La Patrulla de Carreteras de Tennessee (THP, por sus siglas en inglés) y agentes federales de migración del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) llevaron a cabo un operativo conjunto en barrios mayoritariamente latinos de Nashville, Tennessee, durante la madrugada y la mañana del domingo 4 de mayo, donde decenas de personas fueron detenidas.
Así fue la redada del ICE en Nashville contra migrantes
La THP informó que el operativo se centró en “áreas con un historial de accidentes de tráfico graves y presunta actividad de pandillas”. Según su comunicado, la acción resultó en “algunos” arrestos por órdenes de captura pendientes y en la recuperación de “armas y drogas ilegales”. El organismo indicó que en casos donde los conductores no portaban licencias o identificación válidas, “los agentes federales se encargaron de esas situaciones, incluyendo asuntos relacionados con la inmigración”.
La acción incluyó aproximadamente 150 controles de tráfico y resultó en la detención de entre 40 y 100 personas, según estimaciones del medio Nashville Banner, algunas de las cuales fueron trasladadas rápidamente en autobús a centros de detención de migrantes fuera del estado.
Ni la THP ni las autoridades federales proporcionaron el domingo cifras exactas sobre el número de personas detenidas específicamente por motivos migratorios. Funcionarios del ICE presentes en la oficina local de Nashville, donde fueron llevados inicialmente los detenidos, se negaron a responder preguntas detalladas sobre la coordinación del operativo en cuestión.
A lo largo del domingo, según testigos, al menos dos grupos de detenidos fueron trasladados desde la oficina de la agencia federal en autobuses chárter hacia un centro federal de detención en Louisiana. Esta situación generó preocupación por el debido proceso, ya que familias y abogados reportaron dificultades para obtener información o contactar a sus seres queridos.
Testigos mencionaron haber oído ruido de cadenas proveniente de uno de los autobuses y que a algunos familiares se les habría dicho que los detenidos no podrían contactar a nadie hasta llegar a Luisiana.
Organizaciones de derechos humanos criticaron la redada
Organizaciones locales como Remix Tennessee y la Coalición de Tennessee para los Derechos de los Inmigrantes y Refugiados (TIRRC, por sus siglas en inglés) criticaron duramente el operativo. La entidad declaró que estas acciones “destrozan familias, erosionan la confianza en la aplicación de la ley y conducen al miedo, el trauma y el aislamiento”.
Voluntarios que monitorearon los controles de tráfico durante la madrugada describieron las paradas como “rápidas”, “aleatorias o tal vez con perfiles raciales”, Además de la THP, hubo presencia de vehículos sin identificación. En ese sentido, mencionaron que se detuvo a conductores y, en al menos un caso, se pidió identificación a los pasajeros. Algunos fueron entregados al ICE por sospecha de situación migratoria irregular.
Durante el domingo, activistas se congregaron frente a la oficina local de la agencia migratoria federal e intentaron obtener información. Incluso bloquearon brevemente la salida de uno de los autobuses antes de ser apartados por agentes.
La concejal Ginny Welsch cuestionó la presencia de la Policía Metropolitana de Nashville (MNPD, por sus siglas en inglés) brindando seguridad para un proceso federal y anunció una reunión pública para discutir el tema, mencionando una ley estatal que entrará en vigor el 1° de julio y que obligará a las jurisdicciones a cooperar con el ICE.
El domingo por la noche, el alcalde de Nashville, Freddie O’Connell, negó que la MNPD hubiera participado en las acciones de detención. Sí estuvieron presentes para control de multitudes durante la protesta frente a la oficina del ICE, y luego fueron relevados por la policía estatal.
Tras la publicación inicial de la noticia en la prensa local, un portavoz del ICE proporcionó una declaración general en la mañana del lunes 5 de mayo. Mellissa Harper, directora de la Oficina de Campo de Nueva Orleans del ICE, afirmó que “proteger la seguridad de nuestras comunidades sigue siendo una prioridad” y que sus operativos “se centran específicamente en individuos que amenazan la seguridad pública o la seguridad nacional”. La declaración no ofreció detalles sobre el número, estado o paradero de los detenidos en Nashville.