El nuevo sistema de tarifas por congestión en Manhattan, creado para reducir el tráfico en el centro de la ciudad, lleva pocos días en marcha y ya enfrenta resistencia. Las cámaras instaladas para registrar los peajes captan a los vehículos que ingresan a la zona central, pero algunos conductores comenzaron a ingeniárselas para evitar pagar. En respuesta, la policía intensificó los operativos y refuerza los controles.
Desde el miércoles pasado, la policía de Nueva York intensificó los operativos en la Zona de Alivio de Congestión, el área al sur de la calle 60 en Manhattan, donde se aplica el nuevo sistema de peajes para reducir el tráfico.
Durante la jornada, los agentes del Departamento de Policía realizaron estrictos controles y detectaron numerosas irregularidades. Este esquema busca recaudar US$15.000 millones, destinados a mejorar el transporte público de Nueva York.
El balance de la nueva tarifa en Nueva York
Según un informe de NBC, se emitieron 113 multas, se confiscaron 10 vehículos y se sancionó a más de 50 conductores por modificar o cubrir sus matrículas para evadir el cobro. Entre las estrategias descubiertas, algunos automovilistas utilizaron dispositivos electrónicos para ocultar las placas, mientras que otros recurrieron a métodos caseros, como cintas adhesivas o bolsas de plástico.
La policía advirtió que los controles continuarán con el objetivo de garantizar el cumplimiento del nuevo sistema, que busca aliviar el tráfico y financiar mejoras en el transporte público.
Multas y estrategias: el ingenio (y el costo) de esquivar el sistema
Desde que entró en vigor el nuevo sistema de tarifas por congestión en Manhattan, la policía intensificó los controles para evitar que los conductores lo eludan.
Las multas no son menores: pueden superar los US$1000, una cifra que ya dejó sorprendidos a decenas de automovilistas.
Según informaron las autoridades, algunos conductores recurrieron a dispositivos para cubrir sus matrículas, mientras que otros optan por soluciones más simples, como bolsas de plástico o cinta adhesiva.
La respuesta de Eric Adams a las nuevas tarifas
En este sentido, Eric Adams, alcalde de la ciudad, respaldó las medidas y fue contundente en su defensa del sistema: “No podemos permitir que unos pocos saboteen un proyecto diseñado para el beneficio de todos. Este peaje es una inversión en el futuro de Nueva York”, señaló en conferencia de prensa.
“Esto es algo nuevo y todo lo nuevo genera cierto nivel de ansiedad y opiniones, esa es la realidad. Esto es algo completamente nuevo, nunca se había hecho en nuestra ciudad antes y necesitamos ver cómo avanza el proceso. No importa lo que pase aquí, siempre habrá personas a favor, personas en contra, algunos tuitearán”, indicó el funcionario en su mensaje sobre la medida.
Sin embargo, el impacto del nuevo peaje no se limita a Manhattan. En Nueva Jersey, el gobernador Phil Murphy expresó su enojo por las tarifas adicionales que ahora enfrentan los conductores de su estado al cruzar a la Gran Manzana. “Nos quieren hacer creer que US$6 extra por viaje es algo razonable. Es una burla”, declaró Murphy a Bloomberg hace algunas semanas, a la vez que aseguró que explora vías legales para detener el plan.