Consternado se encuentra el país tras el doble crimen de un matrimonio en la pacífica comuna rural de Graneros (75 kms al norte de Santiago), cuyos cuerpos fueron hallados por la policía acribillados en su propia casa, tras recibir una llamada de auxilio de la mujer.
Se trata de Carolina Calleja Lucero (53) y Rodrigo González Aguirre (61), una conocida pareja de la zona: él era empresario agrícola y dirigente del rodeo (tradicional deporte equino) y ella se desempeñaba como docente en un colegio en la cercana comuna de Machalí.
Ambos tenían una situación acomodada, vivían solos en un parcela de grandes dimensiones y unos días antes, los vecinos dijeron haber visto un vehículo sospechoso con cuatro sujetos a bordo merodeando por el sector.
La llamada
De acuerdo a los antecedentes recabados, a las 03:25 am de este miércoles Carolina Calleja llamó a la Central de Comunicaciones (Cenco) de Carabineros en Graneros, alertando que su marido se estaba enfrentando a tiros con delincuentes mientras ella permanecía en el segundo piso.
Luego vino un silencio, y entonces Carolina bajó y encontró a su esposo muerto. Presa del pánico procedió a esconderse, pero tras otro silencio seguido de una serie de disparos, la llamada se cortó definitivamente.
La comunicación duró entre cinco y seis minutos pero debido al miedo, la mujer no logró entregar correctamente la dirección de su casa, por lo que la policía utilizó la georreferenciación de su teléfono celular y finalmente, poco más de una hora después, lograron dar con la vivienda atacada tras consultar a varios vecinos de las parcelas aledañas, quienes dijeron haber escuchado ráfagas de disparos que parecían de armas automáticas.
Una vez dentro de la casa, encontraron los dos cuerpos acribillados en la habitación matrimonial.
¿Robo con homicidio?
Por ahora, la Brigada de Homicidios, la Brigada de Robos de la PDI y la Fiscalía ECOH investiga este doble crimen que estremeció al país como un robo con homicidio, aunque aún no se ha podido establecer si realmente los asesinos sustrajeron especies o dinero.
Según explicó Germán López, prefecto de la PDI, “tenemos abiertas las hipótesis investigativas, por lo cual estamos trabajando en el lugar. Hay bastante evidencia que levantar, por lo que todavía no podemos tener una hipótesis de los hechos”,
Sin embargo, agregó, “la dinámica del delito no apunta a un robo con homicidio”.
El fiscal Carlos Fuentes señaló por su parte que la motivación del ataque “es difícil de determinarla todavía”, y aunque “hay signos de fuerza (…) no sabemos si hay especies robadas y, si hay, cuántas fueron”, por lo que no descartó que el presunto robo se haya visto frustrado por la acción del dueño de casa.
En conversación con el matinal Contigo en la Mañana, una vecina aseguró que todos los vecinos de la zona se conocen y que, a pesar de que por las noches se suelen escuchar disparos para ahuyentar a los ladrones de fruta, “anoche los disparos fueron ráfagas. No fue uno, fueron muchos al mismo tiempo. Unos 20, no sabemos lo que era, no sabemos si era una metralleta. Era un arma que disparaba mucho y muy rápido”, aseguró.
“La verdad es que estamos todos muy consternados porque no es primera vez que intentan a robar acá”, prosiguió.
Según su testimonio, los atacantes entraron a la parcela por un sitio eriazo ubicado detrás de la casa y que “hace dos días andaba un vehículo que Carabineros hizo retiro de él porque era un auto que andaba con cuatro tipos sospechosos, como paseando y mirando el sector”, remató.