Taiwán acusó a China de sobornar a países en desarrollo para ganar su apoyo en la disputa por el control de la isla (REUTERS)

El ministro de Relaciones Exteriores de Taiwán, Lin Chia-lung, acusó este miércoles a China de sobornar a países en vías de desarrollo, con el objetivo de conseguir su apoyo en lo que respecta a su reclamo por el control de la isla.

En conversación con la prensa, el Ministro aseguró que el Gobierno de Xi Jinping está recurriendo al uso de dinero en efectivo y otros incentivos en países de recursos limitados para interferir en su postura sobre la autonomía de Taipéi, que data de 1949.

“China está utilizando la construcción barata” de infraestructura, como puentes, estadios y hasta líneas de ferrocarril, para acercarse a estas naciones y ganarse su confianza, comenzó diciendo el funcionario.

China utiliza la construcción barata de infraestructura, como puentes, estadios y hasta líneas de ferrocarril, para acercarse a los países y ganarse su confianza (REUTERS)

Pese a que esta técnica ha estado perdiendo su efectividad en el último tiempo, Lin advirtió que, igualmente, varios países han caído en la trampa de los diplomáticos chinos y han roto su relación con Taiwán, para acercarse más a Beijing.

Así, de momento, la isla solo cuenta con 12 aliados formales en todo el mundo, principalmente pequeñas naciones insulares en el Pacífico Sur y el Caribe, y ya no mantiene sus lazos con muchos de los países de Centroamérica, donde el avance del gigante asiático fue exponencial en los últimos años.

A su vez, en la región, diversos mandatarios estrecharon su vínculo con Xi, también a cambio de tentadores proyectos, propuestas económicas y presión diplomática.

Tal es el caso, por ejemplo, de las Islas Cook, en el Pacífico Sur, que en febrero firmaron un acuerdo mayormente secreto en el que se comprometieron a impulsar la cooperación con Beijing en asuntos como la extracción de minerales en el fondo marino.

La medida despertó polémica en Nueva Zelanda, su principal benefactor, y generó una ola de protestas en todo el país, en rechazo al avance chino sobre el territorio.

Las Islas Salomón rompieron sus lazos con Taiwán y asumieron un vínculo diplomático formal con China (REUTERS)

También, las Islas Salomón rompieron sus lazos con Taiwán y asumieron, por el contrario, un vínculo diplomático formal con el gigante asiático, a lo que le siguió la firma de otro entendimiento secreto de seguridad. Nuevamente, se presentaron objeciones al interior del arco político y la opinión pública, aunque no fueron suficientes para revertir la medida.

Más recientemente, Somalia anunció que dejará de aceptar visitantes o pasajeros taiwaneses en tránsito por su país y Sudáfrica solicitó a la isla que mude su oficina de representación no oficial de la capital, Pretoria, a Ciudad del Cabo.

Estados Unidos, en tanto, es un caso excepcional, explicó Lin, ya que a pesar de mantener relaciones no oficiales con Taiwán aún se posiciona como su principal aliado y proveedor de apoyo económico y militar.

A la luz de esta información, el Ministro apuntó que “no debemos permitir que China consiga lo que quiere utilizando la guerra legal para hacer de la cuestión de Taiwán su asunto interno”, señalando también que esta presión influye en otros aspectos clave, como lo es la exclusión de la isla de la ONU y otros foros internacionales.

Lin pidió a la comunidad internacional trabajar por evitar que China tenga éxito en su estrategia (REUTERS)

El reclamo de China por el control de Taiwán data de 1949, cuando los comunistas se asentaron en la isla después de la Revolución.

Desde entonces, Beijing ha estado intentando recuperar su dominio, incluso basándose en la resolución de Naciones Unidas de 1971 que le otorgó un asiento en el Consejo de Seguridad sin hacer mención a la representación autónoma de Taiwán, lo que -a sus ojos- sugiere que solo existe una China indivisible.

(Con información de AP)