El Proyecto Potter Valley, una de las infraestructuras hídricas más importantes del norte de California, enfrenta un futuro incierto. Se trata del sistema de represas que garantiza el suministro de agua potable y riego para los condados de Mendocino, Sonoma y Lake y que está en riesgo de desaparecer. La empresa Pacific Gas & Electric (PG&E, por sus siglas en inglés) anunció su intención de retirarse.
Qué es el Proyecto Pottery Valley
Se trata de un sistema de transferencia de agua y generación hidroeléctrica construido en 1908. Su función principal es desviar agua del río Eel al río Russian a través de un túnel de excavado en la montaña cercana a Potter Valley. Este sistema incluye dos represas: Scott, que forma el lago Pillsbury, y Cape Horn, Además, cuenta con una central hidroeléctrica.
La infraestructura transformó la cuenca del río Russian al asegurar un suministro de agua estable durante todo el año. Antes de su construcción, ambos ríos solían secarse en verano, situación que afectaba gravemente a las comunidades y la agricultura. Desde la creación del lago Pillsbury en 1922, se pudo almacenar agua suficiente para garantizar el abastecimiento constante.
Según destaca el sitio SFgate, en la actualidad unas 600 mil personas en los condados de Sonoma y Marin dependen del agua que proporciona el sistema.
Por qué podría desaparecer el sistema y cuál sería su impacto
La empresa PG&E habría tomado la decisión de retirarse del proyecto por razones económicas y de seguridad. Desde su perspectiva, el sistema ya no es rentable y su infraestructura se encuentra en estado crítico. La presa Scott, con más de un siglo de antigüedad, mostró su vulnerabilidad ante posibles sismos, lo que llevó a la compañía a reducir los niveles de agua del lago Pillsbury para minimizar riesgos.
Si el proyecto se desmantela, podría reducir significativamente el suministro de agua del río Russian, una situación que afectaría a los agricultores y a la industria vitivinícola en la región.
Al respecto, un análisis de la Universidad de California en Davis advirtió que la eliminación de la presa disminuiría la capacidad de almacenamiento del lago Mendocino y pondría en peligro el riego de cultivos y el abastecimiento de agua potable en varias comunidades.
Para algunas agrupaciones conservacionistas, el retiro de PG&E representa una oportunidad histórica para restaurar el hábitat natural del río Eel, ya que la presa Scott desde hace décadas impide el acceso del salmón a sus áreas de reproducción naturales. Un estudio de la Universidad Estatal de Humboldt determinó que la eliminación de la presa permitiría la recuperación de 93 kilómetros de hábitat para el salmón real y la trucha arcoíris.
Reacciones al posible cierre de la reserva en California
Mientras grupos ecologistas consideran que esto permitiría devolver el río Eel a su estado natural, propietarios de viviendas y agricultores advierten sobre las consecuencias de drenar el lago Pillsbury.
Los residentes sostienen que la eliminación de la represa afectará la vida silvestre, la disponibilidad de agua y la protección contra incendios.
Aaron Sykes, ingeniero del Distrito de Protección contra Incendios del Lago Pillsbury, explicó al medio citado que el embalse tuvo un rol clave en el combate de incendios forestales en la región. Durante el incendio August Complex en 2020, el agua del lago Pillsbury fue fundamental para las operaciones de contención de las llamas.
Por su parte, la Junta de Supervisores del Condado de Lake manifestó su preocupación y solicitó la intervención del gobierno federal para evitar el desmantelamiento del proyecto. En una carta dirigida a la administración Donald Trump, los integrantes calificaron la eliminación del lago Pillsbury como una “apuesta costosa e irresponsable” que podría comprometer el suministro de agua en la región.