DAVOS.- El presidente Javier Milei dio un discurso provocador esta mañana en el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, en el que apuntó contra “la hegemonía absoluta a nivel global de la izquierda woke”, a la que categorizó como un “virus mental” y reivindicó el tipo de liderazgo que comparte con líderes mundiales y figuras de la derecha global, a quienes considera “compañeros en esa pelea por las ideas de la libertad”.

“En ese discurso [en Davos, hace un años], parado frente a ustedes, les dije que era el comienzo de una nueva Argentina, que la Argentina había estado infectada de socialismo por demasiado tiempo y que con nosotros iba a volver a abrazar la libertad; un modelo que nosotros resumimos en la defensa de la vida, la libertad y la propiedad privada”, resaltó el presidente.

Y agregó que en los meses siguientes encontró “compañeros en esa pelea por las ideas de la libertad”. Habló del “maravilloso” Elon Musk, la “feroz dama italiana” y “amiga”, Giorgia Meloni; de los presidentes Donald Trump (Estados Unidos) y Nayib Bukele (El Salvador), y los primeros ministros Viktor Orban (Hungría) y Benjamín Netanyahu (Israel).

A continuación, las figuras con las que se alinea Milei y que mencionó en Davos:

Donald Trump

Donald Trump regresó esta semana a la Casa Blanca como el 47° presidente de Estados Unidos después de vencer a la demócrata Kamala Harris en las elecciones de noviembre, en las que también consiguió una mayoría republicana en el Congreso. El mandatario tomó posesión el pasado lunes en una ceremonia marcada por varios anuncios con los que afirmó que abriría una “nueva era de oro para Estados Unidos”. Trump, que se convirtió en el primer presidente con una condena judicial, firmó un número récord de órdenes ejecutivas en su primer día de gobierno para revertir medidas del gobierno de Joe Biden en materia de inmigración, clima, salud, energía, aranceles, entre otras. Los drásticos cambios despertaron fuertes reacciones ya que remodelan las instituciones estadounidenses y sacuden el orden mundial. Entre ellas, prometió una oleada de “deportaciones masivas”; “expandir” el territorio estadounidense con la incorporación de Groenlandia y el Canal de Panamá; imponer aranceles a China, México, Canadá y la Unión Europea; retirarse tanto del Acuerdo de París como de la Organización Mundial de la Salud; indultar a los condenados por el violento ataque del 6 de enero contra el Capitolio; anular decretos sobre igualdad de género, racial y religiosa; además de profundos recortes en el Estado para reducir la burocracia.

Milei mantiene gran afinidad con Trump, al punto que lo considera un amigo. Fue uno de los pocos jefes de Estado invitado a la asunción y estuvo sentado en un sitio privilegiado en la Rotonda del Capitolio, junto a la familia del magnate, aliados republicanos y expresidentes. Trump y Milei comparten la misma filosofía disruptiva al ser dos “outsiders” que se unen contra el “establishment” con la misma estrategia de dividir aguas entre leales y enemigos tanto en su retórica como en las redes sociales. Milei espera que este alineamiento global se traduzca en beneficios concretos para la Argentina, en particular para el acuerdo con el FMI y un posible tratado de libre comercio bilateral.

Nayib Bukele

Nayib Bukele es el presidente de El Salvador desde 2019, cuando asumió como el mandatario más joven de la historia del pequeño país centroamericano, en ese momento golpeado por una gravísima crisis de seguridad y una clase política salpicada por casos de corrupción. Bukele llegó el poder como un outsider a pesar de que había comenzado su carrera política como alcalde de un pueblo de la mano del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), una exguerrilla devenida en partido de izquierda tras el fin de la guerra civil. Sin embargo, su emblemática política de mano dura contra las pandillas, que logró reducir radicalmente la cantidad de homicidios en el país que años atrás había sido uno de los más violentos del mundo, lo llevó a ser el mandatario más popular de la región y un faro para la derecha latinoamericana. Su estrategia de seguridad también tiene un lado oscuro, con crecientes denuncias de organismos de derechos humanos por detenciones arbitrarias, desapariciones y torturas.

Bukele y Milei tienen un fuerte vínculo que se ratificó con dos viajes: el presidente argentino viajó el 1° de junio pasado a la asunción del segundo mandato de Bukele, un triunfo que logró por un amplio margen, pese a los cuestionamientos a una reelección consecutiva que estaba prohibida por la Constitución. El presidente salvadoreño devolvió la gentileza meses después, en un viaje a Buenos Aires en el que además se fortalecieron los vínculos de cooperación en materia de seguridad.

Benjamin Netanyahu

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, volvió al poder en Israel a fines de 2022 con una coalición con la ultraderecha, una formación mucho más conservadora que las que lo acompañaron en sus períodos anteriores (entre 1996 y 1999, y entre 2009 y 2021). En este mandato, se enfrentó a una de las mayores fallas de seguridad de la historia de Israel cuando el 7 de octubre de 2023, terroristas de Hamas asaltaron el sur de su territorio, dejaron 1200 muertos y tomaron 250 rehenes. Como respuesta, Israel lanzó una ofensiva contra Hamas en la Franja de Gaza, que dejó hasta el momento más de 47.000 muertos, y despertó acusaciones de genocidio.

El principal aliado de Israel en el mundo es Estados Unidos, un vínculo que se fortalecerá con el regreso de Trump a la Casa Blanca. Este miércoles, de hecho, Netanyahu habló con el flamante secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, quien le reiteró el “firme apoyo” de Washington y le dijo que seguirá trabajando “incansablemente” para ayudar a liberar a los rehenes que quedan en Gaza. El domingo entró en vigor un alto el fuego -que tanto Trump como Joe Biden reivindicaron como logros propios- que propicia la liberación de rehenes israelíes en Gaza y de prisioneros palestinos en Israel. Sin embargo, la asunción de Trump deja a Netanyahu frente a un dilema: entre un presidente estadounidense que promete la paz y sus aliados de extrema derecha que quieren que se reanude la guerra.

Milei dejó en claro desde su campaña presidencial que Israel sería su principal aliado internacional junto con Estados Unidos, e incluso prometió que mudaría la embajada argentina a Jerusalén, igual que había hecho Trump, algo que todavía no se concretó. El primer viaje internacional de Milei como presidente fue a Israel, en febrero del año pasado, cuando Netanyahu lo recibió como “un gran amigo del Estado judío”. Desde entonces, han compartido expresiones mutuas de apoyo y solidaridad, y Netanyahu le agradeció públicamente al líder libertario cuando declaró a Hamas como organización terrorista a mediados del año pasado.

Viktor Orban

El ultraconservador primer ministro húngaro Viktor Orban es el mandatario de la Unión Europea (UE) UE que más lleva en el poder -este año cumplirá 15 años-. Desde que se dio a conocer en 1989, con 26 años, gracias a sus discursos desafiantes contra el régimen comunista en Budapest, fundó su partido Alianza de Jóvenes Demócratas (Fidesz) para encarar las aspiraciones de Hungría a liberarse del totalitarismo y a adoptar los valores occidentales. Pero su largo camino lo llevó a la ultraderecha y precisamente a convertirse en un detractor de los valores que pregona la UE. Actualmente, denuncia la “decadencia de Occidente” frente al “lobby LGTB” y la llegada de migrantes de África y de Medio Oriente, a quienes define a menudo como potenciales “terroristas”. Cercano a los presidentes ruso, Vladimir Putin, y chino, Xi Jinping, Orban -considerado un líder autoritario tras restaurar varias veces la Constitución a su favor- se niega a apoyar militarmente a Ucrania, que desde febrero de 2022 enfrenta una invasión rusa. Asumió en junio pasado la presidencia semestral de la Unión Europea, más aislado que nunca por su posición cercana a Rusia en la guerra de Ucrania y por sus ataques contra “la élite tecnócrata de Bruselas”.

Desde el triunfo de Milei en la Argentina, Orban ha respaldado reiteradas veces al presidente, a quien considera la “esperanza para América Latina” y “un verdadero patriota”. Estuvo presente en la investidura del mandatario argentino en Buenos Aires, donde se cruzó con su par ucraniano Volodimir Zelensky, así como participó de la de otro aliado de Milei, el expresidente brasileño Jair Bolsonaro. En sus reuniones bilaterales, los mandatarios acordaron trabajar en la cooperación política “en interés de una lucha más eficaz contra las fuerzas izquierdistas internacionales”.

Giorgia Meloni

Giorgia Meloni, la primera mujer en ocupar el cargo de primera ministra en Italia, gobierna desde 2022 con Hermanos de Italia, su partido de derecha nacionalista que pasó de ser una fuerza marginal a convertirse en el eje del poder. Desde su asunción, enfrenta el desafío de combinar su agenda soberanista con las exigencias de la Unión Europea, mientras lidia con temas como la crisis migratoria y la recuperación económica. Aunque sigue siendo popular entre sus votantes, las tensiones por algunas de sus decisiones, como el endurecimiento de las políticas migratorias y las reformas judiciales, han generado críticas dentro y fuera de Italia.

Meloni y Milei desarrollaron una de las relaciones más cercanas entre jefes de Estado. Ambos líderes comparten una visión común sobre la defensa de la soberanía nacional y el rechazo a la “ideología woke”. El año pasado se reunieron cinco veces, en encuentros marcados por una conexión que excedió lo político, evidenciada en gestos de cercanía como abrazos y risas. En noviembre, durante su visita a la Argentina, Meloni calificó a Milei como un “aliado estratégico” en la lucha por la libertad, y juntos propusieron públicamente una “alianza de naciones libres contra la tiranía”. Su último encuentro tuvo lugar el lunes, en la ceremonia de asunción de Donald Trump en Washington, donde fueron de los pocos jefes de Estado invitados. Ambos a su vez mantienen una muy buena relación con el magnate Elon Musk.

Elon Musk

Elon Musk, CEO de Tesla, SpaceX y propietario de X, es la persona más rica del mundo, con una fortuna estimada en 440 mil millones de dólares, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg. Su influencia no se limita al ámbito empresarial, ya que también mantiene una fuerte cercanía con Trump: aportó más de 250 millones de dólares a su campaña presidencial de 2024 y, tras la victoria del republicano, Musk estará a cargo del recién creado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), una entidad destinada a modernizar la tecnología gubernamental y reducir gastos innecesarios.

Musk y Milei tienen una relación cercana basada en una visión compartida sobre la innovación y el rechazo a la “ideología woke”. Durante su discurso en el Foro Económico Mundial, Milei destacó a Musk como un “pionero” y lo defendió tras las críticas por el gesto que hizo en la asunción de Trump, que algunos interpretaron como nazi. “Mi querido amigo que injustamente fue vilipendiado por el wokismo en las últimas horas por un inocente gesto que lo único que representa es su entusiasmo y gratitud por la gente”, afirmó Milei, en línea con una fuerte defensa que había hecho antes en X. Días antes, Musk expresó públicamente su admiración por el presidente argentino y escribió en un tuit: “Amo a Javier Milei”.

Agencias ANSA, AFP y Reuters