En una noche repleta de recuerdos, emociones y reencuentros, Gran Hermano 2025 celebró su edición especial de premios con una ceremonia que reunió a todos los participantes que pasaron por la casa más famosa del país. Telefe emitió este jueves 26 de junio los GH Awards, bajo la conducción de Santiago del Moro, y buscó homenajear los momentos más emblemáticos de una temporada que mantuvo al público cautivo durante siete meses.

A lo largo de la ceremonia se entregaron premios en categorías especiales, muchas de ellas definidas por la producción en base a los momentos virales y el impacto de cada episodio.

En la primera terna de la noche, se premió a Jenifer y Giuliano como protagonistas del mejor beso. Cabe recordar que una vez fuera del reality, oficializaron su relación, que duró apenas algunas semanas, pero dejó momentos memorables como el “accidente sexual” y el ser la única pareja de la edición que “concretó” dentro de la casa.

Jenifer y Giuliano fueron premiados por el mejor beso, destacando el amor fugaz dentro de la casa

En tanto, el galardón al mejor look de la temporada fue para Ulises, que se caracterizó por su estilo marcado por crop tops. Con un abdomen limpio, el joven cordobés, de a poco, comenzó a lucir cada vez más puperas, hasta que lo patentó.

Otro momento, con alta carga emocional, fue la premiación a Chiara, que recibió el reconocimiento al mejor llanto. La actriz se dedicó a reír, llorar y ser completamente genuina dentro de la casa, marcando lo que sí y lo que no le gustó en cada momento.

La terna de mejor congelados, una de las secciones más celebradas por el público, tuvo como ganadores a Brian y su pareja, protagonistas de un reencuentro sorpresivo en el que la mujer le solicitó casamiento. Cabe recordar que ambos realizaron esta unión dentro de la casa, en uno de los eventos más destacados de la edición.

En el plano del entretenimiento, Luz fue elegida como ganadora del premio al mejor baile. La joven jujeña brilló en la coreo de High School Musical, además de dar todo tanto en las coreos semanales como en las fiestas que se realizaban los viernes dentro del reality.

El reconocimiento a la mejor cocinera fue para Sandra, una de las participantes que asumió el rol de encargada de la cocina y que, en varios tramos del reality, organizó las comidas del grupo en contextos de escasez y conflictos. Pese a las críticas bromatológicas, la pescadora logró mantenerse en la competencia habiendo cocinado para más de 30 personas en total.

Los premios también apuntaron a valores vinculados al orden, la disciplina y la actuación. En este sentido, Eugenia fue distinguida como la más limpia, una categoría que celebró su compromiso con la higiene y el orden dentro de la casa, una tarea muchas veces olvidada y que suele generar tensiones entre los jugadores.

La médica santiagueña fue destacada como la más limpia de la casa de Gran Hermano

En la categoría de mejor actriz, la ganadora fue Selva, reconocida por su habilidad para interpretar situaciones en las obras que la casa realizó para recaudar dinero para distintas causas. Cabe recordar que la uruguaya protagonizará su propio espectáculo teatral en la calle Corrientes, con la compañía de su gran amigo Pablo Atkinson.

Por su parte, Tato se llevó el premio al mejor festejo, en alusión a sus celebraciones tras superar nominaciones, pruebas de liderazgo, e incluso, haber ganado la final del reality.

Uno de los momentos más ovacionados fue la entrega del Momento de Oro, que quedó en manos de Petrona, una de las participantes más recordadas por su autenticidad. En plena gala de nominación, la tucumana le dio un voto a su compañera Sandra, mientras la tenía al lado dentro del confesionario y las redes no dejaron pasar el momento.

Katia fue distinguida por la mejor entrada. Al arribar a la casa, “La Tana” aceleró su moto en señal de su llegada. Y al abrirse la puerta del lugar, apareció con el casco puesto ante la sorpresa del resto de los participantes, que la recibieron con desconcierto y alegría.

El reconocimiento al momento más emotivo de la temporada fue otorgado a Luciana y su madre, en referencia al ingreso sorpresa que se produjo durante uno de los tramos más sensibles del programa. “Gracias, Gran Hermano. Buenas noches. Hola chicos, qué bonitos y bonitas están todos. ¿A dónde está mi hija Luciana? ¿A dónde está mi niña? Te amo, bebé, te amo, hijita de mi alma, te extrañé mucho, mucho, mucho”, fueron las primeras palabras de la mamá de la bailarina, quien realizó su cambio de género antes de entrar al programa sin habérselo contado previamente a sus familiares.

En una categoría distinta, pensada con tono irónico, el premio al lenguaje soez fue para Lourdes, una de las participantes que se destacó por su forma frontal de expresarse y por protagonizar discusiones subidas de tono. La misma joven se sintió avergonzada por haber recibido el premio y, entre risas, se disculpó con sus padres por las palabras utilizadas en la casa.

Lourdes recibió el galardón al lenguaje soez con humor, recordando sus discusiones más memorables dentro de la casa

Cerca del cierre de la noche, el premio a la asistencia perfecta entre los panelistas fue entregado a Eliana Guercio, quien fue reconocida por su compromiso con el análisis del programa.

Finalmente, se entregó el premio al mejor compañero. Juan Pablo “Devi” De Vigili se quedó con el reconocimiento, que fue votado entre los mismos participantes del reality show. El correntino siempre intentó ser mediador y mantenerse en buenos términos con todos los jugadores, lo que le valió este último trofeo.