antigua colonia neerlandesa se ha visto afectada desde su independencia en 1975 por rebeliones y golpes de Estado.
Pero gracias al reciente descubrimiento, a partir de 2028 su renta se disparará cuando inicie la explotación de un primer bloque con 220.000 barriles diarios, 44 veces más que la producción actual.
(Con información de AP y AFP)