Un ataque ruso contra Kiev causó la muerte de cuatro personas y dejó a otras tres heridas, según informó la administración militar de la ciudad en la madrugada del sábado. El impacto tuvo lugar en el distrito de Shevchenkivski, confirmó el jefe de la administración militar, Tymur Tkachenko, en un mensaje publicado en Telegram.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, advirtió previamente sobre una “amenaza de misil balístico” y señaló que la defensa aérea de la ciudad fue activada.
Tras el ataque, Klitschko reportó daños en un edificio del distrito de Shevchenkivski, donde las ventanas resultaron rotas y se detectó humo, así como afectaciones a una tubería de agua cercana. Además, una estación de subterráneo próxima al centro de la ciudad sufrió daños y fue cerrada temporalmente, mientras los trenes omitían esa parada.
En paralelo, las fuerzas rusas también atacaron el centro de Zaporitzhia, en el sur de Ucrania, dejando dos heridos y dañando parcialmente un edificio administrativo de una instalación industrial, informó el gobernador local, Iván Fedorov.
El ataque en Kiev, poco común en el corazón de la capital, se produce en un contexto de intensificación de las ofensivas ucranianas contra instalaciones energéticas y militares rusas en las últimas semanas.
El G7 denunció las campañas de desinformación de Rusia que impulsan “los intereses malignos del Kremlin”
El Grupo de los Siete (G7) acusó este viernes a Rusia de llevar a cabo campañas globales de desinformación a través de plataformas como el medio estatal RT y la Agencia de Diseño Social (SDA).
Según un comunicado del Mecanismo de Respuesta Rápida del G7, estas actividades buscan “subvertir a las sociedades” mediante la explotación de cuestiones sociales y políticas, con el objetivo de debilitar gobiernos democráticos y promover intereses del Kremlin.
El comunicado detalla que Moscú financia y dirige estos esfuerzos encubiertos utilizando tácticas engañosas, operaciones psicológicas y cibernéticas, así como influencia mediática.
Estas acciones están diseñadas para socavar la estabilidad de las democracias, mientras intentan desviar la atención de las crisis humanitarias y los crímenes de guerra derivados del conflicto entre Rusia y Ucrania.
En respuesta, los países del G7 —Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Alemania, Francia, Italia y Japón— reafirmaron su compromiso de contrarrestar estas operaciones de desinformación.
Además, el Mecanismo de Respuesta Rápida, que incluye a Australia, Países Bajos, Nueva Zelanda, Suecia, la OTAN y la Unión Europea, continuará implementando estrategias para combatir las amenazas informativas globales y exponer las actividades malignas del Kremlin.
(Con información de AFP y EFE)