Las canas suelen aparecer con el paso de los años pero no existe una edad determinada en la que los pelos empiecen a perder su pigmento. Ha una gran cantidad de hombres y mujeres que deciden cubrirlas por medio de la implementación de tintas, uno de los métodos más populares dentro de la industria de la belleza, que promete aplazar temporalmente la vejez.
Pese a esto, el simple acto de teñirse el cabello esconde razones interesantes con relación a la idea de la identidad y la percepción del tiempo, ya que en ocasiones quienes se someten a estos procedimientos buscan reafirmar su autonomía.
En cuanto a la propagación de las canas, hay quienes optan por llevarlas con orgullo, mientras que otras personas prefieren cubrirlas para resistirse de manera inconsciente a las expectativas impuestas por la sociedad sobre el perfil que deben tener las personas mayores.
Además, es considerado como un mecanismo a través del cual algunos adultos logran sentirse más jóvenes o buscan acercarse lo que más puedan a la imagen que tienen de sí mismo.
Sin embargo, esto no solo es parte del proceso del envejecimiento, debido a que la genética de los seres humanos también desempeña un papel importante en la pérdida de pigmentación del cabello.
De acuerdo con National Geographic la raza y el origen étnico son dos factores que están altamente relacionados con la edad en la que el pelo envejece, por lo que es común que las personas de tez blanca encarezcan una década antes que las de piel negra.
Conforme con esto, un estudio publicado en la revista Journal of Women Aging reveló que las mujeres experimentan un conflicto entre la vinculación de sabiduría con las canas y el deseo de explorar su verdadera identidad.
Pese a esto, tenga en cuenta que la decisión de teñirse o no las canas es completamente individual y personal, debido a que no hay una razón correcta o incorrecta para no intentarlo al menos una vez, a menos que los componentes de esta sustancia comprometan su salud.