Dos hechos vinculados a la fauna de la provincia de Buenos Aires tomaron por sorpresa a localidades del Partido de la Costa este jueves. En la madrugada, un puma macho murió tras ser atropellado por un vehículo de gran porte en el tramo de la Ruta 11 que conecta Villa Gesell con Cariló. Horas más tarde, una elefanta marina se asomó a la orilla y sorprendió a turistas que caminaban por las playas de Pinamar -entre los balnearios Rada Beach y CR-. La aparición del mamífero desencadenó un operativo de seguridad en playa.
Fuentes de la Municipalidad de Villa Gesell dieron a LA NACION los primeros datos sobre el hallazgo del puma, que murió poco después de ser encontrado producto de las heridas causadas por el impacto. “Un puma fue hallado anoche atropellado en la ruta. Se trata de un ejemplar macho de 1,60 metros, que habría sido impactado por un vehículo de gran porte, cuyo conductor no se detuvo. Los equipos de Zoonosis trabajan junto a los de Provincia para investigar la circunstancias bajo las que se produjo el incidente”, señala el comunicado al que tuvo acceso este medio.
Alan Kaminski, personal técnico de la Dirección de Zoonosis de Villa Gesell, profundizó luego: “Un compañero fotógrafo fue quien lo encontró durante la madrugada y dio aviso a las autoridades de Villa Gesell. Fue allí que me informaron para que haga presencia en el lugar. Como dice el parte, el puma había sido atropellado por un vehículo de gran porte, probablemente una camioneta a alta velocidad o un camión. Si hubiese sido un auto, sería el vehículo el que terminaría destruido”.
Kaminski resalta que, dentro de territorio bonaerense, este tipo de mamíferos enfrentan un proceso de adaptación debito a que su hábitat natural está siendo suplantada por desarrollos urbanos -casas y edificios- y agrícolas. “El puma puede adaptarse a estar fragmentación. Lo que tenemos que trabajar en todo caso en en el miedo a verlo. Se trata de un depredador que regular mucho a la naturaleza. No mata ganados ni perros. Son más problema en todo caso los jabalíes o las jaurías de perros. Los pumas suelen comer vizcachas, carpinchos, otros tipos de roedores y ñandúes”, explica a LA NACION.
“La única prevención que podemos tener es mayor luminaria. En las zonas donde se suelen ver pumas, las casas tienen mayor iluminación para que los conductores puedan verlos y evitar accidentes”, resalta el integrante de la Dirección de Zoonosis de Villa Gesell, y aclara para cerrar: “Los pumas no suelen salir a la ruta por deseo propio. En todo caso, si apareció allí es o por que lo estaban persiguiendo o intentaron cazarlo. Hay que educar a la gente para que los deje vivir en paz”.
Tras el episodio del puma, las playas de Pinamar Norte fueron testigo de la aparición de una elefanta marina, que merodea entre las costas y calles de la ciudad balnearia hace 20 días. Un guardavidas que se encontraba en la zona donde fue avistado el mamífero cuenta a este medio: “Este ejemplar está dando vueltas por estas playas desde la mañana. Primero lo vimos más al norte y ahora apareció más cerca de los balnearios Rada Beach y CR. Quienes hacemos temporada la conocemos con cariño como ‘cejitas’. Hace varios días que está por acá”.
Fernando Barone, que coordina el área de Zoonosis en Pinamar, habló con LA NACION al respecto y precisó: “Hace más de 15 días que está dando vueltas por Pinamar. Una semana atrás, coordinamos un operativo con Mundo Marino para sacarle de las calles porque se había quedado estancada. Y hoy volvió a aparecer”. “Está en un proceso de muda de piel. Es por eso que sale del agua y se queda tirada en la arena. Está buscando calor. Muchas de ellas son crías y tampoco están acostumbradas a estar mucho tiempo en el agua. Es por eso que salen del mar y se tiran en la orilla para descansar algunas horas”.
Sobre cómo proceder en este tipo de casos, Barone remarca para concluir: “Hay que cercar el área de inmediato y no permitir que nadie se acerque, sobre todo niños y mascotas, ya que les puede hacer daño. El elefante marino es mucho más agresivo y territorial de lo que puede ser incluso un puma. Es necesario tener en cuenta que tampoco debe ser mojado ya que, justamente, sale a la superficie porque tiene frío. Finalmente, nadie tiene que arrastrarlo al mar. El ejemplar vuelve solo”.