Leopoldo Martín “Pitito” Martínez, quien quedó al mando de la barra brava de Rosario Central tras el doble crimen de Andrés “Pillín” Bracamonte y Daniel Raúl “Rana” Attardo ocurrido a metros del estadio el pasado 9 de noviembre, fue detenido en las últimas horas por la Tropa de Operaciones Especiales de la Policía de Santa Fe, según confirmaron fuentes del caso a Infobae.

Fue capturado por orden de los fiscales Luis Schiappa Pietra, Georgina Pairola y Alejandro Ferlazzo en su casa del barrio Villa Manuelita, en Rosario, que había sido baleada a fines del mes pasado. Los fiscales sospechan que “Pitito” habría sido el entregador, o uno de los entregadores, del capo y su ladero.

Durante el allanamiento, se le incautó una riñonera y un teléfono, que podrá ser peritado.

En el ataque a su casa de fines del mes pasado, gabinete criminalístico de la Policía de Investigaciones incautó ocho vainas servidas calibre .40 que fueron enviados a peritar. “Pitito” no estaba en su casa en ese momento: los investigadores sostienen que se encontraba en la cancha de Rosario Central con motivo del último partido contra Racing.

La cuadra donde vive

Según indicaron a Infobae investigadores policiales al momento del ataque, “Pitito” había recibido hace varios días una advertencia de la banda narco “Los Menores” para que dejara el mando de la barra. Martínez, aparentemente, se negó.

El hoy detenido era el sucesor aparente, el número 3 de la barra. De acuerdo a datos que se desprenden de distintas investigaciones, por encima de él estaban “Pillín” Bracamonte y “Rana” Attardo. Una de las sospechas de los fiscales apunta a que “Los Menores” buscaban copar el mando de los violentos de Rosario.

Lisandro Damián Contreras, alias “Licha”, acusado de ser uno de los capos de Los Menores, una de las banda narco que más poder cobró en los últimos tiempos, cayó el pasado sábado en un operativo a cargo de la División Delitos Fiscales de la Superintendencia de Investigaciones Federales de la Policía Federal. Fue arrestado al bajarse con su novia de una costosa camioneta en un comercio en Tigre. Cultor de un perfil bajo, los investigadores que le siguen el rastro sospechan que tendría un rol clave en el manejo logístico de la llegada de la droga a Rosario para varias organizaciones criminales.

Sin embargo, todavía no se encuentra acusado por el crimen de Bracamonte.

Martínez había sido arrestado el pasado 19 de julio por Gendarmería en inmediaciones de los complejos FONAVI de Sánchez de Thompson y Grandoli, en el barrio Municipal de la zona sur. Estaba dentro de un auto junto a Carlos Andrés “Bichi” Suárez, otro integrante de la barra brava de Rosario Central, mientras se dirigían a la cancha para ver al Canalla, que jugaba contra Sarmiento de Junín.

Después de ese operativo, “Pitito” quedó en libertad, ya que la Justicia federal buscaba solo a Suárez por estar vinculado con dos detenciones ocurridas el 1º de julio pasado en San Justo, en un procedimiento en el que Gendarmería detuvo a dos sospechosos en una camioneta con 464 kilos de cocaína y dos fusiles Colt.

Martínez también había sido allanado en su casa de Villa Manuelita en 2020 por una causa por lavado de activos que seguía la Justicia provincial contra “Pillín” Bracamonte. En esa ocasión, los agentes incautaron un chaleco de la UOCRA, indumentaria de Rosario Central, cartuchos de distintos calibres y una pistola calibre .380 con numeración suprimida.

“Pitito” solo fue imputado por el arma con numeración limada. Luego, recuperó su libertad.