Del 16 al 19 de enero se lleva a cabo la tercera cita del año en| el PGA Tour con el torneo nombrado The American Express en un extenso complejo ubicado en La Quinta, ciudad localizada al sureste de California. La segunda ronda del certamen fue celebrada este viernes en el Pete Dye Stadium Course, campo principal del lugar en una rotación que también cuenta con La Quinta Country Club y el Nicklaus Tournament Course, y tuvo como punto más destacado a uno de los participantes de la cita, que peleaba en los primeros lugares y pasó a estar entre los últimos debido a una situación pocas veces vista.
El golfista número 169 del ranking mundial, William Mouw, se hizo presente en su tercer certamen del PGA Tour de manera profesional y llegó al hoyo 16 en una posición óptima, ya que tenía -6 bajo par y peleaba por pasar el corte de este sábado. Sin embargo, ese hoyo estipulado como un par 5 de 548 metros le provocó muchos dolores de cabeza y mostró todas las dificultades del lugar apodado como la Falla de San Andrés, en honor a lo que tiene lugar en California, ya que hay distintos bunkers a los costados del green y un talud superior a los cinco metros de altura que los separa para volver a la zona de césped.
El novato de la PGA en 2025 venía de un buen jueves con 4 bajo par en el Nicklaus Tournament Course y tenía la posibilidad de mejorar su producción, ya que ese hoyo 16 está apuntado para hacerlo en un birdie (4 golpes), pero su estrategia cambió drásticamente al segundo golpe. Luego de iniciar desde el área asignada, Mouw buscó arriesgar para alcanzar el green y cayó a su pesadilla: la arena.
Su tercer golpe sobrepasó el bunker y el campo para caer nuevamente en una depresión. El cuarto lo devolvió al mismo lugar del que había salido hace instantes. A continuación, registró dos intentos fallidos por sobrepasar el enorme talud y uno de los comentaristas del PGA Tour comentó: “Dios mío, ¿qué está haciendo?”. Al séptimo golpe, lo superó, pero terminó del lado inverso en el otro declive y, al octavo, regresó al lugar original del insólito episodio.
A partir del noveno, el norteamericano de 24 años apeló a un aspecto conservador para olvidarse lo antes posible de este hoyo, ya que devolvió la pequeña bola a la calle principal rumbo al green. Sin embargo, todavía había tiempo para un nuevo capítulo: se excedió en la potencia del décimo golpe y cayó al bunker del fondo. Recién volvió a su eje en su onceavo tiro, cuando devolvió la pelota al césped y, tras dos golpes, cerró un óctuple bogey (terminar un hoyo con ocho golpes más de lo establecido).
Otro comentarista de la transmisión oficial se apiadó del golfista: “Hay momentos como este en los que solo quieres darle un abrazo a un tipo. Quiero decir, es muy difícil de ver y no puedo imaginar lo que está sintiendo”.
Se trata de una de las peores puntuaciones en un hoyo del circuito americano, pero está lejos del récord absoluto, que le pertenece a Tommy Armour con 23 golpes en el hoyo 17 del Shawnee Open de 1927 (tiró la bola fuera de los límites hasta 10 veces).
La espiral negativa de William Mouw continuó con dos bolas al agua y firmó un triple bogey en el par 3 del hoyo 17. De esta forma, pasó del -6 al +5. Terminó el día con 81 golpes y cayó al antepenúltimo lugar de la tabla general (152°). “Una auténtica historia de terror”, definió el diario AS. Quedó muy lejos de pasar el corte de este sábado y del líder Sepp Straka (-19).