Rusia y Ucrania intercambiarán en los próximos días documentos en los que expondrán sus exigencias y condiciones para el fin de la guerra, confirmó este viernes el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
La medida responde a lo acordado durante el encuentro del pasado viernes en Estambul y se producirá una vez finalice el intercambio de prisioneros iniciado en las últimas horas.
“En cuanto termine el intercambio de prisioneros de guerra estaremos listos para enviar a la parte ucraniana el proyecto de documento que la parte rusa está ultimando y que establece las condiciones para un acuerdo duradero, global y a largo plazo” para restablecer la paz en la región, dijo el jefe de la diplomacia.
“Subrayamos que nuestro apego de principios a la búsqueda de vías para una solución pacífica a través del diálogo permanece invariable”, sumó Lavrov.
Ucrania, por su parte, también deberá redactar su propio texto y entregarlo al Kremlin, pese a que el presidente Volodimir Zelensky ya ha tildado el envío de Vladimir Putin de “burla”.
“Los rusos ya llevan una semana hablando del llamado memorándum con el que quieren responder a la necesidad de un alto el fuego. Esto es, sin duda, una burla al mundo entero”, comenzó apuntando en referencia a sus denuncias y las de los aliados de que, en realidad, Moscú solo busca estrategias para demorar cualquier posibilidad de alto el fuego.
“Cada día de guerra supone la pérdida de vidas. En Rusia no se tiene en cuenta a la gente”, lamentó en ese sentido e instó, por tanto, a Europa y Estados Unidos a anunciar nuevas sanciones y elevar la presión sobre el enemigo.
Mientras se siguen abordando los mecanismos para conseguir un alto el fuego, Rusia y Ucrania iniciaron en las últimas horas un intercambio de prisioneros de guerra -el más importante hasta el momento-, que fue, según Zelensky, “quizás el único resultado tangible” del encuentro en Turquía, el pasado 16 de mayo.
En total, cada bando entregará 1.000 personas, entre ellas civiles y militares, en un plazo de tres días.
En esta primera jornada, ya regresaron a sus respectivos países 540 personas, de las cuales 240 eran civiles, y se espera que se mantenga una dinámica similar el sábado y el domingo.
“Gracias a todos los que ayudan y trabajan 24/7 para traer a casa a los hombres y mujeres ucranianos. Es fundamental repatriar a todos los que permanecen en cautiverio. Estamos verificando cada apellido y cada dato de cada persona. Continuaremos nuestros esfuerzos diplomáticos para que tales medidas sean posibles», escribió Zelensky en sus redes sociales junto a una serie de imágenes que confirmaban el regreso de las personas a Ucrania.
El intercambio se dio luego de que Kiev llevara a cabo una de sus oleadas de ataques más importantes entre el 20 y el 23 de mayo, que incluyeron el lanzamiento de al menos 776 drones y misiles sobre territorio ruso, según denunció el Ministerio de Defensa de Moscú.
Una de estas maniobras se centró en una fábrica de “acumuladores y baterías” para drones, aviación, la flota y los sistemas radioelectrónicos del Ejército ruso, ubicada en la ciudad de Yelets, en Lipetsk.
Como consecuencia, el jefe del Centro contra la Desinformación del Consejo para la Seguridad Nacional de Ucrania, Andrí Kovalenko, informó que la instalación se vio obligada a suspender sus operaciones.
(Con información de AFP, EFE y Europa Press)