Miles de personas que se dirigían al festival hindú de Kumbh Mela, una masiva peregrinación en el norte de la India, quedaron atrapadas este lunes en atascos de tráfico que se reportaron incluso a más de 200 kilómetros de distancia de la sede del festival, con algunos conductores reportando que necesitaron de hasta 12 horas para cubrir 50 kilómetros.
Imágenes difundidas por medios indios muestran las largas caravanas de coches, completamente detenidos, en varias de las autopistas que conectan con Prayagraj, mientras los usuarios reportaban en redes sociales retenciones de varias horas de duración.
“Me quedé atrapado en un atasco de tráfico desde las 02:00 a las 06:00 de la mañana”, dijo en X uno de los supuestos afectados, compartiendo un video desde un peaje en la localidad de Kokhraj -a más de 40 kilómetros de Prayagraj-.
Just 5 k.m. away from this toll at Kokhraj UP, stuck in traffic jam from 2 to 6 a.m. today.
How the express ways and tolls are helping Indian public…..fail to understand. Taffic did not move an inch for 2 hrs. Made calls at 112 and it's moving at 5 km per hr pic.twitter.com/qfz09A98AW— Sandip Kaur (@92sandip11) February 9, 2025
El encargado de la estación de tráfico de la localidad de Katni -a más de 200 kilómetros del Kumbh Mela-, Rahul Pandey, dijo a la agencia india IANS que el trafico estuvo detenido “durante 48 horas” en una de las rutas, lo que provocó un atasco de diez kilómetros.
No obstante, Pandey agregó que el movimiento de vehículos “se está despejando gradualmente”.
Según la plataforma Google Maps, que monitoriza en directo el tráfico, el acceso a las instalaciones del Kumbh Mela, en la confluencia de los ríos sagrados Ganges, Yamuna, y el mitológico Sarasvati, se demoraba más de dos horas y media a las 14:30 horas (9:00 GMT).
Sin embargo, el canal de televisión NDTV ha reportado retenciones de hasta 300 kilómetros en las diferentes entradas a Prayagraj, causando retrasos de hasta dos días.
“Se necesitan entre 10 a 12 horas para cubrir 50 kilómetros”, dijo al canal uno de los peregrinos.
El parlamentario Akhilesh Yadav, opositor al jefe de Gobierno de Uttar Pradesh, el nacionalista hindú Yogi Adityanath, propuso exenciones para los controles de peaje durante el Kumbh Mela, que se celebra hasta el próximo 26 de febrero.
El mayor festival religioso del mundo
El Kumbh Mela, que comenzó el pasado 13 de enero y concluirá el 26 de febrero, es la mayor reunión humana del planeta. Según las autoridades regionales, se espera que por él pasen 450 millones de personas, más que la población de Estados Unidos.
Esta cifra es unas 200 veces superior a los 2 millones de peregrinos que llegaron a las ciudades santas musulmanas de La Meca y Medina, en Arabia Saudita, para la peregrinación anual del Hajj el año pasado.
El masivo Kumbh Mela se celebra en ciclos de doce años en cuatro ciudades diferentes de la India, donde según la mitología hindú, cayó una gota de néctar de la inmortalidad de una vasija disputada por dioses y demonios.
El festival supone para las autoridades indias una gran prueba de exhibición de la religión hindú, el turismo y la gestión de multitudes.
Un vasto terreno a lo largo de las orillas de los ríos se ha convertido en una extensa ciudad de tiendas de campaña equipada con más de 3.000 cocinas y 150.000 baños. Dividida en 25 secciones y con una extensión de 40 kilómetros cuadrados, la ciudad de tiendas cuenta también con viviendas, carreteras, electricidad y agua, torres de comunicación y 11 hospitales. En las paredes hay pintados murales que representan historias de las escrituras hindúes.
Los ferrocarriles indios, además de los trenes regulares, ponen en funcionamiento más de 90 trenes especiales en casi 3.300 viajes durante el festival para transportar a los devotos.
Alrededor de 50.000 efectivos de seguridad -un aumento del 50% respecto a 2019- también están estacionados en la ciudad para mantener la ley y el orden y gestionar las multitudes. Más de 2.500 cámaras, algunas impulsadas por IA, enviarán información sobre el movimiento y la densidad de las multitudes a cuatro salas de control centrales, donde los funcionarios podrán desplegar rápidamente personal para evitar estampidas.
(Con información de EFE y AP)