Jorge Macri reunió a todo su gabinete en el Auditorio Belgrano e hizo autocrítica tras la dura derrota electoral del PRO en los comicios legislativos de CABA

En el marco de una reunión con su Gabinete ampliado, realizada este miércoles a la mañana en el Auditorio Belgrano, ubicado en el barrio porteño homónimo, el jefe de Gobierno de CABA, Jorge Macri, se refirió a la dura derrota electoral que sufrió el PRO en las últimas elecciones legislativas, la cual asoció a la nacionalización de la campaña del partido amarillo en la Ciudad. Tras el resultado adverso en las urnas, el primo del expresidente Mauricio Macri aseguró que escuchó “el mensaje de los vecinos”, por lo cual de ahora en adelante comenzará “una nueva etapa” en su gestión.

Escuchamos el mensaje de los vecinos. Para nosotros empieza una nueva etapa. Vamos a ordenar, reformar y modernizar lo que haga falta para estar más cerca y cuidar mejor. Para esto vinimos”, afirmó Jorge Macri, durante la reunión con sus funcionarios que encabezo junto a la vicejefa de Gobierno, Clara Muzzio.

En relación con el sorpresivo triunfo de Manuel Adorni, candidato que encabezó la lista de La Libertad Avanza, el exintendente del partido bonaerense de Vicente López explico que “cuando eso ocurre, confluyen varios factores que tenemos que asumir con humildad y responsabilidad”. Y en esa línea, agregó: “No pudimos conectar con el vecino como históricamente lo supo hacer el PRO”.

Durante su discurso, el Jefe de Gobierno de CABA sostuvo que la campaña en la Ciudad se nacionalizó y “nos sacó del eje local”. “Escuché el mensaje con claridad. Por eso estoy convencido de que estamos ante un nuevo punto de partida”, sostuvo.

En otro tramo de su alocución, remarcó que la Ciudad no necesita solamente administradores, sino líderes que tomen decisiones: “Defendamos lo que vale la pena sostener. Y no dudemos en cambiar lo que no funciona”, subrayó.

“Ese fue siempre el espíritu del PRO. No especulamos, actuamos. Y cuando hace falta cambiar, cambiamos. Eso también es hacer”, destacó Macri, antes de pasar a explicar los cinco ejes estratégicos que tendrá su gestión en los próximos dos años y medio, los cuales fueron anunciados el viernes pasado.

En este sentido, Jorge Macri planteó que la Ciudad necesita un sistema de transporte ágil, eficiente y que esté bien conectado. Y resaltó la importancia de seguir apostando por la cultura, el turismo y el deporte.

Sobre la modernización del Estado porteño, destacó: “Buenos Aires necesita un Estado en reforma permanente, más eficiente, menos burocrático, más liviano. No hay reforma sin incomodidad, pero el costo de no cambiar es mucho más alto”.

Por tal razón, les pidió a sus funcionarios el máximo esfuerzo y compromiso para identificar cada trámite y procedimiento que deba ser reducido, simplificado o eliminado. “No hay más excusas. Los porteños nos pidieron cambiar”, insistió.

“Este es el arranque de la etapa más importante de nuestra gestión. Estamos ante una oportunidad histórica”, anunció. Y para finalizar, añadió: “Es el momento de levantar la cabeza y recuperar ese fuego que nos hizo elegir este camino. Militemos la gestión con orgullo y pasión. Vamos a poner a Buenos Aires donde tiene que estar”.

Una derrota tan dura como inesperada

Infografía: resultados históricos del PRO en CABA

Consumado el escrutinio, la lista del presidente Javier Milei, encabezada por su vocero, Manuel Adorni, alcanzó el 30,13% de los votos. En segundo lugar, quedó el peronismo, que apostó por Leandro Santoro, con el 27,34 por ciento. El PRO, que tuvo a la diputada nacional Silvia Lospennato como figura principal, terminó tercero, muy lejos de los dos primeros lugares, con 15,93 por ciento.

La información oficial marcó una derrota dura para el PRO y para su presidente, Mauricio Macri, que participó activamente de la campaña.

La primera victoria en CABA del PRO había sido en 2005, cuando Marcos Peña ganó las elecciones legislativas “colgado” a la boleta que encabezó Macri como postulante a diputado nacional. Dos años más tarde, en 2007, el sello ganó las elecciones por la jefatura de Gobierno de la Ciudad, distrito que gobierna hace 18 años ininterrumpidamente.

El resultado también fue leído como un traspié del jefe de Gobierno Jorge Macri, quien decidió desdoblar los comicios para municipalizar el debate y conservar la hegemonía en el distrito.

Tal fue el grado del fracaso electoral, que el PRO no ganó en ninguna de las 15 comunas de la Capital Federal.