A dos días de que entre en vigor la política arancelaria del 25% impuesta por el gobierno de los Estados Unidos a productos de metal y aluminio importados desde México, el Secretario de Economía (SE), Marcelo Ebrard Casaubón, viajó a Washington para conversar sobre dicho tema con las autoridades de aquel país y buscar su cancelación.
Por medio de una tarjeta informativa publicada en la página web de la Secretaría de Economía (SE) se dio a conocer que el titular de la dependencia realizó el viaje en compañía de Luis Rosendo Gutiérrez, subsecretario de Comercio Exterior, con la finalidad de “sostener reuniones con funcionarios estadounidenses a fin de conversar sobre acero y aluminio”.
Cabe recordar que, el pasado 10 de febrero de 2025, el presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva para la aplicación de aranceles del 25% a productos de aluminio y acero importados a los Estados Unidos desde cualquier país. La determinación entrará en vigor desde el próximo miércoles 12 de marzo de 2025.
Sobre el tema, el secretario de Comercio de los Estados Unidos, Howard Lutnick, declaró el pasado domingo 9 de marzo que dicha decisión de Donald Trump sigue en pie. En ese sentido, a deferencia de la pausa a los aranceles que decretó durante un mes a todo tipo de mercancías, el próximo 12 de marzo comenzará a cobrar un impuesto del 25% sobre productos de acero y aluminio que ingresen a los Estados Unidos.
Según reconoció Lutnick, la decisión de imponer aranceles a dichos productos podría encarecerlos al interior del mercado estadounidense. No obstante, esperó que también permita que los productos estadounidenses de vendan a un menor costo.
Canacero advierte que aranceles amenazan el 75% de las exportaciones de acero mexicano
Antes de la entrada en vigor de los aranceles, la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero) expresó su desacuerdo con la política del gobierno de los Estados Unidos. Al respecto, advirtieron afectaciones graves a la industria siderúrgica y a toda la cadena metalmecánica de América del Norte.
Entre los efectos negativos a los productos mexicanos, señalaron que los aranceles amenazan el 75% de las exportaciones de acero mexicano a los Estados Unidos, las cuales están valuadas en USD dos mil 100 millones. Por ello, empleos e inversiones corren riesgo.
De igual manera, reprobaron la decisión de imponer los aranceles pues la balanza comercial de acero entre México y Estados Unidos representa un superávit de 2.3 millones de toneladas a favor de los Estados Unidos.