La incidencia de la endoftalmitis es muy baja y se ha reducido a lo largo de las últimas décadas (Orami)

En la primera semana de enero, el Seguro Social de Salud (EsSalud) se encontraba en medio de un escándalo tras la denuncia de negligencia médica en contra de una de sus especialistas, quien estaría involucrada en la pérdida irreversible de la vista de cinco pacientes que habían sido sometidos a cirugías de cataratas. El incidente ocurrió en la ciudad de Iquitos, en la región Loreto, donde al menos tres de los pacientes tuvieron que ser sometidos a la extirpación de uno de sus ojos.

Esta drástica medida fue debido a que los pacientes habían sido víctimas de infecciones bacterianas que podrían alcanzar el cerebro si es que no se realizaba la extirpación ocular.

Lo más probable es que la causa de esta complicación se deba a la endoftalmitis, una infección grave que puede ocurrir después de una cirugía de cataratas.

¿Qué es la endoftalmitis?

La principal causa de endoftalmitis es la cirugía ocular, y de esta, el 90% es debida a cirugía de la catarata (Cuartoscuro)

De acuerdo al Dr. Juan Carlos Corbera, médico oftalmólogo de Oftálmica Clínica de la Visión, la endoftalmitis infecciosa es una de las complicaciones más graves y temidas por los oftalmólogos. Esta infección ocurre debido a la entrada de microorganismos al interior del globo ocular, ya por una herida ocular abierta (traumática o quirúrgica) o, más infrecuentemente, por diseminación sanguínea en una septicemia.

La incidencia de esta condición es muy baja y se ha reducido a lo largo de las últimas décadas. La principal causa de endoftalmitis es la cirugía ocular, y de esta, el 90% es debida a cirugía de las cataratas. La segunda causa más frecuente es el trauma ocular abierto y la tercera causa es la endoftalmitis endógena, producida por un germen ya presente dentro del organismo. Esta última es menos frecuente y supone entre un 2 % y un 8 % de los casos totales de endoftalmitis.

Síntomas de la endoftalmitis

La endoftalmitis aguda postquirúrgica aparece durante las 6 primeras semanas después de la cirugía. Puede iniciarse desde el primer día de postoperatorio y hay que tener en cuenta que la precocidad en la presencia de la infección, es decir, cuando aparece en los dos primeros días, hace sospechar gérmenes más agresivos”, advierte el Dr. Corbera.

El ojo rojo con inflamación es un síntoma de la endoftalmitis (Cuartoscuro)

Los síntomas de la endoftalmitis son los siguientes:

  • Disminución de la visión en más del 90% de los casos
  • Dolor ocular
  • Ojo rojo con inflamación y edema conjuntival
  • Opacificación de la cámara anterior ocular con células, hipopion o fibrina
  • Secreción conjuntival (legañas)
  • Edema de párpados

Factores de riesgo de la endoftalmitis

Según el especialista de Oftálmica Clínica de la Visión, hay enfermedades subyacentes que predisponen a una endoftalmitis como la diabetes, la inmunosupresión, la insuficiencia renal en diálisis, la enfermedad cardíaca y las neoplasias.

Debido a que predisponen a la presencia de una flora bacteriana más virulenta, la presencia de blefaritis, alergias crónicas, conjuntivitis a repetición y obstrucción de vía lacrimal también aumentan el riesgo de sufrir esta grave infección.

¿Cómo prevenir la endoftalmitis?

Para prevenir la endoftalmitis hay que detectar si se padece conjuntivitis a repetición (Clínica Internacional)

El Dr. Corbera indica que cuando se trata de prevenir la endoftalmitis “el objetivo es reducir la carga bacteriana en la zona a operar y así disminuir el riesgo de infección”, para lo cual hay que hacer lo siguiente:

  • Detectar factores de riesgo como blefaritis, alergias crónicas, conjuntivitis a repetición u obstrucción de vía lacrimal.
  • Realizar una correcta preparación del campo quirúrgico, aislando adecuadamente las pestañas y el borde palpebral.
  • La correcta limpieza y esterilización del instrumental es imprescindible, tanto para evitar infecciones como reacciones inflamatorias postoperatorias estériles (como el síndrome tóxico de segmento anterior).
  • La medida universalmente aceptada para la antisepsia previa a la cirugía ocular es el empleo de solución acuosa de povidona yodada al 5% en el saco conjuntival y al 5 o 10 % en la piel periocular, dejándola actuar un mínimo de 3 minutos.
  • Uso de antibiótico intraocular al finalizar la cirugía (moxifloxacino intracamerular).
  • Correcto uso de gotas antibióticas y desinflamantes post cirugía.
  • Adecuado aseo de manos antes de aplicar las gotas.