En el país de Vaca Muerta, la ola de frío expuso otra vez la fragilidad de un sistema energético que acumula años de desinversión, atraso tarifario e inestabilidad macroeconómica.
La emergencia por el consumo récord de gas natural que se vivió esta semana llevó el sistema al límite de su capacidad, por lo que hubo tres encuentros en menos de 24 horas del Comité Ejecutivo de Emergencia que reúne al Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) junto a empresas transportistas y distribuidoras, tal como contó Infobae en exclusiva.
Las medidas que se tomaron para garantizar el abastecimiento prioritario de los hogares incluyeron el corte del suministro de gas en industrias —incluidas las que tienen contratos firmes “con ventana”—, interrupciones por 24 horas en estaciones de GNC y la restricción parcial de las exportaciones de fluido a Chile.
Todo eso ocurrió en el país donde se desarrolla Vaca Muerta, segunda reserva mundial de gas no convencional y la cuarta de petróleo. El potencial de la cuenca neuquina es destacado por consultoras y medios internacionales.
En las mismas horas en las que se diseñaban las restricciones al consumo de gas, el ministro de Economía Luis Caputo firmó con Paraguay un Memorándum de Entendimiento para estudiar la viabilidad de exportar fluido a ese país y llegar a Brasil, con quienes se alcanzó un acuerdo similar a finales del año pasado que ya contó con algunos envíos.
La Secretaría de Energía, a cargo de María Tettamanti, confirmó el anticipo de este medio a través de un comunicado publicado horas más tarde: “Como resultado de la situación crítica del sistema y las limitaciones operativas en la inyección de gas, se interrumpió el suministro a contratos en firme de GNC e industrias en amplias regiones. El corte alcanza a Buenos Aires Norte, Centro Norte, Litoral, Norte, Noroeste, Cuyo y Sur. En el resto del país, se restringe el suministro en contratos interrumpibles y, en algunas localidades, se reduce a mínimos técnicos incluso en contratos firmes.
Además, el martes unos 100.000 usuarios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se quedaron sin luz durante la madrugada. En el Gobierno planean lanzar en los próximos meses una serie de licitaciones para obras prioritarias que refuercen el sistema, pero admiten en reserva que el próximo verano hay riesgos de que los apagones se repitan.
“Para llegar a la misma calidad de servicio de luz y de gas que había hace 20 años habría que invertir arriba de 25.000 millones de dólares. La gestión actual no quiere trasladarlo a la tarifa, ni financiarlo con gasto público, por lo que hay que buscar inversión privada”, señaló a Infobae el ex secretario de Energía Emilio Apud.
La energía sigue siendo un tema espinoso para la población y para los Gobiernos que intentan corregir el atraso tarifario mientras el servicio se mantiene deficiente. “Guillermo Moreno dejó un karma en la industria. Parece que la palabra emergencia no se puede decir, pero es mejor que la población esté enterada de la situación”, comentó a Infobae una fuente relevante del sector eléctrico.
El aumento en la demanda de gas se combinó esta semana con fallas técnicas en la producción de algunos yacimientos de Vaca Muerta y problemas en el transporte, lo que redujo la capacidad operativa del gasoducto Perito Moreno (ex Néstor Kirchner) al 70%, según fuentes oficiales. “Faltan entre 6 y 7 millones de metros cúbicos diarios de gas neuquino, cuando la capacidad total del gasoducto Perito Moreno es de 22 millones de metros cúbicos diarios”, agregaron.
La situación derivó además en interrupciones del servicio eléctrico. El martes a la madrugada, la distribuidora Edesur emitió un comunicado en el que afirmó que “debido a inconvenientes en la generación de energía ajenos a la empresa, se realizan cortes preventivos de suministro en ciertos barrios de su área de concesión”. Fueron 100.000 usuarios del AMBA sin suministro en una de las noches más frías del año, cuando muchos edificios solo funcionan con electricidad.
“Siempre pongo como ejemplo que cuando acá hay 40 grados o 35 grados seguidos tenemos problemas, pero en Uruguay o Paraguay no. Ahí hay un problema nuestro, que se llama falta de inversión. No se le puede pedir a este Gobierno que resuelva en un año los desastres de 20 años. Hay que decirle: apúrense, pero hay que entender que esto no se soluciona de un día para otro”, advirtió Apud.
Este período de bajas temperaturas cederá a partir de este jueves 3 de julio, por lo que el Gobierno y las empresas siguen de cerca la situación.