A casi un año de su proclamación como rey, Federico X (56) y Mary (52) de Dinamarca celebraron su primera gala de Año Nuevo como reyes, acompañados por la familia real casi al completo. Una unión que el propio monarca distinguió en su primer discurso del 31 de diciembre, transmitido desde el Salón de Recepción del Palacio de Federico VIII en Amalienborg, donde abordó distintos temas de interés social y también habló como padre, dando detalles de su vida familiar que hasta ahora no se conocían. “Como padres de cuatro adolescentes, Mary y yo hemos aprendido que escuchar sirve de mucho. Preguntar sin asumir. Abrazar en lugar de actuar de inmediato. Nuestros hijos son diferentes. Al igual que los jóvenes. No hay una sola narrativa que abarque a todos. La mejor manera de entender quiénes son los jóvenes es dejar que cada uno exprese su voz. Una y otra vez nos impresionan con su comprensión de sí mismos y de los demás…”, dijo en referencia al príncipe heredero Christian, la princesa Isabella y los príncipes mellizos Vincent y Josephine, que lo acompañaban en fotos en blanco y negro.

Para esta ocasión especial, Mary recuperó el diseño de Birgit Hallstein que estrenó el 25 de abril de 2024 en su primer retrato oficial como Reina. Se trata de un vestido con cuerpo de terciopelo verde coordinado cromáticamente con el encaje que cubre mangas y escote. Y lo acompañó con la tiara de esmeraldas a juego con unos pendientes tipo chandelier, gargantilla y broche, todo del cofre real. Complementó el conjunto con stilettos Gianvito Rossi y clutch de cristales de J. Furmani, y llevó su insignia de la Family Order con la foto del Rey y el collar de la Orden del Elefante. Federico vistió el uniforme militar de gala de la Marina. Luciendo sus condecoraciones, el príncipe Christian, heredero del trono, debutó como miembro asistente en la comida de gala.

LA NOCHE MÁS IMPORTANTE

Después del discurso del Rey, la familia real fue la anfitriona de una comida con miembros del gobierno y autoridades del país que tuvo lugar en el Palacio de Christian VII, también en Amalienborg, y que se celebra cada 1 de enero desde el siglo XVIII. Es una tradición que la Casa Real desea lo mejor para el país en este acto y, para eso, Federico y Mary replicaron su mejor imagen: lucieron los mismos trajes que en abril de 2024, cuando posaron para su primer retrato oficial como Reyes. Él, con el uniforme militar de gala de la Marina; y ella, con un total look en verde de terciopelo y encaje, coronado con la espectacular tiara de esmeraldas reservada para las reinas danesas.

La reina Margarita, que abdicó el trono el 14 de enero de 2024, no quiso perderse este evento tan tradicional: recicló un vestido de terciopelo azul que realzó con un abrigo de piel y la tiara floral Aigrette.Los príncipes Joaquín y Marie también cerraron filas con el Rey. Ella estrenó un diseño de Rikke Gudnitz de terciopelo azul marino con escote en V y detalle de banda marcando la cintura, que engalanó con la tiara de la princesa Dagmar. Joaquín lució uniforme militar.

Una vez en el palacio, el Rey pasó revista a la Guardia Real y fueron entrando los invitados, entre los que se destacaba el príncipe Christian, recién llegado de sus meses sabáticos en África; la reina Margarita; su hermana, la princesa Benedicta; y los príncipes Joaquín y Marie, que viven con sus hijos en los Estados Unidos.

La princesa Benedicta, hermana de Margarita, optó por un vestido de terciopelo en púrpura, que destacó con la tiara Frinde (perteneció a su suegra, Margarita Sayn-Wittgenstein-Berleburg), collar y pendientes de perlas.El momento en que el Rey pasa revista a la Guardia Real.Las mesas fueron decoradas con colores blancos. En esta oportunidad,la reina María ayudó a seleccionar las flores: orquídeas, paniculatas y jazmines del castillo de Fredensborg, que se colocaron sobre los jarrones dorados de la época del rey Federico VI, diseñados en 1830.El lugar asignado para Su Maestad el Rey.Christian, Mary y Federico. El 1 de enero el Rey desveló el nuevo escudo de armas real, la Reina estrenó el suyo, donde dos estrellas de oro de siete puntas reflejan Australia, su país natal, y el príncipe heredero tiene su corona correspondiente, rodeada por el collar de la Orden del Elefante. El Rey dando su primer discurso del 31 de diciembre.La tapa de revista ¡Hola! de esta semana