Independiente afronta una temporada especial en su búsqueda de volver a los primeros planos deportivos. La crisis institucional que lo envuelve desde hace bastante tiempo ha hecho mella en lo futbolístico: no jugó torneos internacionales los dos últimos dos años. Por eso, la clasificación a la Copa Sudamericana, conseguida en 2024, le da algo de aire, y sobre todo de dólares, algo muy necesario en un club ahogado por las deudas. Julio Vaccari surfeó el semestre al frente de un equipo con peor funcionamiento que efectividad, y así logró algo de paz para encarar el futuro inmediato.

Un lapso en el que el DT debió administrar, además, algunos inconvenientes -no menores- en lo extradeportivo: las sanciones por indisciplina a Marco Pellegrino y Diego Tarzia y la momentánea exclusión de Joaquín Laso por una disputa entre el representante del defensor y la dirigencia. Contratiempos que se sumaron a un andar futbolístico que no convenció a los simpatizantes. Por ejemplo, durante el ciclo Vaccari no se ganó un solo clásico: fueron cuatro 0 a 0.

Vaccari capeó el temporal que muchas veces en un equipo grande arrasa rápidamente con técnicos sin demasiada experiencia o espalda. Y tomó nota tras seis meses de vértigo. Primero hizo la lista de los que no están en sus planes. Varios ya dejaron el club: a Joaquín Laso y Damián Pérez (firmó con Defensa y Justicia) no se les renovaron sus contratos; Alex Luna volvió a Atlético Rafael tras el año de préstamo; Lucas Saltita González fue vendido a Defensa y Justicia en 800.000 dólares, y Sergio Ortiz fue cedido a Deportivo Riestra. Además, intentan rescindir el contrato de Santiago Toloza y buscarán clubes para Baltasar Barcia (volvió a mitad de año y no sumó minutos y Nicolás Vallejo. En las últimas horas se confirmó la cesión del arquero Diego Segovia a Deportivo Maldonado, por lo que se busca a un suplente para Rodrigo Rey. Lo más probable es que se cierre al cordobés Joaquín Blázquez, de 23 años, de Talleres.

La mejor noticia para terminar 2024 fue la compra del pase de Kevin Lomónaco, el futbolista revelación del torneo para el Rojo, la gran figura que tuvo el equipo. Independiente compró el 75 por ciento del pase a Red Bull Bragantino a cambio de 3 millones de dólares y se aseguró a un zaguero de 23 años con mucha proyección y valor de reventa. A partir de esa decisión, empezaron a llegar caras nuevas.

El primero fue Pablo Galdames, volante mixto chileno, que arribó sin cargo tras jugar en Vasco da Gama. Vaccari lo conoce de su paso por Vélez, donde Galdames estuvo tres años -fue compañero de Federico Mancuello- hasta que entró en conflicto y se fue libre. Su actualidad es una incógnita, ya que en el segundo semestre de 2024 actuó muy poco en el club carioca.

Pablo Galdames jugó un puñado de partidos en la selección de Chile

La cara que más consenso generó es la de Luciano Cabral, volante ofensivo mendocino con pasado en Argentinos Juniors -donde Vaccari, entonces asistente del técnico Gabriel Heinze, lo conoció-. Cabral tiene 29 años y es habitual convocado en la selección de Chile, país del que recibió la ciudadanía. Se desempeñó el último año en Coquimbo de Chile y en León de México. Tuvo un quiebre en su vida en 2017, cuando fue condenado por haber participado de un homicidio junto con su padre. Tras poco más de cinco años preso, recuperó la libertad y volvió a jugar. “Ojalá que me puedan dar la camiseta con la número 10. Deseo tenerla. La he usado en Argentinos, que es una camiseta muy especial. Para mí sería un honor usar la 10 en Independiente”, se ilusionó Cabral, de quien Independiente compró el 70 por ciento al Grupo Pachuca. Su deseo se hizo realidad: utilizará el número que hizo grande Ricardo Bochini.

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Sin dudas, Vaccari tiene como objetivo reforzar la zaga central. Con Lomónaco como titular inamovible, su respaldo es Juan Manuel Fedorco, aunque es uno de los que considera prescindibles. En cuanto a la posición de zaguero izquierdo, que quedó desierta con la salida de Laso y la situación de Pellegrino (su préstamo de Milan es hasta junio, pero buscan cortarlo), ya hay novedades. La primera, extraña: se anunció la incorporación de Nicolás Freire, de 30 años, y último paso en Inter Miami, donde en mayo sufrió una grave lesión de rodilla. Como se encuentra en la fase final de su recuperación, estará disponible recién a partir de marzo, aunque ya empezó a entrenarse con el plantel; incluso, Independiente anunció que el primer semestre no se hará cargo del salario. Una incógnita. Llega a préstamo hasta fin de año desde Pumas de México, dueño de su pase, con opción de compra por 1.200.000 dólares. La segunda, más terrenal: se incorporó Sebastián Valdez, zurdo de 29 años y 1,91 metros, que terminó su contrato con Central Córdoba de Santiago del Estero. Con pasado en el fútbol de ascenso, fue titular en el equipo que conquistó la última Copa Argentina y consiguió la histórica clasificación a la Copa Libertadores.

El lateral izquierdo es otro de los flancos por reforzar. Tras la salida de Damián Pérez, quedan para esa posición Adrián Spörle (no convenció su temporada) y el juvenil De Irastorza (solo un partido en primera). Malcom Braida, de San Lorenzo, es el apuntado, aunque la principal traba es el alto contrato que desea percibir. En la punta derecha, Federico Vera todavía no respondió a las expectativas desde su llegada a mitad de 2024 procedente de Unión. El versátil chileno Felipe Loyola es una opción para ocupar esa posición, en la que suele jugar cuando es convocado a la selección de su país.

Independiente también busca una opción de mediocampista central como variante a Iván Marcone, que acordó su continuidad hasta 2026. Los cañones apuntan al uruguayo Rodrigo Fernández Cedrés, 29 años, de Santos, que jugó durante 2024 en Newell’s (31 partidos).

Rodrigo Atencio volvió del préstamo en Central Córdoba, donde fue figura

Para la mitad de la cancha, hay más dudas que certezas. Con la salida de Saltita González a Defensa y Justicia, se le buscará una salida a Kevin López (volvió del préstamo del Halcón de Varela). El regreso del zurdo Rodrigo Atencio, figura de Central Córdoba de Santiago de Estero, parecía un refuerzo; sin embargo, sobrevuela la posibilidad de que emigre: Barracas Central lo quiere. Todavía no está claro qué pasará con el ecuatoriano Johnny Quiñónez, un futbolista incorporado durante la gestión de Carlos Tevez que nunca tuvo demasiadas oportunidades.

Walter Mazzantti, delantero de Huracán, es la obsesión de Independiente para reforzar el ataque

En la ofensiva, Independiente tiene superpoblación y espera en algunos casos la salida de futbolistas. Hay posibilidades de una venta de Santiago Hidalgo (Torino podría ofertar por una compra en estos días). Como extremos tiene a Montiel, Santiago López y Diego Tarzia (en veremos por cuestiones disciplinarias), a los que se suman el mencionado Cabral, Brian Martínez (se recuperó de una lesión tras su vuelta de Everton de Chile y renovó contrato) y el juvenil Enzo Taborda (aún no debutó). Vaccari quiere sumar jerarquía y experiencia, por lo que se negocia en estas horas por Wálter Mazzantti, de Huracán, cuyo pase es compartido con Huachipato (Chile) y es casi una obsesión del DT. No parece fácil la operación, ya que la erogación excede las posibilidades de la tesorería roja (se habla de casi 3,5 millones de dólares).

En cuanto al puesto de centrodelantero, está cubierto con el paraguayo Ávalos (aquietadas las aguas sobre una posible salida), Ignacio Maestro Puch (se renovó el préstamo de Atlético Tucumán y terminará en una compra) y Matías Giménez Rojas, ya recuperado de la lesión de rodilla (es pretendido por Talleres). A ellos se suma Alexis Canelo, a quien también buscarán negociar.

Mientras espera completar un mercado de pases a la altura de las expectativas de sus hinchas y, sobre todo, de su DT, una mala noticia irrumpió con fuerza mediática: la caída de una inhibición en FIFA, tras un reclamo presentado por el representante de Joaquín Laso. La deuda es por una comisión de poco más de 80.000 dólares. Una cifra que Independiente no tendrá problemas en afrontar, pero que constituye otra mancha para la gestión encabezada por Néstor Grindetti.

Altas confirmadas

  • Kevin Lomónaco (compró el pase a Red Bull Bragantino: 3 millones de dólares por el 75%)
  • Pablo Galdames (libre, de Vasco da Gama)
  • Nicolás Freire (préstamo sin cargo, de Pumas de México)
  • Luciano Cabral (compró el 70% del pase a Grupo Pachuca)
  • Sebastián Valdez (libre, de Central Córdoba de Santiago del Estero)
  • Ignacio Maestro Puch (renovó el préstamo de Atlético Tucumán)
  • Brian Martínez (volvió del préstamo de Everton de Chile)
  • Rodrigo Atencio (volvió del préstamo de Central Córdoba de Santiago del Estero)
  • Kevin López (volvió del préstamo de Defensa y Justicia)

Bajas confirmadas

  • Julio Buffarini (terminó su contrato)
  • Joaquín Laso (terminó su contrato)
  • Damián Pérez (terminó su contrato)
  • Lucas González (vendido a Defensa y Justicia en US$ 800.000)
  • Álex Luna (no se renovó el préstamo con Atlético Rafaela)
  • Sergio Ortiz (préstamo a Deportivo Riestra)
  • Patricio Ostachuk (préstamo a Tristán Suárez)
  • Diego Segovia (préstamo a Deportivo Maldonado)
  • Nicolás Messiniti (libre)
  • Thomas Ortega (libre)