Una púa de guitarra, una baqueta o una prenda de vestir son los objetivos más codiciados en los recitales. Los fanáticos sueñan con tener algo de su artista favorito. En manos de un fan, el objeto cobra un gran valor, no solo sentimental sino también económico. Pero quienes aspiran a más sueñan con tener instrumentos como la guitarra o el bajo. Muchos están dispuestos a lo que sea por tener en sus manos algo de su músico favorito, incluso a robar.
En febrero de 2024, Paul McCartney recuperó su icónico bajo sustraído 51 años antes, en Londres. Tanto el exbeatle como Höfner, fabricante del instrumento, autenticaron la valiosa reliquia que había acompañado a The Beatles durante su época de fama.
El bajo Höfner 500/1 había estado durante los momentos de mayor éxito de la banda. Incluso se puede oír en grabaciones legendarias como “Love Me Do”, “She Loves You” y “Twist and Shout”.
El instrumento había estado juntando polvo en el desván de una casa familiar en East Sussex, Inglaterra. La familia, que tenía el bajo en su casa, informó a periodistas en 2023, luego de que se iniciara una nueva campaña para su búsqueda. “Paul está increíblemente agradecido con todos los implicados”, señaló el comunicado emitido en el sitio web oficial del cantante.
BB King y la pérdida de Lucille
Pero Paul no fue el único músico en sufrir un robo de este tipo. Un hecho similar le ocurrió a BB King. La leyenda del blues tenía una Gibson a la cual llamó Lucille. En una oportunidad, robaron a la compañera de recitales del artista. Eric Dahl, otro músico, la compró por error en una casa de empeños de Las Vegas. Tras conocer sobre el caso, se la devolvió a BB King.
Se trató de uno de los últimos instrumentos ejecutados por King antes de su muerte en 2015. Luego, se vendió en una subasta de su patrimonio por 280.000 dólares, en 2019.
El misterio detrás de la guitarra de Eric Clapton
En 1966, Eric Clapton lanzó su álbum de estudio Blues Breakers. El disco contenía canciones en las cuales sonaba su icónica guitarra Gibson Les Paul, llamada Beano. A diferencia de McCartney y King, Clapton no logró reencontrarse con su guitarra.
El cantautor Joe Bonamassa afirmó saber dónde está. Según expuso la BBC, Bonamassa indicó en una entrevista que la guitarra estaba en una colección privada de EEUU, lo que impulsó una petición en 2018 para alentar al cantautor a revelar más detalles. Hasta el momento, el instrumento no apareció.
El gran robo al Jazz de New Orleans
Pero los bajos y las guitarras no son los únicos instrumentos codiciados. Hay quienes decidieron apostar más fuerte. En 2022, la banda de jazz Stooges Brass Band sufrió un robo de todo su equipo. Lo peor del hecho fue que sucedió dos semanas antes del Festival de Jazz de la ciudad.
Según señaló la BBC, el monto total era de 12.000 dólares. El robo incluía platillos, baterías, teclados y amplificadores. El equipamiento se encontraba dentro de la camioneta de la banda estacionada en la casa de uno de los miembros. Si bien el suceso amenazó con arruinar la presentación de los músicos en el festival, pudieron reprogramar su actuación para una nueva fecha.
Otro robo a The Beatles
Paul McCartney no fue el único beatle en enfrentar la pérdida de uno de sus instrumentos. George Harrison también sufrió el robo de su guitarra Rickenbacker, en 1966. El director ejecutivo de la marca, John Hall, explicó que el misterio de la viola duró muchos años debido a que “nadie conoce el número de serie exacto de la guitarra original”.
Sin embargo, detallaron que redujeron la lista a cinco posibles guitarras. Este no fue el único robo sufrido por Harrison. En 1973, le sustrajeron de su casa su Les Paul Lucy. La vendieron a una tienda de música de Los Ángeles, que a su vez la vendió al músico mexicano Miguel Ochoa, quien realizó un intercambio con Harrison. El beatle recuperaba su guitarra y Ochoa se quedaba con una Les Paul Standard y un bajo Fender Precision.