Este domingo se difundió la primera encuesta de intención de voto en Bolivia en base a los candidatos inscritos para las elecciones generales que se disputarán el 17 de agosto. El empresario Samuel Doria Medina y el ex presidente Jorge Quiroga (2001-2002), ambos líderes de la oposición, lideran el sondeo con el 19,1% y el 18,4% de la favorabilidad de la muestra, según el estudio realizado por la empresa Ipsos Ciesmori y difundida por el canal Unitel.

El tercer lugar lo ocupa el senador Andrónico Rodríguez, el dirigente cocalero que muchos en Bolivia consideran el heredero político de Evo Morales, que se convierte en el candidato de izquierda mejor posicionado con 14,2%. Los demás postulantes no superan el 10% de la intención de voto, el mismo porcentaje que tienen los indecisos.

En los datos presentados este domingo, destaca el bajo rendimiento del Movimiento Al Socialismo (MAS) que ya se anunciaba en sondeos interiores. El candidato del oficialismo es el ex ministro de Gobierno (Seguridad), Eduardo Del Castillo, que obtuvo el 2,3% de la intención de voto, el peor porcentaje de la sigla en décadas.

Doria Medina (der) y Lupo, son los candidatos del frente Unidad.

Del Castillo fue presentado como candidato del MAS faltando pocos días para el registro de candidatos el 19 de mayo. Su postulación surge luego de la declinación del presidente Luis Arce de disputar la Presidencia en medio de crecientes protestas sociales por la crisis económica que enfrenta el país y de la división interna del partido, que fue hegemónico y logró porcentajes históricos de apoyo electoral.

Sin embargo, la elección todavía está abierta y se perfila incierta, con porcentajes mínimos de diferencia entre los principales candidatos y con un 27% de votantes que se inclina por un voto nulo, blanco o aún no lo tiene definido. A esto se suma el hecho de que pueden haber cambios en la papeleta electoral, a raíz de los recursos judiciales presentados contra frentes políticos que podrían derivar en la anulación de partidos o sustitución de candidatos, pese a los reclamos contra la “judicialización” de la política.

El Tribunal Electoral tiene previsto presentar la lista de postulantes habilitados el 6 de junio, después de lo cual se abre un periodo de sustitución.

Frontis del Tribunal Supremo Electoral en La Paz, Bolivia. Foto: APG

Los analistas advierten que si bien la sigla del MAS se hunde en las encuestas por la baja aprobación del Gobierno, la representación política de las organizaciones campesinas y obreras del país, que antes votaba por Morales, se puede ver reflejada en la candidatura del senador Rodríguez o en otro postulante que pueda representar al denominado “bloque popular”.

“El 27% correspondiente a votos indecisos, blancos o nulos es una cifra clave. Se estima que el voto “evista” ronda el millón de personas. La gran incógnita es hacia dónde se dirigirá ese caudal: ¿a Andrónico, si es habilitado? Lo más probable es que no se incline hacia la oposición ni a Del Castillo, sino que opte por la opción más fuerte del “bloque popular”, una especie de voto útil dentro de la izquierda”, sostiene el analista e investigador social, Wilmer Machaca.

Para la politóloga Susana Bejarano, el clivaje central de la campaña es la economía y la crisis. “La gente quiere salir de la crisis, no le importa mucho que Samuel y Tuto (Jorge Quiroga) tengan 28 años candidateando, tampoco es que ilusionan más allá del 20, pero el bloque opositor concentra la mayor intención de voto hoy”, escribió en sus redes sociales.

Fue acompañado por el presidente Luis Arce al registro de su candidatura el 19 de mayo en el Tribunal Electoral en La Paz, Bolivia. 20 de mayo de 2025. REUTERS/Claudia Morales.

Los comicios están convocados para el 17 de agosto y al menos siete millones de votantes acudirán a las urnas para renovar presidente, vicepresidente, 36 senadores y 130 diputados.