En el 2020, llegaron a TikTok miles de creadores de contenido que, con el objetivo de pasar el tiempo, empezaron a compartir las perlitas de su vida cotidiana a través de videos cortos. Entre ellos, apareció Lola, una perrita oriunda de Santa Fe que dejó a todos anonadados con su amor por los dibujos animados. Esta Yorkshire Terrier se hizo viral al demostrar su capacidad para manejar la computadora, la tablet y el televisor para poner videos Paw Patrol, su serie favorita, sin ayuda de nadie.
Narella Brambilla, su dueña, fue quien se encargó de mostrarle al mundo las habilidades de esta perrita que, en la actualidad, ya cuenta con más de cuatro millones de seguidores. En una entrevista con LA NACIÓN, la joven reveló cómo surgió la idea, cómo es el detrás de escena de sus videos y cuáles son los desafíos más grandes de tener una perrita influencer.
“Desde bebé mira la tele y le llaman la atención los sonidos. Un día yo le puse videos de gatitos para ver qué hacía y se quedó mirando. Desde ese momento nunca más paró. Después arrancó con la tablet y con Paw Patrol, porque yo le ponía videos. Al verlos seguido, les agarro un cariño especial”, explicó.
Por este motivo, para la familia de Lola, su comportamiento se volvió algo completamente normal. Sin embargo, cada vez que llegaban visitas, se asombraban con su picardía. “Creo que ya estaba tan acostumbrada que no le daba mucha importancia”, aseguró su dueña. Pero gracias a la insistencia de sus amigas, la estudiante de medicina de 21 años decidió compartir su primer video. “Ellas estaban seguras de que se iba a hacer viral. Y desde el primero hasta el último video que subí, todos lo fueron”, añadió.
Los videos más populares de Lola son, sin dudas, aquellos en los que usa la computadora por sí sola. “En la pandemia, yo estudiaba desde la computadora y tocaba los botones, entonces ella empezó a hacer lo mismo. Quería que se la dé a toda costa y me ladraba para pedírmela. Ahí vi que tocaba las teclas y movía el mouse con la patita. Esa habilidad la descubrí mientras hacíamos videos. Estar en las redes la estimuló un montón”, recordó.
El detrás de escena de la mascota influencer
Ser creador de contenido lleva muchísimo tiempo. Esto se vuelve aún más intenso cuando el influencer en cuestión es una mascota. “No tenemos una rutina de grabación, porque si la perra está cansada o no tiene ganas no podemos hacer nada. Trato de hacerlo más llevadero y grabo nuestro día a día. Cuando veo que Lola está usando el celular, prendo la cámara y la empiezo a grabar”, explicó Nerella.
Además, aseguró que Lola entiende perfectamente en qué momento tiene una cámara en frente: “Ella se da cuenta cuando empiezo a grabar. Le encanta la cámara. Cuando hay gente en casa hace lo mismo, busca la forma de llamar la atención y quiere que le dé el teléfono a propósito”.
Narella ya sabía bastante del mundo de las redes antes del salto de Lola al estrellato, ya que la cuenta que hoy todos conocen empezó siendo suya. “Yo hacía videos de comedia y llegué a juntar 500 mil seguidores. Después arranqué con lo de Lola, todo el mundo me empezó a seguir y me pedían videos de la perra. Con eso llegué a los cuatro millones que tenemos hoy”, reveló.
No obstante, hoy en día no encuentra el tiempo para retomar su proyecto: “Son muchas las cuentas que manejo para Lola, en YouTube, en Instagram y en TikTok… Además, estudio medicina y trabajo a la vez. Invertí lo que ganamos en las redes y abrí un local de ropa”.
La fama, los canjes y los representantes de Lola
A medida que los videos de Lola fueron ganando popularidad, Narella empezó a recibir decenas de propuestas de marcas de accesorios para mascotas que querían publicitar sus productos. “Después de uno o dos meses de hacer videos, ya arranqué a recibir canjes para ella. Ahora tiene muchísima ropa, camas… Hasta me regalaron ropa para mí con la cara de la perra. La verdad que de todo eso ya tenemos de sobra y llega todo el tiempo, es continuo”, comentó.
“Ahora tenemos un representante, que se encarga de hablar con las marcas y hacer los arreglos. Al principio a mi familia le parecía una locura que Lola tenga manager. Me dijeron ´hasta que no veamos la plata no te vamos a creer´”, relató entre risas. Asimismo, aseguró que el trabajo más loco e inesperado que le tocó hacer a Lola con una marca fue la publicidad que hizo para la película de Paw Patrol. “Se hizo muy viral, estaban todos enloquecidos”, recordó.