Racing perdió en el Cilindro de Avellaneda con Huracán por 1 a 0 y encadenó su cuarta derrota consecutiva en el torneo Apertura. Un solitario gol de Eric Ramírez en el primer tiempo alcanzó para que el Globo se llevara una gran victoria de la casa de los campeones de la última Copa Sudamericana. Racing fue pura voluntad, encarnada en la figura de su mejor futbolista, Maximiliano Salas, pero le faltaron claridad, ideas y juego para generar oportunidades de gol.
Una desinteligencia defensiva -Germán Conti salió a cabecear y, por detrás suyo, Ramírez se coló entre Nazareno Colombo y Gabriel Martirena para definir- condenó a la Academia a la derrota. Ramírez se topó con la pelota entre los dos defensores locales y aprovechó para puntearla ante la salida de Gabriel Arias. El gol fue confirmado por el VAR, una vez que fueron trazadas las líneas y se comprobó que el delantero quemero estaba habilitado. El gol enardeció a Gustavo Costas, que le dio un puñetazo a la estructura que cubre el banco de suplentes.
UNA PERLA EN EL CILINDRO: Ramírez puso el 1-0 de Huracán ante Racing.
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Unos minutos antes, Germán Conti, defensor de Racing, había dejado corta una pelota que a punto estuvo de convertirse en la apertura del marcador. Sin embargo, Leonardo Gil falló en la conducción de la jugada y el avance de Huracán se diluyó.
¿QUÉ TE PARECE? Las líneas del VAR en el gol de Ramírez para el 1-0 de Huracán a Racing.
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Para este partido, el director técnico Gustavo Costas decidió dosificar energías de los habitualmente titulares de Racing y apeló a una defensa integrada por Santiago Quirós, Nazareno Colombo y Conti. Tampoco juega el goleador Adrián “Maravilla” Martínez, que asiste al encuentro en un palco junto a, entre otros, Gabriel Rojas.
Por el lado del Globo, el triunfo parcial les sirve a los dirigidos por Frank Darío Kudelka para trepar al quinto puesto de la zona A. Con 18 puntos, alcanzan la línea de Estudiantes de La Plata y Tigre.
En el segundo tiempo, Racing intentó plantarse en campo contrario para buscar el gol del empate. Sin embargo, su juego nunca fluyó. Maximiliano Salas fue su delantero más peligroso, aunque se tuvo que autogestionar las jugadas. Nunca lo habilitaron mano a mano con el seguro arquero del Globo, Hernán Galíndez. Lo del ex All Boys fue siempre ir al choque y estar obligado a sacarse dos o tres rivales de encima para continuar el ataque.
La Academia tuvo el ímpetu característico de la gestión Costas, pero le faltó juego. A los 25 minutos del segundo tiempo, la jugada más clara tuvo -para variar- a Salas como protagonista principal. El delantero hizo toda la jugada por la banda derecha y encontró un resquicio para tirar un centro al corazón del área. Por allí andaba Adrián “Rocky” Balboa, listo para definir. Pero le erró a la pelota y su remate salió desviado. Esa acción, la mejor de todas las generadas en ataque por la Academia, resultó una muestra gratis de la anemia ofensiva de Racing en la noche del sábado.
A los 35 minutos de la segunda parte, Huracán pareció rematar la historia con un contragolpe furibundo, conducido por Mazzanti, quien gambeteó al arquero Arias, tiró el centro, Gil habilitó a Leonardo Sequeira y el recién ingresado aprovechó para anotar con un remate de derecha. Sin embargo, el VAR anuló la jugada -y el gol- porque la pelota se había ido de la cancha antes del centro de Walter Mazzanti. El Globo, entonces, volvía a ganar 1-0 y Racing seguía en partido. Tenía una vida más.
Sin embargo, la voluntad de Salas no le alcanzó a la Academia para, siquiera, igualar el maracador. Terminó perdiendo con el Globo, que aprovechó el envión del clásico ante San Lorenzo para imponerse en la casa del campeón de la Copa Sudamericana y redondear un gran trabajo defensivo. Nunca pudo -ni supo- Racing poner en problemas al equipo dirigido por Frank Darío Kudelka. Sobre el final, Gonzalo Costas -hijo de Gustavo- se enojó por el festejo del entrenador del Globo. “Hay que saber ganar”, le endilgaron al cuerpo técnico visitante.
Lo mejor de la victoria de Huracán ante Racing
Tras la derrota habló Gabriel Arias: “Nos está costando esta clase de partidos. Hay que trabajar más, volver a tener esa energía que tuvimos durante varias facetas. Agachar la cabeza y trabajar. Hay que ganar como sea el partido muy duro que se viene. Tenemos que tener una gran semana para el domingo ganar el partido. Cada partido es el puntapié. Hay que convencerse de que esto es ganar, ganar y ganar. Trabajar la intensidad. Ellos mantuvieron un orden que no pudimos encontrar la vuelta. Hay que volver a las bases. Tenemos que hacer nuestra parte y ganar el partido (del domingo)”, dijo el arquero en ESPN.