El ingreso de dólares del

Las reservas internacionales del Banco Central se sostienen sobre los USD 38.000 millones, un stock en los últimos dos meses se vio reforzado por un desembolso de USD 12.000 millones del FMI (Fondo Monetario Internacional), otros USD 2.000 millones aportados por organismos multilaterales, más USD 1.000 millones captados a través de la reciente emisión del Bonte 2030.

Sin embargo, la salida del cepo cambiario anunciada el 11 de abril no significó un mayor flujo de divisas por otras vías, al menos por el momento. De hecho, la banda de libre flotación dispuesta por el Gobierno -con un límite inferior en torno a los $1.000 por dólar, y uno superior en los $1.400- se volvió una restricción para que el Banco Central compre reservas.

José María Segura, economista Jefe de PwC Argentina, señaló que “el BCRA, bajo los lineamientos del acuerdo con el FMI, debe revertir el saldo negativo de reservas netas, estableciendo metas progresivas de acumulación para el año en curso. Sin embargo, priorizando el objetivo de baja de inflación, se autolimita a comprar reservas por encima del piso de la banda. En consecuencia, y con el mercado internacional de deuda virtualmente cerrado -si bien recientemente hizo una colocación en pesos integrable en dólares, el costo aún es elevado- la única vía factible es favorecer la oferta de dólares para que la cotización toque el límite inferior”.

“La consolidación de reservas, dada la restricción externa, depende crucialmente del superávit en cuenta capital. Argentina enfrenta el desafío de fortalecer su atractivo para la inversión extranjera directa, diferenciándose de otras economías regionales que ya muestran flujos robustos en este rubro. Las recientes flexibilizaciones cambiarias, particularmente la liberación de utilidades y dividendos para las utilidades obtenidas durante 2025, constituyen pasos iniciales hacia este objetivo”, observó Segura.

En el segundo semestre del año pasado, el exitoso blanqueo de capitales impulsado por el Gobierno permitió un crecimiento de los depósitos en dólares del sector privado -que se reflejó en el aumento de las reservas del BCRA- y en este 2025, el Gobierno aspira a que el reingreso de los dólares del “colchón”, atesorados por los ahorristas, aporten un flujo extra para ampliar la oferta en el mercado.

Un reporte de Rava Bursátil indicó que“la expectativa de que los dólares del ‘colchón’ salgan a la luz no se concreta por el momento. La única modificación consiste en un ajuste de los umbrales de información para reportar movimientos a ARCA, no un blindaje legal. Los depósitos en dólares disminuyen a diario. Argentina enfrenta vencimientos de deuda por más de USD 28.000 millones el año próximo y el cumplimiento de la meta del FMI se pospuso para julio”.

Ignacio Morales, Chief Investments Officer, de Wise Capital», expresó que “al no intervenir el BCRA en el mercado de cambios, sólo ingresan divisas por endeudamiento o por desembolsos. De acuerdo con el cronograma de desembolsos presentado por el Gobierno, ingresarían en junio USD 2.000 millones de parte del FMI; USD 2.000 millones de un nuevo REPO (préstamo de bancos garantizado con bonos) y USD 2.100 millones de organismos multilaterales”.

Alejo Costa, Head of Economics Research & Strategy de Max Capital, precisó que “el Gobierno dio un importante paso en su intento por incorporar dólares no declarados a la economía formal. En Casa Rosada, el diputado y probable principal candidato para la provincia de Buenos Aires en las elecciones de octubre, José Luis Espert, presentó el proyecto de ley de ‘Principio de Inocencia Fiscal’. La iniciativa, que ya está en el Congreso, propone elevar drásticamente los umbrales que disparan investigaciones por evasión, eliminando miles de casos menores y enfocando los recursos en infracciones verdaderamente relevantes”.

“Los nuevos umbrales penales son: evasión simple de $1,5 millones a $100 millones; evasión agravada de $15 millones a $1.000 millones; y evasión agravada mediante uso de terceros o exenciones fraudulentas de $2 millones a $200 millones. Además, acorta los plazos de prescripción para las auditorías y ofrece protección permanente a quienes se adhieran al nuevo Régimen Simplificado de Ganancias. Bajo este esquema, la carga tributaria se calculará únicamente sobre los ingresos declarados, sin tener en cuenta variaciones patrimoniales ni niveles de gasto”, detalló Costa.

Déficit de cuenta corriente

Detrás de la dificultad para acumular reservas está el déficit de cuenta corriente de la economía argentina, ininterrumpido desde junio de 2024. En esta cuenta se registran las transacciones entre residentes del país y el resto del mundo por intercambio de bienes (balanza comercial), servicios (turismo y otros), rentas y transferencias.

Este flujo entre los dólares que ingresan y salen del país arroja casi un año de déficit por el mayor gasto de la población en divisas, lo que está afectando la capacidad de acumular reserva.

Fuente: Hernán Nessi- agencia Reuters, en base a BCRA.

En medio del intento del presidente Javier Milei por mantener estabilizado el tipo de cambio para combatir la alta inflación, hubo un crecimiento en las importaciones y un creciente déficit en la balanza turística que explican gran parte del resultado.

Según el Balance Cambiario del BCRA, en abril hubo un déficit de USD 636 millones y totalizó casi USD 12.300 millones en once meses consecutivos de resultado negativo.

La banda de libre flotación del dólar sin “cepo” es una barrera para que el BCRA pueda comprar reservas en el mercado

“La cuenta corriente (…) continúa siendo fuente de salida de divisas, arrojando un déficit por onceavo mes consecutivo y acumulando un saldo negativo en 2025 de 4.833 millones de dólares”, subrayó en un informe la consultora ACM. “La normalización de pagos de importaciones, el saldo negativo en servicios e intereses y el estructural déficit de turismo, explican el deterioro de esta cuenta durante este año”, argumentó.

“La cuenta ‘Servicios’ registró un déficit de 1.161 millones de dólares en abril. Dicho déficit se explicó por los egresos netos en concepto de ‘Viajes, pasajes y otros pagos con tarjeta’, de ‘Otros servicios’ y de ‘Fletes y seguros’, parcialmente compensados por los ingresos netos en concepto de ‘Servicios empresariales profesionales y técnicos’”, publicó el BCRA.

De esta manera, el sector Servicios -donde turismo y consumos en el exterior tiene la mayor ponderación- acumula en el primer cuatrimestre de 2025 un déficit de USD 4.185 millones, por encima del superávit comercial por bienes registrado por el Indec, que totalizó los USD 1.265 millones en el primer cuatrimestre.

Analistas adelantaron que es poco probable que el resultado de la cuenta corriente revierta esta tendencia en el corto plazo. Que la cuenta corriente pase a positivo es “un desafío importante por el hecho de que se da en medio de un proceso electoral, con variables macro atractivas para la salida de fondos (compra de bienes y servicios, viajes), y unos meses más adelante en un contexto de menores exportaciones agrícolas por cuestiones estacionales”, señaló a Reuters Pablo Besmedrisnik, economista y director de VDC consultora.

En el mismo informe del BCRA se desglosa que la gran fluctuación de resultados del rubro ‘bienes’ y los continuos déficits de los segmentos ‘servicios’ e ‘ingresos primarios’ son una dificultad para el acceso de divisas por parte del Gobierno. En contraste, “la cuenta de capital sería favorable si reflejara un proceso de ingreso de inversiones productivas”, enfatizó VatNet Financial Research.