El 9 de septiembre de 2024, dos facciones del Cártel de Sinaloa iniciaron una lucha interna que se mantiene hasta la fecha en esa entidad: Los Chapitos y La Mayiza. Desde ese día y hasta el 27 de noviembre del mismo año, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) les ha asegurado armamento fabricado en 12 países.
No obstante, la mayoría de este material bélico asegurado proviene de Estados Unidos. En este periodo, la Sedena decomisó 703 armas al crimen organizado en el estado: 103 cortas y 600 largas. De estas, sólo se pudo identificar la procedencia de 129. El resto de las armas tenían los números de serie borrados o intervenidos, piezas combinadas o algún otro detalle que evitó que pudiera rastrearse su procedencia.
De acuerdo con el diario El Universal, en una investigación de Silber Meza -quien cita un documento de la Sedena obtenido por consulta directa-, 78 de estas armas se fabricaron en Estados Unidos (60.5%); 13 en Austria (10%); 13 en Rumanía (10%); ocho en China (6.2%); seis en Serbia (4.6%); tres en Alemania (2.3%); dos en Italia (1.5%); dos en Bélgica (1.5%) y un arma procedente, respectivamente (0.78%), de: España, Brasil, Polonia y República Checa.
La mayoría de estas armas, 85 de 129, fueron aseguradas en Culiacán, la capital del estado, donde se ha centrado el grueso de los ataques y enfrentamientos.
Desde el inicio del conflicto a enero de 2025, en Sinaloa se registraron 795 homicidios dolosos -159 por mes en promedio-, mientras que de enero a agosto de 2024 las autoridades reconocieron 42 asesinatos mensuales, un crecimiento exponencial de casi 300%.
Despliegue de Guardia Nacional
El martes de esta semana inició el despliegue de 10 mil elementos de la Guardia Nacional (GN) hacia la frontera norte, con el objetivo de reforzar la seguridad, evitar el tráfico de fentanilo e inhibir la migración ilegal, acuerdos que establecieron los gobiernos de México y Estados Unidos para evitar diferencias comerciales entre ambos países.
Por su parte, el gobierno estadounidense se comprometió a investigar e inhibir el ingreso de armas a México desde ese país.
“El gobierno estadounidense se comprometió a investigar sobre el ingreso de armas de Estados Unidos a México. ¿Cómo es posible que en nuestro país haya lanzagranadas que se han incautado a grupos delictivos. Este tipo de armas es de alto poder y de uso exclusivo del ejército en Estados Unidos. Tiene que haber una investigación y colaboración para que disminuya el tráfico de armas”, explicó la presidenta Claudia Sheinbaum en su conferencia de prensa de este martes.