Luego de 20 años, Coca-Cola Andina Argentina reactivó su planta embotelladora ubicada en la localidad de Godoy Cruz, en Mendoza. La compañía de capitales chilenos, socia de la multinacional de bebidas, inauguró hoy las instalaciones, cuya obra inició en 2021 y demandó una inversión de US$40 millones.
Mediante esta operación, a la cual catalogó como “una de las más grandes y rápidas de Sudamérica”, la firma producirá envases retornables PET de 2 y 2.5 litros y de vidrio, de 1.25 litros. Tiene la capacidad de procesar hasta 48.000 litros por hora en distintos formatos de envase y en simultáneo.
Según las autoridades de la firma, el recorrido de estos envases funcionará mediante un sistema de logística Inversa, por el que los camiones de distribución que llevan las botellas llenas son los mismos que vuelven con los envases vacíos a la fábrica. Asimismo, indicaron que los envases PET, que pueden ser reutilizados en promedio hasta 25 veces, cuentan con un diseño homogéneo llamado “botella universal”, una iniciativa que comenzó en la Argentina y hoy es producida por toda América Latina: la botella no tiene marcas, de modo que puede ser reutilizada para todas las variedades de Coca-Cola, de Fanta y de Sprite.
Coca-Cola Andina Argentina había montado por primera vez la planta en la década de 1950 en este mismo predio, aunque, en el marco de la crisis de 2001, la compañía la discontinuó y la transformó en un depósito.
“Ahora, ante el avance de la retornabilidad en la zona de Cuyo, decidimos hacer esta inversión y empezar a producir acá las botellas, para llegar mejor a nuestros clientes”, señaló Enrique Pérez Estévez, gerente de Asuntos Públicos, Comunicación y Sustentabilidad de Coca-Cola Andina Argentina en diálogo con LA NACION.
En esa línea, precisó: “El 50% de nuestras ventas en la zona de Cuyo corresponde a envases retornables. Hay una conciencia muy importante dentro de los cuyanos sobre la retornabilidad, a la vez que esto trae también un beneficio para el bolsillo”. La nueva planta cubrirá las provincias de Mendoza, San Juan y San Luis, y hará tándem con las otras líneas de producción que la firma tiene, en Córdoba, en Trelew y en Bahía Blanca.