De acuerdo con un artículo publicado por la Clínica de Psicología de la Universidad Anáhuac de México, las personas atraviesan un proceso psicológico conocido comúnmente como el duelo, el cual suele estar relacionado con algún tipo de pérdida.

En ese sentido, durante los meses siguientes los seres humanos tienden a experimentar cerca de cinco etapas diferentes, dentro de las que se destacan síntomas de tristeza, llanto, dolor y pensamientos constantes con el ser querido.

Soñar con un familiar fallecido es más común de lo que parece (Imagen ilustrativa: PEXELS)

A pesar de que con el tiempo podés aprender a gestionar los diferentes signos del duelo y se sienta mejor, es normal que sueñes con la persona fallecida, creyendo que está viva y entablando conversaciones con ella. Además, según algunas interpretaciones esotéricas, en ocasiones esto puede significar que tu ser querido volvió para visitarte en un plano onírico, es decir, un estado mental en el que no se distingue la realidad.

Por su parte, la psicología sugiere que este tipo de sueños se deben a que aún tengas emociones no resueltas, por lo que buscás una forma de comunicarte con la persona que ya no está. Otra de las interpretaciones, según el psicólogo Ian Wallace, es la reconexión que intenta hacer la mente entre las cualidades que caracterizaban al sujeto y alguna faceta de su vida que considerabas perdida tras el fallecimiento de tu conocido.

Los sueños pueden estar relacionados con su estado emocional (Imagen ilustrativa: PEXELS)

Etapas del duelo

El duelo es uno de los modelos psicológicos más conocidos en el mundo, debido a la teoría de sus cinco fases, las cuales se pueden experimentar en diferente orden y de manera paulatina o simultánea.

  1. Negación. Suele ser la primera etapa dentro del proceso del duelo, ya que las personas tienen sentimientos de incertidumbre que las lleva a cuestionar la realidad y la situación por la que están atravesando.
  2. Enojo. Durante esta fase el ser humano recurre a las emociones de ira y frustración causadas por la incapacidad de poder modificar lo sucedido, por lo que es normal que quienes estén en duelo, busquen objetivos de culpa para justificar la pérdida.
  3. Negación. En esta nueva etapa de negación, los individuos entran en un estado de esperanza, la cual los lleva a pensar que cuentan con la posibilidad de cambiar las cosas.
  4. Depresión. De acuerdo con la psiquiatra Elisabeth Kübler-Ross, en este punto del proceso la persona empezará a enfrentar la pérdida, asumiendo de manera definitiva la realidad, lo que suele estar muy asociado con los sentimientos de tristeza y desesperanza.
  5. Aceptación. Finalmente, llega el momento de la aceptación, en el que las personas podrán encontrar más calma y entenderán que la muerte forma parte de un ciclo natural de la vida.

*Por Stephany Guzmán Ayala