La Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (Muface) ha certificado que tanto SegurCaixa Adeslas como Asisa continuarán aportando sus servicios a los trabajadores públicos. Después de meses de incertidumbre, ambas aseguradoras se han presentado a la última licitación del concierto sanitario que asiste a más de un millón de funcionarios.
Han hecho falta tres ofertas por parte del Gobierno, cada cual más alta que la anterior, para poder dar continuidad a la mutualidad que ofrece sanidad privada a los funcionarios. El aumento del presupuesto a 4.808,5 millones de euros, 1.276,5 millones de euros más que el concierto vigente, ha sido suficiente para contentar a las aseguradoras, que señalaban Muface como un modelo deficiente que les causaba pérdidas millonarias cada año. Esta última modificación, notificada el 28 de enero de 2025, supuso incrementar las primas un 41,2%, por encima de lo solicitado inicialmente por las tres aseguradoras que se mantenían en Muface.
Agotado el plazo para candidaturas, tan solo Adeslas y Asisa han decidido continuar en el sistema, mientras que DKV ha mantenido su rechazo pese al “gran esfuerzo realizado por la Administración”, según expresó la compañía en un comunicado. Si bien AXA y Mapfre mostraron su interés, finalmente ninguna se unió al concierto.
Dos aseguradoras se reparten un millón de funcionarios
Del más de millón y medio de beneficiarios de Muface, entre funcionarios y familiares, 1.080.394 han elegido ser atendidos en la sanidad privada, frente a los 457.307 que mantienen su asistencia sanitaria en el Sistema Nacional de Salud, según los datos de la mutualidad relativos a 2023.
El actual concierto sanitario, relativo a los años 2022-2024, se mantendrá vigente mientras dure la prórroga forzosa solicitada por el Gobierno central y hasta que se formalice el nuevo contrato, según han comunicado desde Muface. El siguiente concierto entrará en vigor el próximo 1 de abril de 2025 y se mantendrá hasta el 31 de diciembre de 2027, momento en el que habrá que trabajar por una nueva licitación.
Para este nuevo periodo, más de 200.000 funcionarios empezarán huérfanos, pues hasta ahora eran atendidos por DKV. Desde la mutualidad, han aclarado que este grupo de beneficiarios tendrá un plazo para elegir otra de las entidades concertadas que resulten adjudicatarias del concierto, o bien optar por el servicio público de salud.
Así, en las próximas semanas, se les dará la opción de unirse a la cartera de Adeslas, mayoritaria en el concierto sanitario con 508.703 mutualistas; o a Asisa, que ya se hace cargo de 363.946 beneficiarios. Por su parte, los 7.969 funcionarios españoles en el extranjero, que hasta ahora trabajaban con DKV Internacional, serán acogidos por la entidad Nueva Mutua Sanitaria, seleccionada en el Concierto de Asistencia Sanitaria en el Exterior, con un presupuesto de 77,7 millones de euros. Si bien el contrato aún no está formalizado, la Mesa de contratación de MUFACE ya ha enviado a la unidad técnica la documentación exigida a Nueva Mutua Sanitaria como paso previo a la adjudicación definitiva.