El presidente Donald Trump firmó una serie de órdenes ejecutivas que incluyen una medida para congelar la contratación de trabajadores federales y otra que exige el regreso al trabajo presencial a tiempo completo para los empleados del gobierno. Estas disposiciones buscan reformar profundamente el funcionamiento del gobierno federal y cumplir con las promesas de su campaña.
Por qué deberán volver a la oficina los cinco días de la semana
Con estas órdenes, Trump da un paso concreto hacia su objetivo de transformar la estructura del gobierno federal, que emplea a cientos de miles de personas, especialmente en Washington D.C. Además, emitió una orden que restablece el controvertido Anexo F, una política que elimina ciertas protecciones laborales para un grupo de funcionarios, permitiendo cambios significativos en la estructura de empleo gubernamental.
El panorama general
Durante su campaña, Trump hizo énfasis en reducir la influencia del gobierno federal y controlar el gasto público. Como parte de esta estrategia, ha creado el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés), una nueva entidad dirigida por Elon Musk, con el objetivo de recortar costos y optimizar procesos. La retórica también se enfocó en despedir a “burócratas rebeldes y políticos de carrera” para priorizar la eficiencia.
En un artículo de opinión publicado en el The Wall Street Journal, Musk y Vivek Ramaswamy, codirector de DOGE, defendieron la medida diciendo que exigir trabajo presencial cinco días a la semana podría desencadenar renuncias masivas, algo que consideran positivo para alcanzar sus metas de reestructuración.
Situación actual
La orden de congelación de contrataciones afecta a todos los puestos del poder ejecutivo, con excepción de los militares y ciertas categorías relacionadas con la seguridad nacional, seguridad pública y control de inmigración. Ninguna vacante existente al mediodía del 20 de enero podrá ser ocupada, y está prohibido crear nuevos puestos.
Además, Trump instó a los jefes de departamentos y agencias a eliminar los acuerdos de trabajo remoto “lo antes posible”, reafirmando su postura sobre la necesidad de una fuerza laboral presencial. La medida busca garantizar una mayor supervisión y eficiencia en las operaciones gubernamentales, recoge Axios.
Según la orden ejecutiva, la congelación de contrataciones no afectará la prestación de beneficios como Seguro Social, Medicare o los programas para veteranos. Sin embargo, este memorando tendrá una duración inicial de 90 días, tiempo durante el cual DOGE y la Oficina de Administración y Presupuesto (OMB) deberán presentar un plan para reducir la fuerza laboral gubernamental.
Una excepción notable es el Servicio de Impuestos Internos (IRS), donde la congelación permanecerá en vigor hasta que el Secretario del Tesoro determine que levantarla es de interés nacional.
Impulso contra la diversidad
En paralelo, Trump firmó otra orden que revierte varias iniciativas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) implementadas por el expresidente Joe Biden. Estas medidas habían priorizado la contratación de personas de comunidades marginadas y la evaluación de las prácticas laborales bajo una perspectiva de diversidad.
Según fuentes cercanas a la Administración del presidente Trump, pronto se anunciarán más acciones que podrían impactar también a empresas privadas, marcando un giro en la política de contratación e inclusión en todo el país.