BEIRUT.– Los bombardeos israelíes mataron el sábado a 15 personas en el centro de Beirut y a 38 en bastiones de Hezbollah en el este y el sur del Líbano, mientras la violencia recrudece en una guerra abierta entre Israel y el grupo terrorista.
Una fuente de seguridad libanesa indicó que “el objetivo” de los bombardeos en el barrio de Basta, en el centro de la capital, fue un alto mando del movimiento chiita proiraní. Sin embargo, el diputado de Hezbollah Amin Sherri negó que un dirigente del movimiento estuviera en el lugar.
Israel, que también está en guerra contra Hamas en la Franja de Gaza desde hace más de un año, busca neutralizar al grupo terrorista palestino y a Hezbollah, aliados de Irán, su principal enemigo en la región.
En la Franja de Gaza, Israel prometió aniquilar a Hamas tras la letal incursión de milicianos islamistas en el sur del país, el 7 de octubre de 2023, que desencadenó la guerra. En el Líbano, busca poner fin a los disparos de cohetes que Hezbollah lanza contra territorio israelí desde hace más de un año.
Tres fuertes explosiones sacudieron la capital libanesa por la mañana. Los bombardeos provocaron por lo menos 15 muertos y 63 heridos, según el Ministerio de Salud libanés, y redujeron a escombros un edificio de viviendas en el densamente poblado barrio de Basta. Mientras tanto, los rescatistas continúan buscando víctimas bajo los escombros.
Powerful airstrikes hit the Basta area of central Beirut early Saturday, shaking the Lebanese capital and potentially threatening an ongoing U.S.-backed effort to negotiate a cease-fire between Israel and Hezbollah.
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— The Washington Post (@washingtonpost) November 23, 2024
“Es la primera vez que me despierto gritando de terror”, declaró Salah, un habitante de Basta y padre de dos hijos, que relató que salió corriendo de su casa con su familia.
Las bombas cayeron también en los suburbios del sur de Beirut, un bastión de Hezbollah. El Ejército israelí afirmó que sus objetivos en esta zona fueron “centros de mando de Hezbollah y otras infraestructuras terroristas”.
En el este y el sur del Líbano, por lo menos 38 personas murieron por bombardeos israelíes, según el Ministerio de Salud. La Agencia Nacional de Noticias (NNA) libanesa afirmó que el Ejército israelí trata de “hacerse con el control” de Jiam, localidad del sur cerca de la frontera, donde libra encarnizados combates con Hezbollah.
Hostilidades
El grupo libanés abrió el 8 de octubre del año pasado, al día siguiente del estallido de la guerra en Gaza, un frente contra Israel en apoyo de Hamas.
Después de casi un año de hostilidades transfronterizas, Israel lanzó el 23 de septiembre una campaña de bombardeos contra bastiones de Hezbollah y una semana después inició operaciones terrestres en el sur del Líbano.
El objetivo de la campaña israelí es alejar a Hezbollah de las zonas fronterizas y permitir el regreso de los 60.000 desplazados del norte de Israel por los intercambios de disparos con Hezbollah, que también provocaron la huida de decenas de miles de habitantes del sur del Líbano.
Más de 3650 personas han muerto en el Líbano desde hace más de un año, la mayoría desde septiembre, según el Ministerio de Salud.
Por su parte, el jefe del Pentágono, Lloyd Austin, declaró el sábado en una llamada a su homólogo israelí, Israel Katz, que Estados Unidos está comprometido con una solución diplomática en el Líbano, pero instó a Israel a mejorar las condiciones en Gaza, donde los bombardeos dejaron 19 muertos, según la Defensa Civil.
El territorio palestino, gobernado por Hamas desde 2007, está sumido en una grave crisis humanitaria desde el estallido de la guerra.
Son 97 los rehenes que siguen cautivos tras el secuestro de 251 personas durante la incursión del 7 de octubre, aunque Israel estima que 34 murieron. Hamas anunció el sábado que una rehén falleció en combates en el norte del territorio, información que Israel está verificando.
Agencias AP, AFP y DPA