Los Pumas se preparan para enfrentar a Lions con muchos jugadores jóvenes (AP)

El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, inicia una nueva etapa enfrentándose a British & Irish Lions en Dublín este viernes 20 de junio a partir de las 16 (hora de Argentina) y contará con la transmisión de ESPN y Disney+.

El escenario del partido y la fecha marcan el punto de partida para una gira con significativas particularidades que influyen en las expectativas y preparativos del plantel sudamericano. A pesar de la larga tradición y prestigio del rival europeo, Los Pumas llegan a este compromiso en condiciones poco habituales para el primer nivel de la competencia internacional.

Una de las características más notorias de la preparación de Los Pumas es que el equipo argentino apenas suma un puñado de entrenamientos conjuntos antes de este enfrentamiento. Esta situación limita el tiempo disponible para ajustar tácticas, consolidar sociedades y definir la identidad colectiva en el campo de juego.

Las condiciones responden, en parte, a una agenda apretada y a la falta de acceso completo al plantel durante el periodo previo al encuentro. Esto amplifica el desafío para el grupo y el cuerpo técnico, quienes deben coordinar esfuerzos y estrategias en un lapso reducido y con margen mínimo para el error.

La nómina de jugadores argentinos tampoco cuenta con varias de sus figuras más emblemáticas para este partido. Las ausencias se producen por distintas razones ligadas al calendario y a disponibilidad de los deportistas, lo que obliga a recurrir a un plantel renovado y menos experimentado en algunos puestos clave.

Felipe Contepomi, el headcoach argentino, debió adaptarse a estas circunstancias, explorando alternativas y depositando confianza en nombres menos habituales.

Boris Wenger, uno de los jugadores de Dogos que estará en Los Pumas. @superrugbyamericas)

Comparación entre el presente y el pasado de Los Pumas

Este nuevo cruce con los British & Irish Lions revive el recuerdo del enfrentamiento disputado en 2005, cuando Argentina sorprendió al mundo del rugby al empatar 25-25. En ese entonces, la situación era aún más precaria: la mayoría del plantel era amateur, algunos jugadores fueron convocados a último momento y carecían de experiencia internacional. Contepomi, por entonces capitán, relató en varias ocasiones que conoció a algunos de sus compañeros el mismo día del partido, en el lobby del hotel.

El contraste con la actualidad es notorio. Para esta ocasión, el equipo dirigido por el ex apertura de Newman, cuenta con 32 jugadores, entre los cuales 11 son debutantes, pero provienen de una estructura profesional consolidada. Ocho de ellos juegan en las franquicias Dogos XV, Pampas y Tarucas, que compiten en el Súper Rugby Américas. Esto indica que, aunque el plantel tenga menor experiencia en ciertos puestos, existe una base sólida que proporciona continuidad, competencia de alto nivel, preparación física y táctica que no estaban disponibles veinte años atrás.

Las diferencias también se proyectan sobre el desafío deportivo en sí mismo. El episodio de Cardiff en 2005 representó, en palabras del propio entrenador, “el desafío más grande” por la improvisación y la expectativa de una derrota amplia.

Nicolás Fernández Miranda fue el medio scrum de Los Pumas en 2005

La visión de Felipe Contepomi

La postura del exjugador del Leinster refleja una mirada pragmática y exigente frente al reto que representa el partido. En declaraciones previas, el entrenador fue enfático al señalar que la falta de tiempo de preparación no será utilizada como excusa. Esta afirmación evidencia una voluntad de asumir responsabilidad y de reforzar una cultura de alta exigencia dentro del seleccionado, independientemente del resultado.

Su análisis parte de la experiencia personal acumulada, incluyendo el vínculo emocional con el equipo nacional y la vivencia directa del empate en 2005, calificado como una proeza dadas las condiciones de amateurismo y desconocimiento entre los convocados.

Felipe Contepomi, headcoach de Los Pumas (Reuters)

Actualmente, Felipe observa con claridad el valor que tiene contar con una infraestructura profesional robusta. Según su lectura, las tres franquicias nacionales ofrecen una plataforma eficaz para el desarrollo de jugadores y el armado de planteles competitivos. Aunque también reconoce que el rugby europeo ha evolucionado, se muestra convencido de que la brecha de nivel se ha reducido, lo que permite a Los Pumas plantarse con aspiraciones realistas frente a los mejores equipos del mundo.

El cruce con los British & Irish Lions representa, entonces, un examen de alta exigencia para el rugby argentino, pero también una oportunidad para validar el crecimiento estructural del deporte en el país. La expectativa se apoya en la evolución institucional desde aquel lejano 2005, con la confianza de que el proceso de profesionalización marcará la diferencia en el campo de juego actual.